Capítulo 6

2111 Words
Querido lector, no lo puedo creer llegó el día de la inauguración, oficialmente hoy se abren las puertas del hotel, esta semana ha sido una locura, tocó organizar un millón de cosas y me puse al frente de todas ellas, sé que podía delegarlas pero yo soy la jefe novata y quiero estar al frente de todo. No puedo de la emoción, casi no pude dormir en toda la noche y aún no salía el sol cuando nuevamente estaba despierta a las 5:00am, Jamás había estado despierta tan temprano y menos para ir a trabajar. Llegó al hotel a las 7:00am, Ethan se quedó trabajando desde casa mientras me encargó de ultimar detalles de la fiesta de inauguración, él llegará al hotel en la noche. Revisó la reserva de mi hermano y veo que es para dos personas,¿será que por fin voy a conocer a su novia?, nunca le he conocido novia oficial, siempre salió con muchas mujeres, ha ido a las fiestas más exclusivas con las modelos y actrices más apetecidas en el mundo, pero jamás he visto que viaje solo con alguna de ellas. Encargué a Carlos la búsqueda de mi hermano al aeropuerto, viene en vuelo privado desde los Ángeles, pero no es el avión familiar, ¿Será que es el de su novia?, a última hora decido ir con Carlos a buscarlo. - ¡Carlos! espera, yo te acompaño-. Le grito desde la distancia y corro a alcanzarlo. - Pensé que se iba a quedar a organizar algunas y revisar los últimos detalles-. Me dice mientras me espera. - Hay gente para todo, ahora quiero ver a mi hermano y darle un abrazo. - Entonces vamos, tu hermano nos espera. El viaje en el carro estuvo lleno de música y risas, en el hotel soy la jefe gruñona, que ladra ordenes en inglés y español, para algunos trabajadores soy la niña pedante hija del dueño que ha tenido el camino fácil, otros me han visto en portadas y videos de pasarlas, algunos me ven a la distancia y me temen, pero con Carlos soy yo, rio relajada y habló de todo cuánto quiero, les juró que intente ser la jefe odiosa con él, pero no lo logré, creo que por algún motivo me conocía demasiado. - Blue, ¿lista para esta noche? - Te confieso que estoy asustada, es la primera vez que estoy al frente de todo. Mi padre siempre tenía alguien para cada cosa, el hace mucho no está al frente de estos temas. - ¿Entonces qué hace su padre? - Dirige con el dedo, como un rey a sus súbditos. Y yo era su princesa- simulo tener una corona en mi cabeza con los dedos de mis manos – ahora soy una súbdita más del gran Jacob Golman. - Te equivocas Blue, ahora eres la reina, y el hotel HyG Cartagena es tu reino. Una corriente de emoción me recorre, dejándome en silencio, después de ese cumplido que podría decirle, me quedó viendo el horizonte cuando Carlos rompe el silencio con una de sus típicas frases que me dan risa. - ¿Porque tan callada?, te comieron la lengua los ratones. - ¿Los ratones hicieron qué? Se ríe mientras parquea, hemos llegado al aeropuerto, me ayuda a bajar del auto y el contacto con su mano me pasa escalofríos, me gusta su tacto, sus manos son grandes y fuertes, su piel bronceada y sonrisa amplia, apartó de mi mente esos pensamientos. El celular suena y es mi hermano que creo que llegó antes de tiempo. - Hola hermanito hermoso, ¿ya estás en mi reino? - Acabamos de aterrizar reina Blue, en un momento nos vemos. Sonrió tan ampliamente que creo que sin querer se la contagia a él, caminamos juntos hasta la puerta de salida y esperó pacientemente que aparezca. A la distancia veo a mi hermano arrastrando su maleta y viene acompañado de alguien, pero no es la despampanante novia que creí sino con alguien que nunca había visto. Corro y me abalanzo hacia él apenas atraviesa las puertas de vidrio haciendo que dejé caer su maleta y abrazándolo cual koala, con brazos y piernas. - Hermanito te extrañe un montón, como de aquí a la luna. - Yo también Blue, pero ya bájate, que me vas a hacer caer y todos nos ven. - No me importa si todos nos ven, yo extrañaba a mi hermano y se lo voy a demostrar. Le doy un beso estilo Looney Tunes y muy a mi pesar lo suelto volviendo a poner los pies en la tierra. - Hermanito te presento a Carlos que es mi mano derecha en todo este enredo de la inauguración. - Un placer señor, la señorita Blue me ha contado mucho de usted. Ellos se estrechan las manos y le hago señas para que me presente a su acompañante. - Hermanita, te presento a Adam, es un buen amigo mío y quería conocer tu reino-. Dice en tono dudoso. Intercambio miradas con Carlos, creó que tanto el cómo yo pensamos lo mismo, sin embargo, estrecho la mano de Adam y lo invito a unirse a nosotros. El viaje de regreso al hotel es inusualmente silencioso, me siento de copiloto, mi hermano y su amigo van juntos en la parte de atrás hablando en susurros rápidos, mientras sigo intercambiando miradas con Carlos en el espejo retrovisor, estos dos están cocinando algo y no me quieren hacer partícipe. Llegamos al hotel y siendo el primer huésped lo acompañe personalmente a hacer el ingreso. - Señor Benjamín Goldman, tiene una reserva en la habitación King para dos personas. - Sí señor. Y mientras él seguía haciendo el ingreso yo no podía parar de pensar, mi hermano es gay y jamás me lo ha dicho, cómo puede ser posible que no compartiera conmigo algo tan importante, cuándo yo le cuento todo, aunque pensándolo bien, en los últimos años hay muchas cosas que no hemos compartido. Sacudo esos pensamientos y pongo una sonrisa de oreja a oreja para recibirlo y mostrarle el hotel, le muestro cada rincón, es hermoso, estoy tan feliz, pero ahora el verdadero trabajo apenas comienza, solo faltan diez meses para alcanzar el millón de dólares y sigo a menos. - Hermanito, ¿cuándo te termines de instalar me regalas un momento para hablar? - Claro que sí, yo llego a tu oficina. Caminó de vuelta con un montón de cosas en mi cabeza, me cruzó con diferentes personas, doy indicaciones y recuerdo que me deben traer mi vestido. Alicia, mi asistente, está esperando atenta en la puerta de la oficina con un vestido de una diseñadora local, abro la bolsa de tela donde viene guardado y es hermoso, es n***o y largo, con pequeñas decoraciones en pedrería y una flor que sobresale sobre el hombro izquierdo, dejando mi espalda al descubierto, es perfecto. Escucho un sonido familiar a mi espalda, es Benjamín, su cara esta apenada e incómoda, abro la puerta haciéndolo seguir, luego de pedirle a mi asistente que por favor no nos interrumpan. - Benjamín, suéltalo ya. - Soy homosexual y Adam es mi novio. - ¿Por qué no me lo habías dicho antes, tan poco confías en mí? - No es eso Blue, es que fue muy difícil para mí aceptarlo - Difícil que, en pleno siglo XXI es de lo más normal, ¿cuál es el misterio? – le reprocho alzando un poco la voz- podía decirme: Blue soy homosexual y ya, podrías haberlo dicho hace mucho. - Perdóname por no confiar en ti antes, pero acuérdate que somos como los reyes, de nosotros solo esperan una cosa, herederos - Si yo sé, pero para eso estoy aquí, para apoyarte en todas las cosas, para ser tu escudera en tus batallas, para eso soy tu hermana, y si no confías en mi entonces en quien. Por sus ojos corren lágrimas, se pone de pie camina hasta a mí y me abraza, haciéndome llorar, ahora somos dos llorando por una bobada. - Hermanito ya no me hagas llorar que hoy debo verme bonita, y los ojos hinchados de lágrimas no ayudan. - Tú y tus cosas- dice riendo. - ¿Cuántos años me haz guardado el secreto? - Desde la secundaria - Te odio benjamín Goldman, son más de diez años de misterio. - Perdóname Blue, y cuéntame quienes ese tal Carlos - Un trabajador más de este hotel que se volvió mi mano derecha en todo este proceso. - No te creó, ese intercambio de miradas es muy sugestivo. - Te juró que es solo un trabajador, es más tengo algo que contarte, regresé con Ethan. - ¿Por qué con Ethan? - Hace un mes nos encontramos y volvimos a salir, justo ahora está en mi apartamento esperando la noche para el evento. - Blue, no, por favor no-. Dice en tono de súplica. - Deja el misterio, ya no somos los mismos. - Es que no entiendes. - Entonces explícame. - No es tan fácil - Empieza por alguna parte, pero inicia, de lo contrario no voy a dejarme con él. A las afueras el sonido de lo que parecía ser una discusión iba en aumento, abro la puerta, esta Ivy discutiendo con Carlos y Alicia, lo que salva a Benjamín de darme una explicación. - ¿Qué paso aquí?- preguntó enojada, hay muchas cosas que no me han dicho y odio las mentiras. - Que estos dos no me quieren dejar entrar, diles que soy tu mejor amiga y que necesitó verte urgente. - ¿Quién se murió para que sea tan urgente? - Pues yo si no te veía. - Señorita Blue- dice Carlos tímido – disculpe el ruido y la interrupción es sólo que no tiene reserva y mucho menos esta en la lista para la fiesta de hoy. - Tranquilo Carlos, gracias, revisa si hay alguna habitación libre y la acomodas, y Ivy luego habló contigo, ahora debo hacerme cargo de otras cosas. Carlos se va con Ivy quien arrastra su maleta de brillos rosa y me quedo mirando a Benjamín a los ojos. - ¿Qué es lo que pasa con Ethan? - ¿Lo quieres o es otro de tus caprichos? - No estoy muy segura, pero creo que lo quiero, después de él no volví a tener otra relación. - Entonces después te cuento lo que tengo pendiente, esta noche tienes un evento importante y no quiero dañarte el día. - Ya me lo dañaste, ahora no voy a poder dejar de pensar en ese asunto. - Te prometo que me quedó un día más y conversamos de todo. - Trato- e hicimos el saludo especial de los hermanos Goldman. Sin embargo, mi mente no paraba de dar vueltas, y como siempre sucede, cuándo más cosas tienes que hacer el tiempo más rápido vuela, casi no me dio tiempo de vestirme, la estilista apenas me peino con el cabello suelto haciendo algunas ondas suaves y maquillaje estilo smokey eyes perfecto para mis ojos claros y todo en menos de media hora, no había más tiempo, me puse el vestido de fiesta y subí a los tacones de 10cms, me miro en el espejo, cuanto extrañaba verme así. El hotel está ocupado casi en su totalidad, por cada pasillo hay invitados, toman de sus copas, comen y disfrutan de la velada, no he hablado ni visto a Ethan. Cuando el celular suena. - Amor ¿dónde estás? - Apenas terminado de vestir, aún en la oficina. - No te muevas. A los pocos minutos el entra con su smoking, me dan ganas de desvestirlo, pero es momento de controlarme hay una fiesta de la que yo soy la anfitriona, se acerca dándome un beso suave en los labios para no dañar el maquillaje. - Te ves hermosa-. me susurra con voz melodiosa y ronroneante. - Gracias y tú también, - Está lleno el hotel, me cruce con tu hermano e Ivy, no sabía que ella venia-. Su voz suena a reproche. - Yo tampoco llegó a última hora y no he podido hablar con ella, espero en algún momento de la noche conversar con ella. Dejó de lado la pregunta que quiero hacerle desde la tarde, es momento de inaugurar mi reino. Al llegar al salón principal del hotel siento todas las miradas sobre mí, he caminado casi desnuda sobre una pasarela, pero en éste momento me intimidan. Y no sé qué secreto guardan pero las miradas de Ivy, Ethan y Benjamín se encuentran, siento la tensión en su agarre y la inseguridad en su voz. - Hermosa, la fiesta acaba de empezar.
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