Cuando estoy guardando mi celular en el bolsillo trasero de mi pantalón, Iván sale de la cocina con dos tazas humeantes con café y me pregunta...
-"Querés tomar el café en el living o en la cocina?"
-"Donde quieras, está bien. No quiero darte más molestias" (de verdad me siento avergonzada)
Me entrego una taza y tomo mi mano para ir al living, puso música y me invitó a tomar asiento en uno de sus sillones. Esta vez no me puse roja como un tomate, creo que mi cara se puso pálida de los nervios que tenía. Espero el café me ayudé o estoy frita.
-" Por que estás tan nerviosa Em.. está bien, no es molestia tenerte en casa hasta que soluciones el problema de la llave. Además, podés quedarte a dormir, yo voy a dormir acá, el sillón en el que estás sentada se hace cama y vos podés dormir en mi habitación".
(O podemos dormir juntos dijo la vocecita) solo respondí
-"Gracias, le escribí a Daniela pidiéndole sus llaves. Espero que vea el mensaje y me las traiga lo más pronto posible, le dije que estaba acá con vos".
-" Espero que no tan pronto" y me miro a los ojos, me hizo reír.
Después de la taza de café me sentí más relajada, había tomado demasiado alcohol en el bar y ya me sentía un poco mareada, cosa que no me estaba ayudando para nada. Ahora estaba más despierta y le puse atención a la música.
Sonaba Scopions, Still loving you.
-"Me gusta esta música, adoro los clásicos. Mi papá escuchaba esto y cuando era chiquitita me gustaba, ahora que soy adulta aprecio más la calidad de esa época. Ya no hay bandas que suenen tan bien como las de antes".
-"Es la primera cosa que tenemos en común, la música y la opinión al respecto a la época"
-" ¿Qué otras bandas te gustan Iván?
-" De este género me gusta Pink Floid, Led Zeppelin, Nazareth, pero Me gustan otros géneros también"
Me había dado cuenta de esos géneros ni bien lo había visto, borcegos, pantalón n***o ajustado, una remera con una estampa de Metallica y un tatuaje en su mano de un As de picas, referencia a la banda Motörhead, hasta el auto era de color n***o. No podía ser más de mi gusto, (Rockero) eso hacía que me guste un poco más.
-"Si, me di cuenta de eso. Por algo vestís de n***o, es una rareza, ya no hay muchos que sigan la vieja escuela".
-"Así que... tengo en frente a una conocedora, o muy buena observadora. Eso te hace más hermosa ¿Sabías?"
Se levantó de su asiento y se acercó a mí, despacio, pero sin dejar de mirarme a los ojos y me agarró de la cintura y me dijo al oído.
-" Moria de ganas por tocarte, estar más cerca. Bailemos lo que queda de la canción por favor"
Asentí con la cabeza y me acerqué más a él. Puse mis brazos sobre sus hombros y bailamos. Me embriagaba su perfume, no podía negar la existencia de atracción que había entre los dos. Sentía su respiración en mi cuello y como si un rayo me cayera encima y electrificara todo mi cuerpo reaccioné al tacto de sus manos, temblaban un poco. Creo que él también está un poquito nervioso, pero no dejaba de mirarme a los ojos. Hasta que termino la canción y me soltó.
Decidí tomar la iniciativa, lo tome de la mano y lo volví a acercar a mí, un poco más cerca que cuando estábamos bailando y lo besé.
Un beso que comenzó lento, sentí el calor de sus labios y le di acceso a mi boca para que nuestras lenguas se junten para saborearlo y él a mí. El beso fue cambiando y se volvió más intenso y mientras más tiempo nos besábamos más se podía sentir la urgencia de estar en los brazos del otro. Acaricie su pelo, su espalda y tuvimos que separar nuestras bocas para recuperar el aliento.
-"Desde nuestra primera conversación en la barra del bar quería besarte, cuando nos sentamos con nuestros amigos quería sacarte del bar, y cuando te lleve a tu casa moría por probar tus besos, cuando te traía en el auto no te hablaba porque pensaba como, no quería que pienses mal de mí y que quiero aprovecharme, y me sorprendiste!, me besaste primero".
Le sonreí.
-"Yo también quería besarte, cuando llegue al bar y te vi venir con las bebidas en la mano te quedé viendo, después en la barra y en la puerta del edificio pensaba en el sabor de tu boca y ahora cuando bailábamos, pensé que lo harías. Pero cuando termino la canción te separaste de mí, así que tome la iniciativa. Y ¿sabes que? Me gustas mucho".
Esta vez fue el quién me besó, esta vez con mayor intensidad, me levantó y con mis piernas envolví su cintura, acaricie su suave pelo, sus hombros y espalda. Parábamos unos segundos para tomar aire y volvíamos a juntar nuestras bocas. No podíamos parar, era como estar en llamas donde nos quemábamos por dentro.
-" Me volvés loco, Emma, tu aroma, tu piel y el sabor de tus besos hacen que no quiera dejarte ir, quiero sentirte, necesito más"
-"Yo también quiero más" No hay que ser muy inteligente para entender lo que ambos queríamos.
Y volví a besarlo, me sostuvo más fuerte y subió la escalera hasta llegar a la puerta de su habitación, prendió la luz y me recostó sobre su cama.
La vocecita de mi subconsciente gritaba de alegría y me decía que le arranque la ropa y lo reclame como mío. Sonreí una ves más.
Así que me pare frente a él y lo bese, pero ahora queríamos más que besos. Le quité la chaqueta de cuero y la dejé en una silla que estaba en un costado con una tonelada de ropa. El hizo lo mismo conmigo, entre beso y beso caía una prenda hasta que solo quedamos en ropa interior.
Al final la vocecita se quedó muda y con la boca abierta, Esta noche después de mucho tiempo iba a tener relaciones sexuales con un chico que hacía que pierda la cabeza. Ahora solo esperaba a que el me lleve a la cama.
Me estaba quemando, sentía como mis piernas querían aflojarse pero no podía soltarlo. Él mira mi cuerpo con deseo y cuando se acerca para abrazarme siento su cuerpo tensarse.
- " Somos adultos Iván, los dos queremos esto. Me siento bien con esto. Solo es sexo".
No sé en qué momento me solté tanto, literalmente me siento otra persona, lo único que quiero ahora es que entre en mi, su cuerpo me atrae como un imán, su forma de ser tan especial, su perfume y el calor de sus labios me están volviendo loca.
Con una mano tomo mi cuello y juntamos nuestros labios nuevamente en un beso suave. Con la otra mano tocaba mi pecho.
Caminamos sin ver hasta llegar a la cama donde me dejé caer. Subió encima de mí acomodándose entre mis piernas para quitarme la diminuta tanga negra de encaje que llevaba Y SONRIO
-"Amo el color n***o"
No respondí, solo sonreí.
-"Emma, quiero preguntar, ¿usas algún tipo de anticonceptivo?"
-"Sí, tengo un chip". (Que lleva demasiado tiempo sin usarse dice la vocecita)