Luego de renegar por varias horas, terminé cumpliendo las órdenes de esa bestia y aquí estoy en el nuevo departamento, su ubicación es más cercana a las oficinas y contrario a mi sentir, luce acogedor, es modesto acorde a mi perfil y podría decirse que no llama demasiado la atención.
— ¡Ese miserable lo pensó muy bien! —
Llegué a la conclusión que la razón para que me exigiera mudarme, es simple, cubrir sus huellas, en varias ocasiones visitó aquel lugar por lo que supongo temió que alguien pudiera relacionarlo conmigo, además, seguramente prevé que de continuar mi cercanía con Natasha, esta quiera ver mi domicilio en algún momento.
— ¡Es muy listo el hijo de puta! — exclamo, mientras doblo la ropa en los cajones.
Termino y me apoyo en el pequeño ventanal, admirando las luces de la
