“Habítame, penétrame. Sea tu sangre con mi sangre. Tu boca entre mi boca.”
◦✤ ∴ ✤ ∴ ✤ ∴ ✤◦◦✤ ∴ ✤ ∴ ✤ ∴ ✤◦
—Sucederá de nuevo, vamos.
Mientras Evannia se animaba en conjunto con Karen para visualizar el espacio en el que esta pudiese solventar los problemas con Zayn, este charlaba con Erick sobre esa repentina propuesta de ir a Birmingham.
—Di de una vez que carajos esconde tu familia que tenga alguna relación con lo que hago.
—Nuestra familia, eres mi hijo, Zayn. Sobre eso quiero que lo veas personalmente, quizás te resulte familiar lo que tu bisabuelo hacia bajo perfil.
—¿Bisabuelo?
—Sí, el padre de mi difunto padre. El cual estoy seguro que tu bisabuela mando a eliminar. La muy maldita cree que no se todas sus malas jugadas.
—Ahora entiendo de donde proviene tu demencia y sadismo.
—Respétame, Zayn.
—Porque debería hacerlo, le faltaste a mi madre y luego a mí. Esa palabra es difícil que sepas su significado.
—No voy a discutir contigo. Pienso que deberías dejar a un lado los rencores y permitirme en tu vida la debida apertura. Puedo ayudarte en lo que quieras, sin límites ni vergüenza.
—Voy a pensar tu propuesta y luego…
—Sobre lo que decidas de igual forma me acompañaras, ya es momento de que sepas cosas que te harán entenderte y comprenderte mejor.
—Lo dices como si quisieras ayudarme.
—Es lo que me propongo, aunque no estuve en tu crecimiento no imagino lo solo que quizás te sentiste. En especial al haberte aislado y experimentar diversidad de cosas que tú sabes que hiciste.
—Es lógico que no lo imagines, fuiste esa figura ausente.
—Zayn, ya hablamos de eso y no me enorgullezco.
Debido a que no pretendía quedarme un minuto más decidí marcharme, de camino al auto recibía un texto de parte de Evannia, pensando ignorarlo me propuse leerlo.
De acuerdo a sus palabras me citaba en un lugar que realmente no esperaba. El hotel al que me citaba no le conocía, sin embargo, decidí acudir ya que me era extraño que ella estuviese allí.
Al cabo de unos minutos de haber llegado al sitio me indicaban la habitación. Tras haber tocado la puerta y tener apertura me topaba con su presencia la cual daba la impresión como si se tratara de otra persona, su atuendo, incluso su cabellera era otra.
—Bienvenido y gracias por venir.
—¿De qué se trata esto? ¿A qué se debe que…?—ante mi pregunta la cual no terminaba de formular tomaba mi mano, acción que permití y con ello era llevado a otra zona.
A donde me había llevado se encontraba una piscina la cual destacaba por toda la iluminación que daba el aspecto de ser un espacio íntimo.
—Zayn, eres importante para mí, por ello me propuse demostrártelo de la mejor manera.
Ante sus palabras señalaba algunos elementos de sado que no sabía cómo había podido traerlos.
—Tu lado dominante lo disfruto y aunque hayan sucedido cosas sigo eligiéndote—tras haber dicho esas palabras juntaba sus manos como si quisiera ser sometida—. No deseo cambiar algo que también me place.
Aproximándome hacia ella retiraba la peluca que lucía, aunque destacaba en ella me agradaba ver su cabellera castaña. Seguidamente la encamine hacia la piscina, sitio donde nos empezamos a sumergir tras haber retirado lo que traía puesto, sin embargo en ella mantuve el atuendo que portaba, mismo que al ser unas mallas que recorrían su cuerpo expuesto no vi necesario retirarlo ya que tenía punto estratégicos para los actos posteriores.
Encontrándonos en el agua tras haberla contemplado inquirí si confiaba en mí, luego de un rotundo si empecé a devorar sus labios al igual que ella lo hacía con los míos.
En ese punto terminaba por comprender que debía retractarme de alejarla de mí. Tal como siempre lo he pensado ella era mi complemento en todos los sentidos, aunado a eso me elegía ante cualquier situación.
****************
Lo que iniciaba como un momento romántico de besos y caricias dentro del agua daba rienda suelta a que ambos cuerpos se compaginaran como sabían hacerlo.
En vista de que la particularidad del hotel se basaba en la temática de sadomasoquismo para Zayn esta era una ventaja ya que de esa manera llevaría a cabo una práctica que hasta los momentos no había implementado con Evannia, pero que en esta oportunidad se propondría ejecutarla.
*****************
Posteriormente de haber salido de la piscina contemplaba los diversos elementos y objetos que estaban a mi disposición. Seguidamente, la conduje a la cama y con ellos rápidamente empecé a inmovilizarla de las extremidades. Me deleitaba tener el dominio sobre ella, en especial al pretender compenetrarnos sintiendo más a profundidad el gobierno sobre su cuerpo.
Hacía algún tiempo había llevado a cabo el simular el ahorcamiento en la intimidad. Algo que me había traído gran regocijo, de tal manera que en mi sexo se reflejaba. En aquella oportunidad con las sumisas que llevaba a cabo mi sexualidad desbocada fue un poco incómodo ya que ellas no supieron manejar la situación a pesar de no parar de penetrarlas. De acuerdo a sus palabras referían un temor indescriptible de morir debido al agarre que tenía sobre el cuello.
Realmente la intención que tenía no se trataba de acabar con ellas solo ahogarme en el dominio que me generaba la práctica, pero al ver que muy pocas lo sobrellevaban lo deje a un lado y seguí con lo simple, atar, dominar, castigar cuando era necesario y satisfacerme con la sangre de algunas ya que no todas eran tolerables.
Admirando el semblante de Evannia, de nuevo proferí lo anterior, deseaba saber que su confianza estaba puesta en mí.
—¿Realmente confías en mí? ¿Plenamente?
—Sí, amo. Lo hago.
Aunque no comprendía su pregunta al ser tan insistente dejaba a su cargo mi cuerpo y mi integridad.
En esta ocasión usaba un artefacto vibrador sobre mi intimidad para luego ir subiéndolo y posarlo en mis pezones. Estando impedida por las ataduras solo me quedaba regodearme de la sensación que me dejaba, estando en ello emití un fuerte gemido al percibir su lengua dentro de mi sexo, no sabría cómo explicarlo, pero todas las veces que lo hacia había un toque de distinción y esta no era la excepción.