Capitulo III

1540 Words
—Quería poder hablar sobre lo antes ocurrido— en vista de que solo me admiraba sin siquiera responder creí prudente girarme y salir de allí, sin embargo, al haberme propuesto llevar a cabo esa acción su voz se hizo presente. —No te marches, por favor, no lo hagas. Desconocía desde la primera vez a que se debía su rapidez ya que al girarme estaba detrás, en esa cercanía que dejaba evidente su rechazo al respeto por el espacio personal. De todos los aspectos de mí que han pasado por cambios diría que ser vulnerable a él era algo que aún permanecía en mí. Mi entrega a él fue más allá de mi sangre o mi pureza, vio en mi caracteres que ni yo misma supe que existían, su sabiduría a pesar de todos sus límites me dejo ver lo que era realmente importante. —Evannia, debo volver a Noruega y el solo hecho de tener que estar lejos de ti como la primera vez lo hice, me destroza, me rompe como no te imaginas. —Yo solo… —Por favor dime que lo pensaras, porque no comprendes lo que significas para mí, eres mi cura, mi impulso por el que ya no estoy confinado y cada día batallo para no volver a estarlo. Ante eso que pedía me perdía en sus ojos, esos de color esmeralda que me atan a su ser. Embelesada en su mirar de pronto sentía ese beso apasionado que propiciaba en medio de esa estrechez en la que nos encontrábamos. Su boca invadiendo la mía y sus manos sin vergüenza alguna recorrían mi cuerpo de tal manera que era cuestión de tiempo en que esto fuese más allá… La práctica de obtener sangre de mi aún permanecía latente por ello se volvió parte de nuestro preámbulo s****l, más que una degustación como él lo hacía ver era ese anticipo de placer que me generaba y compartíamos en común. Imponiendo mi deseo ambos nos encaminábamos con prisa a ese escritorio que se encontraba cubierto de apuntes y diversos papeles que en ese momento no eran de interés. Estando apoyada sobre la superficie del mobiliario las palabras fueron dejadas a un lado al igual que la cordura. La vestimenta que usábamos fue rápidamente apartada, seguidamente lo estrechaba más a mi cuerpo para poder empujar su sexo en mi interior, el haber sentido esa dureza al recibir las primeras penetraciones conllevo a que un vértigo me indicara que todo marchaba como quería. Sus jadeos en cada fuerte movimiento iban acompañados de otro beso igual que el anterior. Pese a lo amplio del mobiliario me deje caer sobre la superficie, cada estocada me transportaba, la excitación que ambos compartíamos iba más allá de lo carnal y la satisfacción generada, diría que era una especie de conexión desconocida. Siendo alguien que he aprendido a demostrar mi querer de una forma s****l, nuevamente lo hacía, pero con mayor afán. Las embestidas que propinaba en ella eran contundentes, severas, de tal manera que no permitía siquiera que pudiera controlar su respiración, hecho que dejaba evidente al percatarme de la forma en como emitía cada gemido. Su reacción me transmitía seguridad, indicaba que mi virilidad era otra de mis características que en ella causaba sensaciones. A medida que compartíamos ese inquietante momento sus piernas me brindaban mayor acceso, como si de esa forma refiriera que no me contuviera en cada penetración. Ante eso mis manos se aferraron con dureza al mobiliario para poder adentrarme con mayor severidad en su sexo, el cual se venía sin control alguno en medio de una especie de temblor que provocaba que su cuerpo se estremeciera para luego notar como sus piernas desfallecían tras el fuerte impacto que había provocado en ella. Contemplando su manera de reaccionar ubique mi boca en su oreja susurrando esas palabras que ya había escuchado y quería volver a repetir. —Eres… mi luz en mi obscuridad… eres ese antídoto que siempre espere. Sin esperar que respondiera termine, fue tal la profundidad en la que estaba dentro de ella que percibí la manera en la que sus brazos me rodearon. Como si estuviésemos ausentes de la realidad nos ubicamos de mejor manera para poder mantener ese contacto. Situada sobre mi mientras me encontraba tomando asiento en un mueble cercano de a poco nos separábamos de ese extenso abraso en el que estábamos enlazados. Dejando caer su cabeza sobre mi hombro podía percatarme de lo que decía aun estando su respiración entrecortada. —Zayn… eres… mi salvación… lo eres y siempre lo serás. Con esas últimas palabras irguió la cabeza, fijando su vista sobre mí a su vez que una sonrisa brotaba de sus labios, gesto que me contagiaba a hacerlo como ella. Con el pasar de los minutos procedimos a vestirnos y actuar con disimulo ya que mi madre entraba al lugar en compañía de Polanski, el cual no apartaba la vista de Evannia aun sabiendo que ahora era mi prometida. —Hijo, queríamos hablar sobre esa estrategia de la que todos ya han dado su aceptación, pero… —Se lo que vas a decir madre, Polanski no está de acuerdo y siendo asi hay que descartarla. —No necesariamente señor Abramovich, pienso que es una gran idea estar al pendiente de cada sede, sin embargo, hay que considerar que unas tienen mayor demandas que otras y siendo asi no tendría caso enviar personal extra sino enviarlos a otros países para darnos a conocer. —¡Ah, ya veo! ¿Qué pretendes, Polanski? ¿Destacar en todo para ocupar mi puesto? ¿Deseas también ser el Ceo de esta cadena que mi madre ha creado tal como lo eres de las empresas de tus difuntos padres? —¡Zayn! —Madre, no interfieras, desde siempre lo has apoyado, ni siquiera notas el descaro ante tus ojos, Evannia es mi prometida y no para de mirarla en todo momento. —Lo lamento, es solo que… —¿Que dirás ahora? ¿Continuaras aguardando por ella? El ver que debido a mi presencia se efectuaba un conflicto decidí intervenir. —Zayn, lo mejor será que me marche, deben solucionar esto y no quiero… —No es tu culpa lo que ocurre, Polanski no comprende que jamás te tendrá. —Hijo, ¿qué te sucede? Te refieres a Evannia como si fuese un objeto, además no es culpa de Andrew el hecho de que la mire como lo hace, sabes que guarda sentimientos por ella. —No me importa lo que sienta, ella es mi prometida y pronto será mi esposa. —Me parece que vendré en otro momento, de esta manera no es apropiado hablar sobre planes y negocia… —¡Oh por favor, Polanski! No entiendo que haces aquí, se te designo estar en Irlanda y has omitido esa orden. Rose ante ese conflicto que era imposible detener creyó prudente salir en compañía de Evannia, sin embargo, previo a ello enfatizo que Zayn solventara su diferencia con Andrew ya que de esa forma en la que marchaban las cosas entre ambos podría generarse algunas problemáticas en la cadena. Tras la partida de mi madre y Evannia no paraba de mirarlo, se encontraba inerte como si estuviese a la espera de que me calmara, hecho que no podía, no concebía porque no terminaba de comprender lo que Evannia y yo teníamos, sabía que de allí provenía su negatoria para lo que proponía, no había otra razón. —¿Estará el resto de la tarde sin decir nada? —Estoy a la espera de que se calme, de esa forma no podremos… —¡Solo son excusas, porque no lo dice una vez, el hecho de que Evannia y yo mantengamos una relación a usted le molesta! —No tendría por qué hacerlo, es un asunto que no me compete y no soy quien para entrometerme entre ustedes. —Exacto y asi me gusta escucharlo, refiriendo que perdió ante mí. Su mirada confusa ante mi comentario me enfadaba, tengo la convicción de que no existe alguien cien por ciento noble y el con sus acciones lo hacía ver ante el resto como si fuese cierto. —¿A qué se debe su mirada confusa? —Al hecho de que vea a la señorita Walsh como un trofeo, ella es más que eso. En definitiva él era alguien que detestaba y con su argumento aumentaba mi sentir, por ello me aproxime y con el ímpetu que me caracteriza lo sujete atrayéndolo hacia mí. —Por supuesto que Evannia es más que un trofeo, solo que en su boca está de más. —No comprendo su enojo, ¿si dice que gano su amor y todo de ella a que se debe su inseguridad? esa que demuestra en su arrebato—con esas palabras se alejaba bruscamente para repentinamente cambiar de actitud, dejando a un lado esa sonrisa que lo caracteriza—. No se crea victorioso, todo a su debido tiempo. —¿Qué quiere decir con eso? —Solo eso diré y para evitar conflictos en poco tiempo estaré en Irlanda como lo ha ordenado—dicho esto abandono el estudio, dejando confusión en Zayn por su respuesta, esa que no esperaba de su parte.
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