—Chimchim— Llamo el detective al pequeño dentro de su celda. Jimin lo miró con ceño fruncido y un poquito enojado.
—Díme Jimin, solo el jefe Min puede llamarme Chimchim...¡Desde ahora!— Sentenció, rompiendo corazones... Hyung-Pink se mostró ofendido y dolido desde su celda, su niño estaba pasando por la etapa de rebeldía o, al menos eso pensaba él —Chimchi- trato de llamarlo.
—¡Jimin!— le gritó en corrección —Jefe Min! ¿¡Dónde está el jefe Min!?— gritó mientras con una taza hacía ruido al pasarlo por los barrotes. Jeon se preguntó cómo es que el pequeño había obtenido su taza, se hundió de hombros y siguió con su trabajo, su muy tortuoso trabajo.
Los segundos pasaron, los minutos también y así pasaron dos horas. Jeon estaba más que estresado al no poder resolver un nuevo caso que se le había sido asignado; suspiro pesado y se tomó un descanso, necesitaba una taza de café bien cargado. Busco la dicha taza pero no la encontró, recordando después de unos minutos que el pequeño se había apropiado del objeto. Entró a la celda y con cuidado de no despertar a Chimchim, le saco la taza color blanca.
—¡No!— Y Ups, si tan solo no se hubiera tropezado... —¿Qué hace?— le pregunto Jimin entrecerrando sus ojitos, Jeon negó y salio de la celda, dejándola abierta sin darse cuenta, es que estaba con la cabeza en otra parte, en su investigación para ser exactos.
Pink boy bufó al ver que el detective había dejado la celda abierta de Chimchim, ¿porque a él no le había tocado un agente así de despistado?. Observó al agente Kim Namjoon y resoplo —Aún más despistado— dijo casi en murmullos.
Jeon tomó prestada la taza de su compañero y al fin pudo beber el amargo café que tanto necesitaba su sistema. Se relajó en su asiento y cerró los ojos mientras echaba su cabeza hacia atrás; No pasó mucho tiempo y sintió como sus cabellos eran jalados hacia arriba, sonrío al saber de quién se trataba. Esos dedidos eran de Chimchim.
—Quiero un buen peinado, por favor— Pidió a ojos todavía cerrados. Jimin asintió diciéndole "Pero no esperes la gran cosa", a lo que Kook sonrio aun mas —Eres demasiado lindo, ¿lo sabías?—
—Por supuesto que lo se, todos me lo recuerdan— "Pero no se porque" siguió en mente.
—Por ejemplo?—
—Hyung, Hobi, la señora del local de ropa— Jeon escuchó atento, "lo sabía" dijo en mente. Siguió escuchando al pequeño —El paseador de perros de mi barrio, el peluquero de hyung y muchos más!. Detective conejo, no puedo decirles todos, no acabaría nunca!— estiro sus brazos y volvió al cabello del chico alto.
"Tantas personas que saben de ustedes, y ninguna habla". —Ya veo, y es que eres muy lindo que tenemos ganas de decírtelo—
Escuchó la risita avergonzada del pequeño, abrió los ojos y recostó aún más su cabeza, viendo al pequeño fijamente. Jimin ladeo su cabeza mientras frunció su ceño por haberlo detenido y arruinando el peinado por el movimiento —Voy a tener que empezar de nuevo!— le reclamó en puchero. Jeon río y volvió a moverse, exasperando al chico. —Detective!— le grito y no le quedó de otra que detener el movimiento de la cabeza de Jeon, colocando sus pequeñas manos a los costados —¡Quieto!—
—Tengo que volver al trabajo— le dijo en sonrisa.
—Haga su trabajo, yo me ocuparé de su cabello mientras espero al jefe Min. ¿Dónde está?—
El detective lo pensó por unos segundos, había escuchado qué tenía que ir a Daegu por asunto de trabajo y sonaba algo peligroso. Y es por eso mismo no se lo diría a Jimin, ya que se notaba que se había encariñado con su jefe. —No lo se, seguro está tomando un descanso y pronto estará con nosotros—
—Uhm.. ¡Sí! El jefe Min es mi superhéroe favorito!, sabes, el otro día salvó a una persona, también me compro helado. Ah! y, y el otro dia...—
El detective Jeon sabía una cosa, que si Jimin seguía hablando así de animado el no seria capaz de hacer su trabajo como se debe. Y bueno, al diablo con el trabajo, no es que por estar algunas horas con la cabeza fuera de carpetas le traería problemas. Volvió a prestar su atención en Jimin, atención que nunca dejó de estar en el pequeño, y le propuso jugar a lo que él quisiera. Y tal vez, solo un poquito de arrepentimiento sintió al escuchar a Chimchim...
—¡Pero me dijo que lo que yo quisiera!— le gritó en queja.
Jeon suspiró —Mientras sea dentro de la comisaría... Chimc-
—¡Jimin!—
—Jimin...— volvió a suspirar —No podemos ir a un parque de diversiones, eso... eso sería irresponsable de mi parte—
Y Chimchim no sabía por qué no ¿qué acaso el jefe Min no lo había llevado afuera ya? —Pero el jefe Min-
—El no está ahora, y tengo órdenes de no dejarlos salir— Con amabilidad despeinó los cabellos rubios del chico con puchero —No me hagas esa cara... Jimin— el detective no sedería.. no, no lo haría.
...✿...
—¡Wow! ¿¡No se divierte detective conejo!?— el pequeño levantó sus brazos y los dejó en el aire cuando fueron montaña abajo —¡Es tan divertido!—
Jeon realmente no quería... —Wow! ¡Lo es!— bueno, tal vez si se estaba divirtiendo, un poco mucho para lo que se había dicho —Hay que subir de nuevo cuando se acabe!— gritó levantando los brazos. Jimin asintió riendo al lado suyo. —Wow!— gritaron ambos, divirtiéndose a lo grande.
Cuando bajaron de la montaña rusa, hicieron lo que tenían planeado, subieron de nuevo y volvieron a divertirse. Al bajarse nuevamente decidieron que era mejor ir a otro juego, como al barco, y luego al tobogán de agua, y así seguir con las tazas giratorias.. y así, hasta acabar con todos los juegos.
—Fue tan divertido!— exclamó Jimin dándole un mordisco a su cono de helado —Y más cuando se cayó del flotador. Es muy divertido detective!—
—Fuiste más divertido Chimchim. Que bueno y traje mi celular, tengo todo grabado— mostró el aparato en risas, para luego volver a guardarlo. Jimin lo observó, quiso reclamarle el -Chimchim- pero no lo hizo, más bien, desde hoy se lo permitiría —¡Tengo hambre!—
El detective pensó, pero no pensaba si ya era tiempo de volver a la comisaría, no, él pensaba a cual restaurante ir y es que tenía dos lugares a los que siempre iba y los dos eran de sus favoritos. Luego de una gran pelea interna por seleccionar uno de los dos, se decidió por el -Resto Flowers- el restaurante de frutos marinos y postres extravagantes de chocolates.
—Vamos Chimchim, sube al auto— auto policial, de Namjoon, el cual no había pedido prestado... —Te gustara a donde iremos a comer—
—Detective, creo que lo quiero— le dijo en sonrisa —Ahora es mi detective favorito—
Jeon miró de reojo, y volviendo rápidamente su vista al frente, estaba manejando —Eso quiere decir que estoy en el puesto número...—
—Primero está el jefe Min— "Por supuesto", pensó Jeon y no era cosa que le molestara, en serio —Luego Hyung-Pink y Hobi comparten el puesto número dos. El detective ocupa el puesto número tres!— Mostró tres deditos.
"Al menos ya no me dice detective conejo" pensó y sonrió. —Ups, detective conejo— se corrigió el pequeño— "Bueno, al menos estoy en tercer puesto", se volvió a conformar.
Chimchim le sonrió amplio y realmente quería agradecerle por el día de hoy, el detective lo divirtió mucho, y Chimchim estaba feliz, muy, muy feliz —Kiss— dijo tierno y beso la mejilla del detective. Dejando al chico estático y frenando frente al restaurante.
—Gracias detective conejo—
Este simplemente asintió, sintiendo su mejilla arder por el corto beso.
—Uh! hay tantos colores brillantes— Jimin miró a través de la ventanilla —¿Es aquí? ¡quiero entrar!— se bajó del auto y Jeon reaccionó un poco tarde, tuvo que correr para alcanzarlo.
—No solo salgas corriendo así pequeño—
—aja...— estaba maravillado con el interior del restaurante, y si no fuera por Jeon, Chimchim ya estaría con la cabeza entera metida en la gran fuente de chocolate. Y es que.. —Es chocolate! mucho chocolate!— exclamó en grande, llamando la atención de algunas personas en el lugar.
El detective hizo de todo para mantener al pequeño en sus brazos, pero cuando este lo amenazó con subirlo en su puesto de favoritismo, Jeon simplemente lo dejo ir, así, fue cosa espontánea y que él no pudo manejar. No es su culpa.
—¡Delicioso!— el pequeño estaba en el mismo paraíso, uno lleno de azúcar. Jeon observaba divertido y demasiado tentando en ir y también meter su cabeza en la fuente. De hecho, lo hizo. Y bueno, tal vez ahora si era su culpa, porque ambos terminaron en la comisaría, seh, terminaron arrestados, y por el mismísimo Min Yoongi. El comisario había estado de vuelta y apenas pisó la comisaría este fue llamado.
—No lo puedo creer...— hablo Min —El que se rehusaran a salir de la fuente de chocolate no es lo que me sorprende. Detective, usted me sorprende— miró severo —Primero que todo, no debió llevarse a Chimchim sin avisar a nadie—
—Tampoco mi auto— agregó Namjoon desde su escritorio, la verdad y la situación le divertía. Como a todo el resto.
—Si eso, segundo; ¿Se acaba de dar cuenta de que fuiste arrestado por tu jefe? Y por no querer salir de una fuente, de chocolate, de chocolate— repitió —Detective Jeon, ¿que tiene para decirme?— Se cruzó de brazos —Porque esto fue actuar de forma irresponsable e inmadura—
—Jefe Min...— puchereo Chimchim, porque entendió que él tambien había actuado de esa forma: Irresponsable e inmadura. El comisario luchaba para no reír, y es que ambos tenían la cara enchastrada de chocolate. Era una situacion difícil.
—No lo dije por ti Chimchim, tu pequeño, no tienes la culpa— le sonrió amable. Volviendo a mirar serio a su detective —Y?—
El detective frunció sus labios y se hundió de hombros —Solo paso— dijo simplemente —Un poco de diversión no mata a nadie—
—Un poco de diversión..— Min quiso reír —Ve al baño y aséate, luego— Giro a encontrarse con el agente Taehyung —Enciérralo por 48hs—
El agente asintió y Jeon no se opuso, tal vez no pensaba que se lo merecía, pero así era, así que, tras las rejas se ha dicho.
—Chimchim, vamos a mi casa, necesitas asearte también, y aca solamente tenemos un solo baño. Así que, vamos—
El pequeño abrió los ojos emocionado. ¡Iría a la casa del jefe Min! —Sí! sí!— Con toda la emoción que invadía su cuerpo fue hasta el detective y volvió a besar su mejilla, pues Jeon había hecho, de alguna forma, que el día de Jimin sea el mejor de los mejores —Creo que puede estar en el puesto número dos detective conejo!— se alejó y fue al lado del jefe Min.
—Puesto número dos— Sonrió y suspiro —Hoy fue un día realmente divertido— cerró la puerta del baño.