Christine
—Estás…—besó mis labios y dejó su nariz unida a la mía. Se había detenido de empujar y ahora se dedicaba a mirarme, estando casi a medio camino.—Se siente demasiado apretado, ¿podría ser que estoy rompiendo algo?
—Supongo que es lo que sucede con la primera vez, pero sigue adelante. Estoy bien.
—¿No…te duele?
—Pero soy fuerte, Troy. No es como que me estuvieras rompiendo un brazo. La sensación de dolor es tan mínima que apenas la noto.—dije en voz baja, sintiendo como mi interior lo acogía ante la suave invasión que él realizaba en mi v****a. Aquel sutil empuje lograba quitarme el aliento, dejándome sin aire y logrando que mi estómago se contrajera ante su penetración, quería clavarle las uñas, morderlo y apretarlo pero si le decía todo eso a Troy, se iba a alarmar y esto no
