Mi novio payaso

En el parque.

No obtiene lo que buscaba con Ariel, decide mostrarle la foto que tiene en el móvil, lo busca rápido y no la encuentra, no lo entiende, solo piensa que Daisy le hizo algo a esa foto.

—Reconozco que no piensas darme ninguna información sobre Catrina.

—No sé nada de Catrina Oliver, y sabes mi respuesta.

Oliver asiente despidiéndose de Ariel, sin decirse nada más, ya va en su auto yendo por Daisy hasta la cafetería, donde la ha recogido.

—Estuvo pesado, es común que pase. —responde Daisy, al ser que Oliver le pregunto de su día.

—Hace cuando estas en esa cafetería.

—Pues, estoy casi por cumplir dos años y medio de trabajar ahí. —dice Daisy.

Oliver decide llevarla hasta su casa, ya que ha caído la noche.

—¿Cómo está tu mamá? —pregunta.

—Ella está bien, sigue viviendo en Huatulco.

—Tus hermanas.

—Bien, bueno no tengo mucho contacto con mi hermana mayor, ni con la mediana.

La familia de Daisy es de padre separados, con seis hermanas y ningún varón.

—Pero me habías hablado de Fabiola.

—Ella es la menor de nosotros, sigue estudiando, está en preparatoria y a veces hablo con ella.

—Y tu papá.

—Debe estar bien, no he vuelto a hablar con él, debe estar con su otra familia.

Oliver no quiso decir otra pregunta o comentar de su padre.

—Y Ricardo.

—Ya no somos novios, él se fue.

—No has sabido de él.

—Para nada, solo quiero continuar soltera, y tú, dime ya eres novio de la chica de la foto.

—Qué bueno que me mencionas la foto, ya no está en mi celular.

—¿Qué?, Oliver como puede suceder eso.

—No me mientas ni te hagas la ingenua, borraste la foto.

—No claro que no, a ver dame tu teléfono.

—Lo quieres solo para moverle algo.

—Claro que no, solo dámelo, debe estar la foto, no puede desaparecer así nada más, o solo que tu hayas hecho algo.

Niega con la cabeza al dar vuelta al carro y le da el teléfono.

—Bueno y para que querías la foto. —dice Daisy, mientras esta en la galería del móvil de él.

—Quería mostrarle la foto a Ariel, y como vez no está en mi celular.

—Fuiste a ver a Ariel, lo encontraste.

—Si sabias que su padre lo corrió de su casa.

—La verdad no lo sabía, lo que sí que se casó.

—Si igual conocí a su esposa.

—Y porque fuiste a buscarlo.

—Tú mencionaste que Ariel y Catrina se llevaban bien, es por eso que lo busqué, para saber dónde encontrarla o saber si era la de la foto, que ya no pude mostrarle.

Daisy medio ríe a ese comentario.

—Y te dijo algo de Catrina.

—No sabe nada de Catrina, y si lo supiera no me lo diría, es por eso que necesite la foto Daisy.

—Bueno acá tienes, la foto se encuentra en tu galería de fotografías.

Oliver observa la pantalla del móvil, viendo efectivamente la foto, ella solo le devuelve su celular que él solo guarda, está seguro que ella hizo algo manipulando su teléfono.

—Aquí es, gracias por traerme Oliver, y espero encuentres algo de Catrina.

—Gracias, pero no vuelvas a controlar mi celular.

Daisy solo mueve la cabeza al reír, al decidir bajar del coche.

—Fue bueno verte, ya sabes dónde encontrarme.

—Claro, adiós Daisy.

Los dos solo se despiden, Oliver solo arranca el auto alejándose de ese lugar, en cambio Daisy solo sonríe curiosamente como cómplice, viendo irse el carro al pensar, “la tienes más cerca de lo que piensas, suerte Catrina”, ella solo entra a tu casa.

—Karina y si vamos a ir a grana. —le dice Jimena, su hermana.

—Tal vez, no lo sé te avisare. —contesta Karina.

Que se encuentra en pijama y cenando, mirando algo por televisión.

Hace algunas horas cuando hablaba por teléfono con Oliver, llego de repente su amigo Bruno, que venía con su alocada idea de ir a grana, un pequeño pueblo que está cerca de la ciudad y vive una amiga suya, a lo que solo negó, proponiendo a que debían planearlo.

Pensar en lo que hablaron en el carro, al decidir ir a dar una vuelta al parque.

—Porque no quieres ir a grana, están enojadas Nadia y tú.

—No, solo creo que ir a grana está bien, solo que debemos cumplir con nuestros trabajos, yo comienzo con uno nuevo y tú estás en uno muy bueno, ya si insistes en ir, vamos a planearlo.

—No quieres venir.

—Claro que sí, pero no ir ahora.

—Está bien. —responde no muy convencido.

Manejo Bruno, hasta llegar al parque estacionando el carro, bajan hacia los juegos del parque, siendo que también iba con ellos Jimena, que se vería con sus amigas.

—Ya sabes, nos vemos aquí. —dice Karina.

—Si. —responde Jimena, de verse donde se quedó el coche de Bruno.

Entraron los tres separándose Jimena de ellos, al encontrarse con sus amigas y ellos a dar una vuelta, mientras van platicando de otras cosas, hasta que Bruno menciona grana.

—Bueno podríamos ir no este fin de semana.

—¿Por qué? —pregunta Bruno.

—Mejor dicho, ¿Por qué esa ansiedad que ir? —pregunta Karina.

—Podemos visitar a Nadia.

Ella lo mira que le es extraño que ahora mencione ir a grana, al ser un lugar al cual a él no le encanta ir.

—Sé que no es solo para visitar a Nadia, dime la verdad, a que viene tu idea de ir a grana.

—Sé que te gusta ir.

Ella ladea la cabeza un poco.

—Gracias eso es cierto, pero a ti no te agrada ir, dime ya que plan te traes, acaso alguna exnovia te está molestando, o conociste a alguien de grana y quieres ir a verla.

Enseguida Bruno negó respondiendo:

—Claro que no, si conociera a alguien que me guste tu serias la primera persona en saberlo Karina.

Ha visto extraño a su amigo, pero decir eso no confía mucho que sea así, a lo que le provoca reír.

—Quieres hacer cuentas.

—Lo dices enserio, tú sabes de todas mis exnovias.

—Quieres ir por ese camino, hagamos memoria, Itzel, tu exnovia de secundaria, ambas fuimos amigas y aun nos hablábamos.

—Todavía.

—Si aún conserva el conejo de peluche que le obsequiaste, ahora Dennis, tu segunda novia, que fue tu vecina que nunca me mencionaste que era tu novia.

—Amigos con beneficios.

—En serio y hasta ahora lo reconoces.

—Tú lo sabias.

—No sabía nada, entonces fuiste un engañado.

—Engañado, ¿Por qué?

—Ella tenía novio.

—Fui un amante.

—Eso creo, pero olvida a Dennis, recuerdas a Sofía. —dice al ver a su amigo suspirar, al solo escuchar ese nombre.

—Claro que con ella.

—Tu novia que te ha durado más, sin olvidar a Jessica, Gabriela e Irene. —dice Karina.

Siendo que Sofía fue su última novia que ha tenido hasta ahora, en eso que hablan sobre eso ambos escuchan fuerte.

—Karina.

Los dos voltean, no se había imaginado que vería Oliver, lo saludaron igual él a ellos.

—Fui a tu casa, pero tú mamá me dijo que estabas acá, ¿Qué estaban haciendo? —pregunta Oliver.

—Solo estábamos dando una vuelta al parque. —dice Karina al mirar la hora en su reloj.

—Y no hace mucho llegamos. —dice Bruno.

Oliver solo asiente, poniendo atención a Karina a lo que ella dice:

—Si quieren porque no vamos a la plaza Guzmán, ya que no es tan tarde, podemos ir al cine o una sala de juegos, no queda lejos.

—Claro, yo traigo mi auto. —dice Oliver.

—Igual yo. —dice Bruno.

—Genial, solo le avisare a mi hermana. —dice ella.

Los dos no entienden a lo que ella se refiere a genial, pero se encuentra llamando a su hermana quien llega rápido con una amiga suya que saludan a Oliver al ser que Karina lo presenta.

—Bueno, Bruno lleva a mi hermana y a Viridiana, yo me voy con Oliver para decirle donde es exactamente.

Solo le queda aceptar, aunque no está de acuerdo, él se va con Jimena y la amiga de ella, mientras Karina se va con Oliver.

—Y dime Oliver, ¿Cómo supiste donde vivía? —pregunta Karina.

—Bueno se lo pregunte a tu amiga Alejandra.

—Ale fue quien te lo dijo.

—Si lo siento, sé que debí preguntártelo a ti.

Ella sonríe.

—No te preocupes, me agrada que no te hayas perdido y eso que mi dirección es confusa.

—Bueno, tu amiga me dio varios tips.

—Sí, Alejandra hace eso siempre cuando se refiere a mi dirección, y dime que estabas haciendo.

—Bueno, fui a dejar a una amiga a su casa y de ahí vine a verte. —le dice Oliver.

—Entonces conociste a mi mamá, acaso mi papá no fue quien te abrió la puerta.

—No, fue tu mamá, pero antes de decirme dónde estabas me hizo preguntas, que claro respondí.

—Gracias, si a veces cuando no es alguien que le haya presentado siempre lo hace mi mamá o mi papá, le dijiste que eres payaso.

—No.

Karina ríe.

—Está bien.

—Debí decirlo, porque dije que trabajo en la tienda de telas.

—Está bien con eso.

En eso que van avanzando mientras ella indica que siga el carro de Bruno, a si van por un buen rato, hasta que ella menciona al decir:

—Ahora que pienso, tú conoces el pueblo grana.

Oliver piensa por un momento al contestar:

—Si ¿por? —pregunta.

—Bueno Bruno y yo pensamos en ir, te gustaría venir.

—Claro.

Asiente ella y dice al darse cuenta.

—Espera, aquí es.

Se detienen ambos carros y bajan, ya cuando todos se ven entran a esa plaza, los tres van caminando cuando menciona Karina.

—Bruno le comentaba a Oliver que pensamos ir a grana, y acepto venir.

Aquel rostro de Bruno, intentando fingir que está de acuerdo con Karina, está a punto de caer algo que causa en ella, a que se empiece a reír que solo lo evita, pero estar ahora en su cama y recordarlo, le causa que se ría de ese momento.