Concentrarse en el trabajo con ella fue algo bastante complicado, sobre todo cuando su manera de ser me provoca constantemente y yo caigo como un tonto. Sinceramente, solo espero que los planos en los que estuve trabajando hayan quedado bien porque no quiero tener que explicarle al cliente los motivos de mis errores —Ya estoy lista— Escucho que habla y al mirar hacia donde proviene su voz, la veo y me quedo sin aliento. Lleva puesto un corto vestido color blanco de tirantes, que dibuja su figura a la perfección y como si esto no fuera suficiente, ella se gira dejándome ver que su espalda está completamente al descubierto hasta donde esta termina —Guau— Consigo decir y ella solo camina hacia mí con esos pasos elegantes que van acompañados del sonido de sus tacones sobre el suelo. —Me gu