Antes de entrar a la habitación, Meredith se adelantó primero porque ella sospechaba que la chica quizás no tenía su collar puesto, es por eso que para prevenir que las otras doncellas omegas se enteraran de su secreto, ella las detuvo a medio camino con las tinajas de agua diciendo: —Un momento, deténganse. No sabemos en qué estado puede estar la reina, yo entraré primero. Quédense aquí. Al decir eso, Meredith adelantó su paso entrando a la habitación, y sin más comenzó a olfatear el lugar, sintiendo como el aroma de humana de su reina impregnaba todo el lugar. Al sentir aquello Meredith se asustó bastante saliendo de la habitación una vez más para decirles a las otras doncellas: —La reina en este instante se encuentra de una forma algo indecorosa, yo les avisaré cuando entren —dice la