—Suena a que lo estás pasando muy mal—dedujo Tiffany—si hay algo que necesites que te apoye, no dudes en hacérmelo saber ¿De acuerdo? —Que bueno que lo mencionas—dije contenta de poder contar con ella—de hecho esa era la razón por la que te marque, eres la única persona que conozco en quien puedo confiar para pedirte este favor. —¿Qué estás esperando?—dijo bastante emocionada— dime. ¿Qué necesitas? —Bien, sucede que iré a reunirme con los socios de la empresa, pero me niego a ir sola sabiendo los peligros que me acechan, así que pensé que tú podrías... —¿Acompañarte?—dedujo de nuevo, aunque era fácil de suponer— por supuesto que puedes contar conmigo para todo lo que necesites; sin embargo, lo cierto es que yo solo soy meramente una investigadora, jamás he trabajado como guardaespaldas