Camine por aproximadamente una hora cerca a la puerta de mi habitación de un lado para el otro, por un instante pensé que iba a abrirle un hueco al lujoso tapete del lugar, hasta que no resistí más, en realidad no sabía que iba a buscar cuando empezara a golpear la habitación de Cristóbal, pero yo quería, necesitaba verlo. Así que salgo como una ráfaga en dirección a su puerta, pero me detengo y voy a la pequeña y elegante cocina por un vaso de agua, me tomo uno y luego otro seguidos, el pánico me invade, no quiero hacer las cosas de manera incorrecta, no quiero que Alison se vea afectada por esto, no quiero tomar las decisiones incorrectas, pero se que lo quiero a él. Doy un golpe en la puerta y está se abre de inmediato, no me da espera para dar el segundo golpe y Cristóbal ya está d