POV Rosa El aire es bastante fresco, mi rostro es acariciado suavemente por la brisa. La vista que tengo desde este lugar es la mejor, porque me permite ver el mar. Inhalo y exhalo, llenándome de una gran calma. —Creo que ahora sí me siento más tranquila para hablar con Gabriel sobre el tema de Perla, no puedo permitir que su actitud quede sin una sanción, las cámaras han hablado por sí solas —digo decidida en mi mente. Entonces oigo un graznido. Me doy la vuelta y vuelvo a ver a mi amigo de plumas oscuras. -Hola, ¿otra vez por aquí? —intento acercarme y este se posa sobre una vieja maceta—. Me alegra verte, tu compañía es muy agradable - comento. Entonces noto algo extraño en su pico. En un principio no me había dado cuenta, ya que era algo muy pequeño. Pero conforme me voy acercand