Sentado en el césped, con su espalda recargada en el tronco de un árbol, Andy observaba con seriedad el cuaderno en su regazo, en el cual había hecho anotaciones de todo lo que la manada de Drake necesitaba, y lamentablemente, eran mucho más de lo que esperó.
A pesar del estado en el cual vivían y sin ningún sistema educacional como lo había en la ciudad o incluso en la manada del príncipe Caspian, tal parecía que los miembros de la manada Luz de luna tenían conocimientos básicos que fueron aprendiendo o adquiriendo con el tiempo entre ellos mismos.
Los niños que había visto corretear en distintas formas, tanto humanas como en pequeños lobos bebés, no hablaban correctamente, pero de alguna forma extraña, parecía que podían comunicarse a la perfección cuando estaban en su forma animal. Los adultos por otro lado, evitaban cualquier palabra complicada y su sistema para contar o sumar, se detenía automáticamente cuando un segundo dígito entraba en la ecuación.
Ese tipo de conocimiento no era el ideal, pero para sobrevivir en medio del bosque sin nada, era suficiente por el momento. Y ciertamente había muchas más cosas de las cuales preocuparse en ese instante que saber leer, escribir, hablar y sumar correctamente. Los alimentos parecían ser de momento el principal problema para la manada entera, y hasta donde había visto, todos dependían de la caza del día a día y las frutas que pudieran encontrar.
Las gallinas que había no producían los huevos suficientes como para que todo el mundo tuviera, las vacas eran tan pocas que apenas alcanzaba algo de leche para los cachorros, no había visto ningún huerto en el cual estuvieran cultivando alguna verdura u otra fruta, Andy ni siquiera había visto a alguien comiendo pan y una dieta a base de carne no era saludable.
Lo principal en lo cual el alfa de la manada debía de comenzar a trabajar, era en conservar correctamente la comida y conseguir más animales que proporcionaran cosas esenciales como la oveja con su lana y al igual que la vaca, de ella se podía obtener la leche, con la cual se pueden hacer otros alimentos y así.
Sintiendo una mirada sobre él, el pequeño humano alzó la mirada y observó sobre sus lentes como una figura se acercaba a paso lento. Una vez el rostro de Russell fue distinguible, la atención de Andy volvió hacia su cuaderno.
—Estabas aquí, pensé que todavía estarías en el bosque buscando algunas frutas —comentó.
—Afortunadamente, cada vez que me adentro al bosque me encuentro con el líder de la manada, quien me ayuda a su manera —pronunció.
Y ante la mención del hombre, Andy arrugó su nariz al recordar el extraño sucedo de la noche anterior, en donde aquel cambiaformas que apareció entre los árboles atrapado en su media forma donde no era completamente humano ni tampoco un lobo por completo, se acercó con su peludo cuerpo ensangrentado y luego huyo dejando un jabalí.
Tal vez no tenía pruebas de que se tratara de Drake, pero el pequeño humano estaba completamente seguro de que se trataba de aquel alfa dominante, ya que era el único que hasta el momento se preocupaba de conseguirle comida constantemente. Y si no fuera por el tonto grito de Russell, tal vez este no le habría estado evitando durante toda la mañana.
—¿Te sigues encontrando con él? —exclamó Russell.
Y como si ese fuera una invitación, el tipo simplemente se sentó frente a Andy, cruzando sus piernas y doblándolas hacia su cuerpo, imitando la pose del hombrecito.
—¿Realmente no se ha enojado porque le estés siguiendo?
—No lo estoy siguiendo.
—Dijiste que te encontraste con él —indicó.
—Por casualidad. Solo lo seguí el primer día por supervivencia, para conocer mejor el área —explicó Andy.
—Pero te sigues encontrando con él —argumentó.
—Sí, lo hago.
—¿Y crees que es por casualidad?
—Lo sea o no, no me interesa mientras pueda seguir teniendo comida gracias a él —respondió con un encogimiento de hombros.
Su compañero le observó con duda.
—No creo que sea buena idea para ti que te sigas encontrando con él, Andy —expresó y observó a su alrededor antes de inclinarse más cerca—. He oído cosas muy malas de él.
Alzando la cabeza, el pequeño humano observó directamente a su compañero y alzó una ceja, sintiéndose curioso.
—¿Y de quién has oído cosas de él precisamente? Porque dudo que alguien de este pueblo te haya hablado solo para decir mierda de su líder cuando tiemblan de solo verlo y lo más importante, ninguno está interesado en hablar con nosotros —argumentó.
—No porque no nos quieran hablar significa que no van a comentar cosas entre ellos —argumentó Russell y observó hacia su costado—. Y solo dio la casualidad de que me encontraba con Loretta cerca cuando hablaron de ese tipo de cosas.
—De acuerdo.
Sin mucho interés, Andy volvió la mirada hacia su cuaderno y añadió a la lista de cosas importantes el comenzar a cultivar y construir un invernadero, de esa forma ayudaría a alejar a los animales salvajes, y a su vez serviría para cuando llegaran a la temporada de invierno.
—Hablo en serio, Andy, ese tipo es muy peligroso —insistió Russell—. ¿Sabías que no se volvió el líder de la manada de forma democrática? En vez de pedir la opinión de todos, él reclamó su lugar por su cuenta.
Soltando un suspiro, el pequeño humano cerró su libro y concentró su mirada nuevamente en su compañero.
—Según tengo entendido, en este mundo de cambiaformas, los dominantes son los que automáticamente pasan al mando al ser los lobos más fuertes. Como pasó con el príncipe Caspian, quien es un alfa dominante y por eso será el próximo rey de su pueblo, lo mismo sucede aquí con Drake —informó.
Russell negó fervientemente y colocó una mano en la rodilla de Andy.
—No es igual, él es un asesino —chilló por lo bajo y luego observó asustado a su alrededor—. Lo viste anoche también, parecía un monstruo con esa forma y estaba cubierto de sangre.
—Todos en esta manada lo son si cuentas los animales que cazan cada día —argumentó tranquilamente—. Además, ni siquiera sabes si anoche era él.
Lo cual, pareció comenzar a irritar de cierta forma a su compañero.
—Por supuesto que lo era. ¿Quién más aparecería en la noche con esa forma espantosa y su cuerpo cubierto de sangre?
—Todos. Todos en esta manada son así —le recordó tranquilamente.
—No lo entiendes, es realmente un asesino, mató a su padre para asumir a la fuerza su posición como alfa líder de esta manada —explicó—. Y según escuché, mató a otras personas simplemente porque no le obedecieron.
—Drake dijo que su padre era un hijo de puta peor que él, que abusaba de todo el mundo —indicó pensativo—. Dudo que una persona como él hubiera dado el mando solo porque sí.
Aquellos ojos grises le observaron con cierta incredulidad.
—¿Y crees en lo que te dijo?
—No creo en lo que me dijo, creo en lo que veo —aclaró y con su cabeza señaló hacia la manada—. Solo mira el estado en cual se encuentra este lugar, es imposible que Drake lo hubiera arruinado en tal forma en solo tres meses, es obvio que la situación venía de antes, ¿y quién estaba al mando en ese momento? Su padre.
—Bueno, tal vez tuvo una razón para sacar a su padre del mando, pero no por eso tenía que matarlo —insistió.
—Ni siquiera sabemos que clase de persona era el antiguo líder como para defenderlo.
—Pero tú lo estás defendiendo a él.
—No lo hago, solo expreso mi punto de vista luego de compartir un poco con él —aclaró Andy—. Y solo aclaro, no por ello no creo que sea un imbécil, porque a demás de lucir aterrador, tiene un lado bien idiota.
—Una persona así tiene a ser también volátil, no es seguro para ti que compartas más tiempo con él —insistió su compañero.
Inclinando su cabeza ligeramente hacia un costado, Andy empujó sus lentes más hacia arriba.
—Suena a como si estuvieras preocupado por mí —comentó.
—Porque lo estoy —exclamó agitando sus manos.
—Si fuera así, habrías dicho algo cuando Lucio decidió por su cuenta que no debían de compartir la comida que consiguieran conmigo, ya que inmediatamente me tachó como una carga más que una ayuda solo por parecer más débil —argumentó—. ¿En dónde estaba tu preocupación en ese instante?
De forma interesante, el rostro de Russell se pintó de un furioso rojo en cosa de segundos.
—Creo que en vez de preocuparnos por ese tipo de cosas, deberíamos de ir pensando como intervenir en la manada para ayudar a sus miembros, que fue la principal razón por la cual nos trajeron —le recordó.
Levantándose como si fuera un resorte, Russell le observó con una expresión constipada, como si quisiera decir algo más, pero al final negó y simplemente se alejó murmurando cosas por lo bajo. Una estridente risa apareció una vez el humano estuvo lo suficientemente lejos, y luego Andy estaba observando a uno de las personas que Drake había presentado para acudir en caso de problemas.
—No tienes ni idea de las cosas que murmuró mientras se iba —expresó el hombre lobo entre risas.
Mirando por donde Russell se había retirado, Andy empujó sus lentes más arriba.
—Creo que puedo intuirlo.
—¿No te molesta? —indagó Mikel observándole con curiosidad.
—No, me molesta más su hipocresía.
—¿Hipo qué? ¿Tiene hipo?
—Una persona hipócrita es aquella que finge o expresa sentimientos, opiniones o valores contrarios a los que tiene para esconder a los demás sus intenciones y verdadera personalidad. Lo hacen para ganarse tu simpatía fingiendo ser un amigo, pero no dudaría ni un segundo en apuñalarte por la espalda —explicó Andy.
Asintiendo, el cambiaformas alfas masajeó pensativamente su mentón.
—Como los tres idiotas del círculo interno, que fingen ser buenos, pero son unos completos imbéciles —anunció.
—Algo así —asintió el pequeño humano.
—Creí que le seguirías el juego para no estar solo —comentó el contrario.
—No gracias, no estoy interesado en desperdiciar mi tiempo de esa forma —expresó con disgusto—. Fuera preocupación sincera o no, hay mucho trabajo por hacer por aquí como para concentrarme en mis compañeros que están actuando como idiotas.
—En cierta forma, te pareces a mi alfa líder —comentó Mikel.
Inmediatamente, la expresión del hombrecito se arrugó en desagrado.
—Estoy lejos de ser como él.
Mikel estalló en carcajadas ruidosas.
—Me refiero a que no te sabes llevar bien con los demás —indicó.
—Es un desperdicio de tiempo intentar tratar con idiotas —argumentó Andy.
—Definitivamente tienes algo en común con Drake —dijo con una gran sonrisa—. Él puede ser pésimo comunicándose con otros, pero la verdad es que tampoco está interesado en intentarlo, por eso los idiotas del círculo interno se aprovechan de eso —comentó y le observó curioso—.¿Realmente piensas que Drake es bueno?
—No sé si es una buena persona o no, pero hasta el momento no me ha mostrado ser lo que todos en esta manada dicen —explicó levantándose del suelo—. Y prefiero aquellos que van de frente con sus intenciones, que los que se ocultan bajo una sonrisa y falsa amabilidad, son los peores.
—Suena a que tuviste tu encuentro con ellos —comentó el lobo alfa.
—¿Sabes en dónde puedo lavar mi ropa? —preguntó cambiando el tema—. Intenté lavar en el pueblo, pero las mujeres no me dejaron usar su lavadero —explicó.
—Podría obligarlos a que te lo dejen —ofreció.
—¿Para que luego se enojen e intenten algo en mi contra? No gracias —negó—. En ese caso prefiero construir uno para mí, y de paso me construyo también una ducha.
—No hueles mal para una persona que no se ha bañado —comentó Mikel, moviendo su nariz.
—Porque me he bañado, pero es mucho trabajo para mi llevar tantos baldes con agua caliente a la tina y lavarme en el riachuelo no es cómodo —explicó—. ¿Me dices o debo de buscar por mi cuenta?
—Sigue el riachuelo hacia abajo, encontrarás un lago donde podrás lavar tu ropa o lavarte más cómodamente —informó.
Agradeciendo por la información, Andy quiso preguntar por su alfa líder, a quien no había visto durante toda la mañana, a pesar de que halló la forma de dejarle pescado para desayunar. Antes de que pudiera preguntar, Mikel desapareció y el hombrecito lo dejó pasar, de todas formas se tendrían que encontrar tarde o temprano en ese pequeño pueblo.
Volviendo a la casa, Andy cogió su bolso y lo llenó con su ropa sucia. Guardando una barra de jabón, salió y se internó en el bosque siguiendo las indicaciones del alfa, donde extrañamente... Sintió que alguien le estaba observando.