Estaba furioso por haber sido interrumpido cuando su mujer por fin estaba cediendo a la inminente atracción que ambos sentían. Después de la luna de miel no se atrevió a estar con nadie más. Se había recluido en una burbuja luego de que se portó con Solange con un completo imbécil. Lo había hecho por despecho, por dolor y rabia sin saber que ella era inocente al igual que él. En el fondo la quería como a su esposa. Quería hacerle el amor como a su esposa y consumar ese matrimonio fallido con ella reconociéndola como su esposa. Quería hacer las cosas con ella como era debido. — ¡Espero que en realidad se tan urgente como para llamar a esta puerta! —gritó Luka. — Joven es la señora Carlota, me dijo que le informara de urgencia que está internada porque se le subió la presión —dijo Mar