Me acerco lentamente a Alejandro, su cara muestra asombro, nuevo la silla de ruedas frente a mi, me siento en sus piernas. Con mi mirada aviso que voy a besarlo, mis labios se acercan a los suyos, nos entrelazamos en un solo beso. Siento Como sus manos me abrazan, siento como aquel beso es correspondido, eso gusta y a la vez me asusta. —Creo que para saber qué besos son mejores tendría que besar nuevamente a Tamara, necesito hacer una comparación digna— Dijo mientras se limpiaba los labios. —Supongo que tengo mi respuesta, le gusta más como ella la besa, y bueno no puedo discutir eso, para el gusto los colores— Le respondí mientras aún permanecía en sus piernas. Alejandro me miraba mientras mis labios se movían al hablar, no podía entender lo que pasaba por su mente por más que lo in