Narra Valeria. Ver la actitud de Alejandro me tiene desconcertada, no entiendo sus cambios repentinos. —Espero que si vuelves a toparte con él no le hables— Continúo diciendo enojado. —Alejandro no puedes elegirme links amistades, yo decido con quien hablar— Le respondí. Me senté frente al espejo a cepillar mi cabello, un poco de indiferencia no le haría daño a Alejandro. —Quedas advertida, no quiero tener que decírtelo una vez más. —Dime de una maldita vez lo qué pasa, estoy harta de tener que aguantar tus palabras insensibles— Le respondí mientras me levantaba de la pequeña silla. Me paré frente a Alejandro, de una buena vez lo enfrenté. —Ese hombre y yo no nos llevamos bien, vive en una constante competencia con está hacienda, y busca lo que sea para entrarse aquí— Respondió. —