— Tienen suerte de que Jones me haya dicho de la fiesta - dijo Armando bajando del helicóptero. — Joder Armando, arruinaste la diversión - dijo Jones - Este par sí que sabe divertirse - sonrió divertido - Debemos salir más a menudo chicos. — Joder - dijo Alana - Tengo un dolor de cabeza horrible. — Ya lo veo - sonrió Armando - Vayan a casa y descansen, mañana deben estar aquí temprano. — Esta bien - le sonrió - Vamos Steve - caminaron lentamente hasta llegar a la salida cuando escucharon la pelea de Jones y Armando. — ¿Que te pasa? Estamos a un día del golpe y casi haces que los metan en la cárcel - dijo Armando - Voy a tener que llamar al idiota de Brown para que haga algo que llame la atención. — Demonios no creí que terminaría así, dudaba de ellos. — ¿Al menos ya confías en ellos