Ismael
Llegamos al auto y nos dirigimos al pueblo, le mostré todo lo necesario como el parque central, la iglesia y después fuimos a la plaza de mercado a comprar algunas cosas, ella veía todo sin mucho interés, compramos algunos productos y una vez finalizamos decidí invitarla a almorzar, ya era la una de la tarde y sabía que había viajado desde muy temprano, quizás estaría agotada, aunque nunca se quejó de nada.
—Te recomiendo este lugar a ojo cerrado y tienen abierto hasta tarde, así que es una gran ventaja por si necitas algo rápido —le informé una vez llegamos al restaurante.
—Buenas tardes Bob, buenas tardes Ragnar, qué bueno verte de nuevo —saludó Helena con su cálida y jovial sonrisa.
—No sabía que se conocían —dije un poco extrañado.
—Sí, esta mañana tuvimos un altercado de nuevo con el trío de oro, ella estaba aquí desayunando y justo en ese momento los puso en su lugar, fue nuestra heroína —respondió Helena con entusiasmo.
—Entiendo, bueno, ella es mi sobrina, así que te pido que por favor la ayudes en lo que llegase a necesitar Helena, me alegra que conociera a alguien bueno y decente aquí.
La cara de ella fue una gran sorpresa, nunca me han visto con nadie y menos familia, pero puedo confiar en Helena, es una buena mujer y así como Ragnar y yo, ella llegó a este lugar hace unos años. Ella nos toma el pedido y se va con esa habitual sonrisa sin hacer preguntas.
—¿Por qué no me dijiste lo que pasó en la mañana con esos chicos?
—Porque no lo consideré relevante tío Isma —soltó con cierto sarcasmo.
Maldición, si no aclaramos algunas cosas no podré con esto.
—Deja de llamarme así, aquí todos me conocen como Bob, así que no vuelvas a mencionarlo a menos que estemos a solas ¿Entendido?
—Sí tío Bob —esta niña me sacará algunas canas más, pero debo encontrar un punto de inflexión en todo esto.
—Respecto a lo que dije —suspiré profundamente. —Ragnar, es mejor que sepan que eres mi sobrina, no quiero que estés en boca de todos, además, eres hija de Marc, Olivia y Oz te adoran y a este último le llamas tío, así que prácticamente soy como otro tío, solo que no del tipo cariñoso.
—Solo le digo así porque él me lo pidió y sé que no eres el tío cariñoso, “tío Bob”. Imagino que habrás leído alguna carta de parte de Oz —lo vio, aun cuando ese psicópata dijo que no lo haría.
—¿Cómo lo sabes?
—Tus cambios de actitud te delatan y desde que regresé del baño estás menos a la defensiva conmigo, así que él debió decirte algo y dudo que lo llamaras en ese tiempo o te habría escuchado cuando llegué —tan mordaz y astuta como él, parecen cortados con la misma tijera.
—Ragnar yo...
En ese momento nos vimos interrumpidos por la llegada de Helena con nuestro pedido, así que no mencionamos más y comimos en silencio. Luego de cancelar, ella le dio a Ragnar una de sus mermeladas como agradecimiento por lo de esta mañana y dijo que le había conseguido un frasco de miel, supongo que algo habrán acordado, no lo sé, después nos fuimos a casa donde ella pasó el resto de la tarde en su cuarto en lo que yo estaba en la oficina leyendo esa carta una y otra vez.
—Al menos te luciste enviando ese especial de Jack Daniel’s y los cigarrillos —dije para mí en lo que encendía uno y servía un vaso.
(…)
Ragnar
Luego de arreglar todas mis cosas, llamar a casa para informar de mi llegada y darme una ducha para refrescarme y descansar hasta caída la noche, que es cuando salí para hacerle una visita a tres chicos asaltados hoy, aproveché unos momentos que estuve a solas en la plaza para preguntar por las familias de ellos y la información que obtuve fue bastante interesante. La casa del primer idiota que visité era bastante grande, se notaba el poder que tenían en ese pueblo, supongo que de algo tenía que servir que fuesen los propietarios de tantas hectáreas, pues según me dijeron estaban en el negocio de la agricultura siendo los mejores en la zona.
—Buenas noches ¿En qué puedo servirle?
Me recibe un hombre mayor que grita ego por todas partes, dándome una idea de por dónde irá este asunto y es por eso que mujer precavida vale por dos.
—Buenas noches, vine para devolver una billetera y según me dijeron en el pueblo le pertenece a su hijo, como podrá ver se encuentran todos sus documentos, tarjetas y dinero.
—Sí, mi hijo me dijo del asalto, es increíble ver la inseguridad en este lugar —comenta el hombre en lo que toma la billetera.
—Estoy de acuerdo con usted, al menos su hijo salió bien librado en la mañana, solo que no sé qué tan bien librado salga esta noche —dije antes de que hiciera cualquier pregunta obteniendo la total atención del susodicho.
Luego de convencerlo para reunirnos en su despacho y que llamara a los padres de los otros dos idiotas, entramos en una discusión un tanto acalorada por un pequeño acuerdo que quería hacer con ellos, aunque igual no sé por qué lloran tanto, no estoy pidiendo nada que no puedan hacer y más considerando que tienen el poder y los recursos, a fin de cuentas, Smith es el mejor en la agricultura, Jackson el gerente general del banco y Reinhart es el alcalde.
El propósito era vengarme de los idiotas haciendo que sus padres les quitara hasta el último lujo posible y en paralelo, también quería obtener un poco de poder durante mi estadía en este lugar sin levantar las sospechas de nadie para evitar revuelos y otras cosas más, básicamente quería gobernar en las sombras.
—Muy bien Wintar, fuiste muy clara con tus exigencias y da por hecho que nuestros hijos aprenderán la lección, pero ¿qué ganamos nosotros de todo esto?
—Simple señor Reinhart, respeto por parte del pueblo, si ven que ustedes como las cabezas más importantes del lugar están poniendo en cintura a sus hijos y éstos dejan de ser la manzana podrida, entonces la gente se sentirá más segura y yo podré hacer que ellos los apoyen en cierta campaña que tienen en mente.
Recuerdo cuando Diana dice que es más rápido el camino de la extorsión que negociar en buenos términos, así que luego de aclarar todos los puntos y ver que los tenía en mis redes, ellos aceptaron, total, no hay mejor forma de llegar a las personas que enredándolos entre sus vicios y debilidades, algo que para mí era fácil de hacer. Ya después se darían cuenta que sí había sido una buena elección el haber hecho esto.
Quizás Nick y Alex tengan razón, soy todo un demonio y ellos acaban de hacer un trato conmigo.
(…)
Ismael
Ya era de noche y seguía sin sacarme de la mente todo lo ocurrido el día de hoy, tenía que hablar con Oz cuanto antes, Marc y Olivia no dijeron mucho de ella, solo que la cuidara, que era de fiar y le ayudara en todo lo necesario, pero esa actitud tan fría como si nada le importara... es algo que me deja muy inquieto. Ella es una chica hermosa, sin duda tendría a cualquiera a sus pies y pensar en el altercado de esta mañana le podría traer problemas, esas familias protegen de todo a sus hijos que no hacen más que provocar destrozos a donde vayan. Es por eso que me serví otro trago y marqué a ese idiota para sacarme todas las dudas cuanto antes.
—Pensé que no llamarías, supongo que sacaste conclusiones apresuradas antes de siquiera averiguar algo.
—Hola a ti también Oz, mejor deja los rodeos que tú no me enviaste eso porque sí, esa carta dice muy poco y esa mujer...
—Esa mujer será tu más importante responsabilidad a partir de ahora, por tanto, cuida de mi pequeña y no dejes que los idiotas se acerquen a ella, aleja a esos buitres.
—Oz, deja de jugar al tío celoso que eso no te queda y dime lo que quiero saber.
Escucho un gran suspiro del otro lado de la línea, por lo visto esto sería largo y en definitiva no sería bueno.
Estuvimos hasta altas horas de la noche hablando, me contó toda su historia y ahora comprendo mejor la situación, llegando a aclarar también todo lo ocurrido hoy. Tuve una ligera sospecha de que algo malo le había ocurrido o quizás eran ganas de llamar la atención, pero nunca imaginé ese pasado, lo más sorprendente fue enterarme de que ella tenía solo quince años cuando se veía una mujer de veinte, su belleza es única sin lugar a dudas.
No obstante, el escuchar todo eso me hicieron caer en cuenta que la persona que Oz me mencionó años atrás era Ragnar, lo que también me hizo comprender por qué no quiso darme muchos detalles sobre ella en aquel entonces. Asimismo, dicha conversación llegó a remover algunas cosas en mí que ahora se tornaban en un tortuoso eco.
Flashback
—Sé que aún guardas ese dolor en ti Ismael, pero te pido que la cuides, ella tampoco la ha tenido fácil así que no se lo compliques, tan solo quiere conocerse más y tener una vida tranquila, y creo que se lo merece, conócela y entenderás nuestro cariño.
—¿Por qué tanto interés en ella Oz? ¿Qué sabes que yo no sepa?
—Ella, al igual que tú, necesita ver su reflejo, necesita ver más allá de lo que tiene en su entorno pues todavía teme aun cuando tenga todas las armas para defenderse.
—¿Y qué puedo hacer por ella según tú?
—Mostrarle un camino diferente, enseñarle que tiene la oportunidad de tener otra vida ahora que ha conocido lo bueno y lo malo en este mundo, a fin de cuentas, tú siempre estuviste en un punto medio entre Marc y yo.
Fin del flashback
Sabía por qué lo decía, pero no comprendía todavía cómo ayudarla cuando estaba tan dañado por dentro, cuando mi cicatriz todavía dolía y más ahora que la vería diariamente recordándome los hechos que me han carcomido por años.
(...)
Hoy es otro día, me levanté con un poco más de ánimo y por ende, había decidido hacerlo, si ellos confían tanto en ella entonces yo también lo haré, así que toqué su puerta para hablar con ella, pero no abrió, supongo que estaría muy cansada y apenas son las siete de la mañana… yo y esa mala costumbre de querer hacer todo cuanto antes.
Bajé para abrir el gimnasio cuando escucho un ruido en el jardín y me dirigí allá encontrándola con una bolsa en las piernas mientras recogía toda la hierba podada, parecía otro sitio, la mesa y las sillas estaban secándose al sol tras ser pintadas de n***o, todo se veía más grande al estar despejado y de nuevo los recuerdos me invadieron.
—No te hubieras molestado Ragnar, no era tu deber.
—Lo sé, pero era necesario —esa niña será mi perdición.
—Te traeré un poco de agua debes estar sedienta ¿Desde qué hora llevas haciendo esto? Porque dudo que lo hicieras en unos minutos.
—Llevo despierta desde las tres y empecé a las cinco, tenía un poco de pintura en el auto y algunas cosas más así que decidí despejarlo.
—¿Acaso no duermes niña? eso es muy temprano, espero que comieras algo.
—Aún no, hice ejercicio unas horas y luego esto —responde como si nada en lo que continúa recogiendo el césped.
—Mierda Ragnar ¿Qué diablos pasa contigo? Deja esas malditas bolsas y vamos a comer.
La regañé y cuando iba a tomar su mano me percaté de lo que hacía, ella no me miró mal, de hecho, no ha cambiado su expresión adusta y gélida desde que llegó. Debo controlarme o todo esto se saldrá de mis manos y no puedo permitirlo.
—Lo siento, no era mi intensión gritarte, vamos a desayunar quiero hablar contigo.
Ella no dijo nada y se fue a bañar para después irnos al restaurante, de nuevo Helena nos saludó, cruzó un par de palabras con ella y fue por nuestro pedido. Ayer al atardecer había venido a hablar con ella y me comentó con lujo de detalles sobre el evento de la mañana, lo que me tenía pensando que en cualquier momento podrían ir tras ella.
—¿De qué quieres hablar?
—Primero quiero pedirte una disculpa nuevamente por todo lo de ayer y lo de hace un rato, no soy de hacer esto; pero es necesario, por otro lado, creo que debería hablar con las familias de esos chicos por lo ocurrido, no quiero que vayan a hacerte algo, estás a mi cuidado y eres mi responsabilidad ahora.
—La disculpa es innecesaria, entiendo que tendrás tus motivos, de lo otro no esperes que me disculpe y tampoco hay que hablar con ellos, puesto que lo hice ayer en la noche.
—¿Cómo? ¿De qué hablas? ¿Por qué hiciste semejante cosa y sola? Además ¿Cómo conseguiste hablar con ellos?
—Tenía sus billeteras y pregunté en el pueblo por sus direcciones, solo fui a devolverlas, aproveché para hablar con sus padres y todo quedó bien, no tienes nada de qué preocuparte, así que no vuelvas a mencionar el tema —¿qué rayos tenía ella en la mente?
—Está bien, por otro lado, estuve pensando en tu propuesta y acepto, no creo que lo logres, pero al menos el lugar quedará genial, solo dime qué necesitas para empezar a buscar las cosas.
—Primero coloca a los chicos a limpiar esa pocilga de mala muerte incluido el segundo piso, para lo demás te hice una lista de cosas, podemos comer y de aquí buscaremos lo que necesitamos en el pueblo.
Y así lo hicimos, comimos y nos dirigimos al pueblo buscando las cosas y mandando a hacer otras, aunque en la tarde que regresamos las cosas se pusieron feas en el gimnasio, ellos no querían hacer nada y la trataron de loca, a lo que ella les ofreció que si lograban vencerla en una pelea los dejaría tranquilos, de lo contrario, ellos limpiarían.
Basta decir que después de eso pasaron dos semanas de sufrimiento obedeciendo sus órdenes tras recibir una paliza de su parte al querer hacerse los listos, la acorralaban, se le iban de uno en uno, a veces en parejas, era todo un espectáculo, al final ella ganaba y ellos limpiaban, creo que son muy masoquistas, pero también creo que ella será una buena influencia.