Capitulo treinta y ocho. Nick

1847 Words
Empiezo la semana con una sesión con mi terapeuta, lo confieso, jamás pensé decir lo que estoy diciendo en este momento, pero mi vida a cambiado tanto que ni yo mismo me lo creo. —Elton, ¿puedo confiar en ti? — pregunto mientras me acomodo en el sofá de mi estudio —¿tengo tu palabra que lo que hablemos no saldrá de aquí? —Sabes que todo lo que digas es confidencial, al menos que me digas que vas a matar a alguien o confieses un homicidio, pero de lo contrario tienes mi palabra que de mis labios no saldrá nada, es mas para tu tranquilidad, apago mi celular y no tomo notas. —Por favor — insisto mirándole a los ojos — todo lo que hablemos hoy quiero que quede entre los dos. —Si Nick, confía en mí, tiene mi palabra, ¿Qué es eso que te tiene tan tenso? —Básicamente, una sola cosa, el amor. — ¿Cómo es eso que el amor te tiene tenso? — Estoy enamorado de Sofia, mi asistente, pero perdidamente enamorado de ella, no te imaginas cuanto… —Pero eso no es malo — insiste con una sonrisa en los labios— ¿Por qué podría tenerte ese tema tenso? —Porque temo hacerle daño, temo llevarla a mi abismo como mi padre hizo con mi madre. —Pero tu no eres tu padre, creo que eso ya lo sabes, tú eres diferente porque decidiste tomar el control de tu vida, así que no le veo el problema, simplemente confía en ti y en tus buenas decisiones. —Eso intento — digo poniéndome de pie — pero me asusta tanto todo lo que siento en mi pecho, empezando que ella era la empleada de servicio y las demás chicas la odian, además esta indocumentada… —Lo de las demás chicas no creo que sea el problema, simplemente cambias el servicio y deberán acostumbrarse a ella los nuevos que lleguen, no creo que ser una empleada de servicio sea deshonra. —Y si se filtra a la prensa y todos hablan de ella, ¿Cómo se sentirá? — Pues lo trabajamos entonces en terapia — dice riendo — pero no creo que sea un problema, debe entender quién eres tú, las condiciones de vida que tienes, y demás cosas, además lo de los documentos se soluciona, no es la primera indocumentada dentro del país. —Si, eso es cierto, pero no se todo es tan estresante, me confunde tanto, que no sé qué hacer. —Y si simplemente deja que la relación avance y en la medida que estén listos van al siguiente nivel o simplemente la dejan y ya, al final eres un hombre adulto dueño de tu vida. —¿y Jack? —¿Qué paso con él? —pregunta confundido. —Él quiere tener control de todo en cuanto a mí respecta. —Entonces deberás cambiar de manager, así de simple, el hecho que seas famoso y actor no da permiso para que otros dominen tu vida, creo que ya tienes experiencia en el medio, conoces gente, contactos, amigos, así como la sumas de dinero que has podido ahorrar, creo que no deberías temerle. —Si, tienes razón — digo meditando —Hay otro tema. — ¿Cuál? — pregunta apenas en un susurro. —El hijo de Sofia no es de ella, cuando ingreso al país técnicamente lo encontró abandonado y no pudo dejarlo a su suerte, así que lo ha criado como tal y ahora yo lo voy a adoptar. —Pues no le veo nada de extraño, muchos famosos adoptan niños, creo que es cuestión que te relajes, independiente de lo que ocurra, estarías dándole a un niño otra vida… — Puede ser… Me quedo en silencio un rato pensando en todo lo que dice, creo que al final las cosas pueden resultar más fácil de lo que parece en un principio. — Hay otra cosa— digo volviéndome a sentar — estoy decidido en ir a visitar a mis padres. —Eso me gusta ¿Cuándo estas planeando viajar? —Cuando termine grabación, Sofia esta encargada del tema, igual es mi asistente, los detectives me dieron información sobre ellos, así que los visitaría un fin de semana. —¿Quieres que te acompañe? —No —digo mientras niego con la cabeza — voy con Sofia, pero quiero que estés disponible por si te llego a requerir. —Esta bien, ahora hablemos de eso del amor —dice con una media sonrisa. Pasamos la siguiente hora conversando de todo lo que me asusta, de mis miedos e inseguridades para concluir que los dos estamos igual de asustados y para poder avanzar tenemos que trabajar mucho en terapia, hay muchas barreras que derrumbar antes que relación vea la luz y los ojos de todos apunten hacia nosotros. Para nuestro deleite, cuando vamos en camino a la puerta vemos a Mariela acorralando a Sofia e insultándola, y siento como la rabia empieza a invadir mi cuerpo, ¿Por qué ella la trata de esa manera? ¿Por qué Sofia se deja?, miro a Elton quien esta entretenido observando la escena, mientras le susurro. —A esto me refería antes, es esto a lo que no quiero exponerla. —El problema no es Sofia, son los otros que no pueden con que alguien avance en su vida y sea feliz, pero te aconsejo que apenas puedas mires las cámaras de seguridad —susurra señalándola con el dedo. —Si, pero esto debo pararlo ya. —Mariela puedes venir a mi oficina — digo desde lo alto de la escalera. Veo como su rostro se contorsiona y pierde los colores, en definitiva la tome de sorpresa, le doy una indicación a Sofia mientras Mariela sube, la rabia fluye por mi cuerpo y debo controlarme para no matarla. —Usa tu autocontrol Nick — dice Elton como despedida — te llamo en un rato, solo mantén la calma, y te guste o no, esto es parte del paquete que amas. Asiento mientras nos despedimos y el bajo las escaleras cuando Mariela llega hasta mí. Camino detrás de mi empleada a la que estoy a punto de despedir, debo controlarme, aunque confieso que podría hacerlo sin inconvenientes, esta dentro de las reglas de la casa respetar a los compañeros de trabajo. —Mariela — empiezo a decir una vez entra a la oficina — ¿Qué te pasa con Sofia? —Nada señor — dice en apenas un susurro. —No puedes decir nada, si yo mismo te vi y te oí, estabas reclamándole algo, le estabas diciendo que su trabajo era ser mi amante. —Si señor — dice apenas audible — es que no me parece justo que sea su asistente y usted le dé tanto a ella. —Mariela, eso no es de tu incumbencia, además antes te ofrecí vivir en un apartamento y otras cosas, recuerdo muy bien que en ese momento lo rechazaste, en cuanto le pedí a Sofia ser mi asistente no se negó, y las clases es porque lo necesita para ser mi asistente, y a ti te ofrecí estudiar todo lo relacionado a estética y peluquería, y dijiste que estabas muy ocupada… así que no me digas que yo no te ofrecí otras oportunidades antes. —Si señor— dice apenada —es solo que ¿Por qué Sofia? —¿Por qué no? Además, yo soy el jefe aquí y no creo que estés en posición de cuestionar. — Pero ella apenas llego, ¿Por qué ella es su asistente?— dice en tono de reclamo. — Y tu eres el ama de llaves, así que también eres mi asistente. — Pero ella va a las grabaciones — dice reclamando. Alzo levemente la ceja mientras ella se queda en silencio para darse cuenta que se esta pasando conmigo, creo que se siente con confianza desde el día que me ayudo a pasar una borrachera monumental, pero hay un limite para todo y ella lo cruzo en este momento, y creo que se dio cuenta porque se queda en silencio. No la despido porque sé que de ella tiene mucha información, de lo contrario estaría caminando hacia su casa en este momento. —Señor disculpe, prometo que no va a volver a suceder. —Otra y voy a tener que despedirte — digo en tono de advertencia — sabes que está en las reglas no pelear con los compañeros. — Si señor, no volverá a suceder. Y sin mas se fue, respiro profundo para responder la llamada de Elton. — ¿Cómo te fue? — Bien, prometió que no volvía a suceder, pero voy a estar atento… —Revisa las cámaras cuando puedas. — ¿Por qué? — Porque Sofia pudo haber iniciado la discusión o esta situación se ha repetido muchas veces, así que estate atento a ello. —Si, tienes razón — suelto el aire contenido. Cuando terminamos la llamada reviso la cámara y efectivamente fue Mariela quien empezó y esta no fue la primera vez, debo irme de aquí antes de hacer una locura. Camino al parqueadero donde me esta esperando Sofia, tomo las llaves del primer auto que encuentro y nos vamos. En definitiva, el Spa era lo que necesitaba, siento cada nudo de mi espalda se deshace, el cansancio de las grabaciones mientras lucho con la ansiedad, los miedos a enfrentar las cosas, todo condensado en las ultimas semanas. Y creo que no fue el único que se relajó, Sofia está profundamente dormida, le sonrió a la chica que ha estado atendiéndola y le pido en un susurro que la deje descansar, se ve hermosa tan relajada y creo que necesitábamos este espacio. Aunque lo que mas me gusto de todo es cuando me pide que le regale un arreglo de uñas y cabello, creo que es algo que nunca ha hecho, con ese trabajo quizás era lo ultimo en lo que podría pensar, ir a un salón de belleza, así que la veo sonriente mientras le pintan las uñas del color que elije y le peinan. Debo confesar que sus manos cada día son mas suaves, su postura empieza a cambiar ligeramente, su forma de hablar cada vez es mas refinado y ni hablar de su forma de caminar, ahora es un paso seguro, como si supiera el lugar que ocupa en la tierra. En definitiva, me gusta ver como crece y evoluciona frente a mis ojos, lo único que pido es que no deje de ser ella. Paso la semana paso buscando manager, podría invitarlos a la casa y vendrían gustosos, pero esta vez quiero ser yo quien vaya a ellos, quiero ver sus oficinas, ver sus secretarias, la forma como tratan a otra persona, no quiero otro Jack en mi vida. Dice que las personas que llegan a la vida son el resultado de lo que soy y la forma como vibro, y en ese momento me dedicaba a emborracharme y bailaba en un club nudista, de milagro estoy vivo.
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