UN HOMBRE MISTERIOSO

1386 Words
Hotel del Mar, Piedro toca la puerta de la habitación de Georgina, pero nadie le responde. Y entra de nuevo a su habitación y coge su teléfono para luego llamar a Georgina. En el restaurante, el teléfono de Georgina timbra en repetidas ocasiones. Cuando está abre su bolso y ve el nombre de quien la llama, y dice: — ¡Ah! Emmanuel mira el teléfono de Georgina, y luego la mira a ella, y le pregunta: — ¿Por qué no contestas? — Es Piedro. — Debe de estar preocupado. — ¿Ahora te convertiste en un hombre comprensivo? — Es que, si no le contestas, ese ruido que hace el celular me va a hacer doler la cabeza. De inmediato, Georgina apaga su teléfono y lo mete de nuevo a su bolso, diciéndole a Emmanuel: — Listo, problema resuelto. Emmanuel se sonrío bastante, y le expresa: — Eres una mujer demasiadamente de inteligente. — Ante todos estos halagos intentas acostarte conmigo en una primera cita, te digo que estás totalmente equivocado… Emmanuel se lleva a Georgina al Paseo de Gracia y al Parque Güell. Y disfrutan de la agradable tarde que hace… Barrio Gótico, Emmanuel y Georgina se besan apasionadamente antes de entrar al apartamento. Cómo puede, Emmanuel abre la puerta de su apartamento y entra a Georgina. Cuando está queda muy asombrada de cómo vive en Emmanuel, y le dice: — ¡Vaya! ¡Vives como un príncipe! Emmanuel abraza a Georgina por la espalda, y le expresa: — Ya tendremos tiempo para seguir hablando. Ahora tenemos muchas cosas que hacer tú y yo. Georgina se sonríe, y se da vuelta y besa a Emmanuel… Minuto después, Emmanuel y Georgina terminan de hacer el amor. Cuando se quedan viendo las caras y se sonríen. Georgina mira el techo, y dice: — Eso fue espectacular. — ¿Lo dices por hacerme sentir bien o porque realmente lo sentiste? — Porque realmente lo siento. Emmanuel, ¿te sientes inseguro? — No, no, claro que no, hace mucho tiempo que no me sentía también. — Lo mismo digo yo. 2:40 am, Emmanuel vuelve a soñar con mucho fuego, pero esta vez intenta escapar de las llamas, pero no puede salir de la casa que se encuentra. Y comienza a gritar a sus padres con gran desesperación. Cuando Georgina se despierta… Muy asustada, Georgina pone sus dos manos en el pecho de Emmanuel y lo mueve, diciéndole: — ¡Despierta! ¡Despierta! ¡Despierta! En ese instante, Emmanuel se despierta de esa pesadilla. Cuando Georgina le dice: — Me asuste viéndote gritar así… ¿estás bien? Emmanuel se tranquiliza un poco, y le responde: — Tenía una pesadilla. — Parece que era muy fuerte. ¿Porque gritabas el nombre de tus padres como loco? — Solo fue una pesadilla, no le des importancia a eso, mejor volvamos a dormir. — ¿Estás seguro que estás bien? — Sí, sí, no te preocupes, volvamos a dormir. Georgina le hace caso a Emmanuel. Y se queda dormida después de pasar cuatro minutos. Luego de ver que Georgina se durmió, Emmanuel se levanta de la cama y se va a la sala. Y enciende su portátil. Para luego ver las fotos de sus padres… En seguida, Emmanuel quita las fotos de la pantalla. Y se recuesta en la silla. Cuando se acuerda de la mujer del carro y busca enseguida su cámara. Para mostrar la foto en el computador. Después de unos segundos, Emmanuel mira la foto que le tomo a la mujer del vehículo. Y luego de examinar la foto por varios minutos, la imprime. Y la va a la habitación donde tiene cientos de retratos en las paredes. En ese instante, Emmanuel pega la foto cerca de donde están las modelos de Claudia, y dice: — Una foto casual de una bella desconocida… En la mañana siguiente, Georgina se despierta y se da vuelta. Y no ve a Emmanuel por ningún lado. Cuando esté entra a la habitación con una bandeja en sus manos, diciendo: — Me dañaste la sorpresa. Georgina se sonríe, y le pregunta a Emmanuel: — ¿Qué hora es? — Son las siete. Georgina pone su mano derecha en su rostro, y dice: — Debe de estar Piedro enloquecido buscándome por todas partes. — Desayuna primero, y luego te llevo al hotel. — ¿Sera? Emmanuel se sienta en la cama, y pone la bandeja en las piernas de Georgina, y le expresa: — Desayuna para que recobre fuerzas. — Bueno. — ¡Mira! Te prepare un buen sándwich, un buen jugo de naranjas, unos huevos revueltos y café. — Gracias. Esto se ve muy bueno. — Que lo aproveches. — ¿Y tú no vas a desayunar? — Ya me tomé un café. — ¿Solo eso? — Es suficiente por ahora. En seguida, Georgina comienza a desayunar. Probando todo lo que hizo Emmanuel, y luego le dice: — Ya tienes un punto muy a favor, este desayuno está muy bueno. — Ese punto nada más. Georgina se sonríe bastante, y dice: — Fue la mejor noche que he pasado. — Espero que no sea la última. — No… Emmanuel le da un beso a Georgina, y luego le dice: — Bueno, termina eso para llevarte al hotel. — Bueno… Minutos después, Georgina termina de desayunar. Y se regla para luego recorrer el lujoso apartamento de Emmanuel. Cuando llega a una habitación y se detiene. En ese instante, Georgina intenta abrir la puerta de la habitación. Cuando Emmanuel se para atrás de ella, diciéndole: — ¿Ya estas lista? Georgina se asusta un poco, y le dice a Emmanuel: — Sí, sí, ya estoy lista. — Qué bueno. — Espera, ¿qué tienes aquí? — Ah, sí, chécheres y más chécheres, si abro esa puerta en este momento, de seguro nos caerán un montón de paquetes. — ¿Así de lleno tienes esto? — Sí, bastante. — Bueno, llévame al hotel. — Como tú digas. Luego de unos minutos, Emmanuel llega al hotel. Cuando le dice a Georgina: — Llegamos. — Gracias por la gran noche que me hiciste pasar. — Recuerda que puedes pasar esa y muchas más si tú lo quisieras, solo piensa la propuesta que te dije en el restaurante. Georgina se queda pensado, y luego le dije: — Yo pensé que estabas jugando con eso. — No, no, lo que te dije es muy en serio, desde hace tiempo he pensado en establecerme y tener una familia. Y pienso que tú eres la mujer indicada. — Oh, eso sonó bonito… no sé qué decirte. Emmanuel le da un beso a Georgina, y le expresa: — Piénsalo, yo puedo cumplir tus sueños aún más rápido qué Piedro. — Eso no me ilusiona en estos momentos. — ¿Así? — Lo que quiero es que no vayas a jugar conmigo. — Claro que no. Georgina intenta abrir la puerta. Cuando Emmanuel le dice: — ¡Espera! yo te abro la puerta. De inmediato, Emmanuel se porta como todo un caballero y le abre la puerta a Georgina. Cuando este dice: — ¿Nos vemos en la noche? — Por supuesto. — Que bien. — Esta noche te daré una respuesta. — Bueno. En ese instante, Piedro y cuatro policías salen del hotel del Mar. Cuando ven a Georgina y Emmanuel besándose. Piedro se enardece como nunca lo había estado, y le grita a la pareja, diciéndole: — ¡¿QUÉ CREEN QUE ESTAN HACIENDO?! De inmediato, Georgina le dice a Emmanuel: — ¡Vete! Yo te llamo más tarde. — ¿Puedes arreglar esto? — Claro, yo te llamo para vernos más tarde. Un policía le dice a Piedro: — ¿Ella es la mujer que estaba desaparecida? — Sí, es ella señor agente. Emmanuel se va de lugar. Cuando Piedro se acerca a Georgina, y le dice: — Todo este tiempo estabas con ese hombre que apenas conoces y no pudiste llamarme. Para decirme que estabas bien. — Discúlpame Piedro, fui muy desconsiderada contigo. — Estuve a punto de llamar a tus padres, esto no puede seguir así. — Si, tienes razón, esto no va a seguir. Piedro queda mirando muy feo a Georgina, y dice: — ¿Qué quieres decir? — Que yo voy a continuar con mi carrera sola…
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