Herederos

Capítulo 4

Seok Min se remueve con ansiedad de su asiento. Su padre está en una reunión con otros trabajadores del hospital. Él no sabe lo que está pasando y está asustado porque siempre sabe lo que pasa.

Seok Min se siente inquieto y ansioso porque no está al tanto de la situación. Así es como su personalidad siempre ha sido. Él siempre ha tenido el control de las cosas, siempre ha estado ahí para arreglar los problemas correctamente. Siempre sabe qué va a pasar, cuándo va a suceder y cómo sucederá.

Se pone de pie al escuchar los gritos procedentes de la sala continua. Así que hace su camino hacia la puerta, pero es detenido por  uno de los asistentes y se muerde el labio inferior para no soltar tremendas palabrotas que podrían arruinar su imagen de buen chico.

Quiere gritarles, decirles que es el heredero de este hospital y que tiene todo el derecho a saber qué demonios pasa. Tiene veintiuno, merece estar en la sala, tanto como todas esas personas allí dentro.

Suspira y acomoda su camisa de vestir (él abandonó su corbata y traje, cuando su padre convocó una reunión). Su cabello está revuelto por el estrés y su el primer botón de su camisa está desabrochada descuidadamente.

Es sofocante esperar a que esta reunión se acabe.

Así, con una última mirada al asistente inquebrantable, toma su teléfono Galaxy de la mesa y se dirige hacia el ascensor. Él hace su camino dentro y con dureza presiona el botón del primer piso. Él golpea ligeramente su pie en el suelo y siente que por fin puede respirar cuando las puertas se abren. No duda en caminar hacia fuera por un poco de aire fresco.

Él suspira y cierra los ojos cuando siente el aire golpear contra su rostro. Hace frío durante el día, pero Seok Min lo disfruta porque era tan caliente y frustrante en el interior.

Respira profundamente y tose porque… ¿Por qué el olor del aire está tan contaminado, de repente?

Abre los ojos y ve como  alguien está aparcado justo en frente del hospital junto a su motocicleta. El hombre tiene un pie contra la acera que soporta su peso y el de la motocicleta.

Se quita el casco y Seok Min gruñe.

 Él tiene el cabello teñido. Ya no tiene esa cabellera rubia, pero Seok Min todavía puede decir quién es. Quiere decir, vamos, es Han Lu, lo reconocería en cualquier lugar. El muchacho destaca  por su aspecto.

Mastica un chicle cuando escupe en la acera, Seok Min hace un ruido de disgusto y Han Lu mira en su dirección.

Sus ojos se encuentran y Han Lu lo mira de reojo. —¿Te conozco?— Él pregunta y es la primera vez que Seok Min escucha su voz tranquila no la que sale en las noticias cuando sale gritando.

—¿Realmente no me reconoces?— Seok Min pregunta con sarcasmo y su tono de voz le sorprende.

Los ojos de Han Lu se oscurecen, —No creo que sea importante.— Él asiente con la cabeza en dirección a la entrada del hospital. —Dime todo lo que sabes acerca de este lugar, escuché que está en venta.—

Seok Min puede ver que Han Lu es un idiota. Él realmente lo es. —No te diré nada—

Han Lu asiente y empieza a sacar algo de su bolsillo. Él tiene un montón de cientos enrollados y él saca un poco para entregárselos a Seok Min.

—¿Sabes quién soy?— Seok Min gruñe mientras mira fijamente al dinero. —Yo nunca te diría lo que sucede en esta empresa, no es de tu incumbencia—

Los labios de Han Lu arquean un poco, —Oh, si lo es. Cuando mi padre compre este lugar de los Kim, lo destruirá.—

Seok Min mira a Han Lu, —Al igual que mi padre nunca dejará que su padre compre este lugar.—

—¿Su padre?—

—El Sr. Kim, veo que tu padre necesita de su ayuda por información. Algunas cosas se le han ido de las manos.— Un hombre camina hacia fuera y se rasca el cuello con torpeza cuando Han Lu se le queda mirando.

Seok Min gira y asiente. —Ya voy.—

Han Lu mira al hombre desaparecer en el interior del hospital y se ríe. —Usted es el heredero, ah mi enemigo.—

—Yo no tengo enemigos, pero si piensas destruir el lugar dónde mi padre trabaja, yo podría averiguar cómo se siente tener un enemigo.— Seok Min comenta.

—Bueno, si quieres que seamos enemigos está bien, pero me esperaba algo más...— Han Lu se desvanece con una sonrisa.

Seok Min se burla, —Es muy gracioso si usted piensa que traicionaré a mi padre o familia.—

Han Lu ríe y sus ojos brillan. —Eres lindo,— Camina a su motocicleta, salta sobre esta y se pone el casco.

Él se despidió lindamente de Seok Min y éste gruñó. Esta es la primera vez que no tiene control sobre una situación y se siente como una presa ante Han Lu.

~

Soo Kyung está fuera con una gran chaqueta color rojo. Él bebe de una taza de chocolate caliente y tararea contento.

Suspira y respira en el teléfono celular, —Solo basta con aceptar sus disculpas, Fan Yi. Están tratando de hacer bien las cosas.—

Fan Yi se burla y Soo Kyung pone los ojos. —Si no hubieran hecho todas esas cosas desagradables cuando era más joven no estaríamos tan jodidos.—

Soo Kyung sonríe tristemente, —Entiendo, Fan.— Él realmente hace honor a la verdad, pero aun así lo que Fan Yi iba a hacer no era aceptable. —¿Pero por qué arrastrar a alguien más en este lío?, ¿Sabes la regla de tu padre 'Mantener los negocios y el placer como dos cosas separadas.’— .

—Sí, pero Xing Yi no es  un negocio. Él no trabaja para la compañía.—

—No, pero trabaja para tus padres de cualquier manera.— Soo Kyung suspiró una vez más, —Vas a hacerle daño, ¿Eso es lo que quieres?—

—¿Por qué debería importarme?— Fan Yi espetó. —Toda esta mierda es culpa de la madre y de mi padre.— Casi gruñó antes de colgar.

Soo Kyung sacó el teléfono de su oreja y se lo metió en el bolsillo de su chaqueta. Fan Yi es serio tan dramático. Soo Kyung no lo culpa, sin embargo, él ha pasado por muchas cosas, pero en la actualidad Soo Kyung está pasando por lo que Fan Yi pasó, hace mucho tiempo. Su padre continúa viendo a mujeres diferentes y actúa como si él no existiera. Es como si la ausencia de su madre no importara y Soo Kyung lo odia.

Se encuentra a fuera porque él supone que debería de disfrutar su tiempo antes que estar en su sofocante casa. Las mujeres de su padre se mudan pero  Soo Kyung sabe que ellas se irán la próxima semana, ya que siempre están muy  pegajosas, son demasiado ruidosas, están  demasiado ansiosas, demasiado hiperactivas, todo el tiempo para el gusto de su padre.

Soo Kyung para su andar en un puesto de comida provocando que su estómago gruña. Él frota su estómago y la anciana que está vendiendo la comida le sonríe apuntando a un montón de comida que puede elegir.  Él golpea ligeramente su barbilla y está a punto de escoger algo cuando alguien golpea ligeramente el hombro.

—¿Hyung?— Un niño moreno con cabello rubio lo llama con una sonrisa en sus labios color rosa. Soo Kyung muerde su labio inferior debido  En el infierno, ¿quién es este? Un hombre tan jodidamente guapo.

El joven se  debe de haber dado cuenta de su expresión confusa por lo que sonríe. —Soy yo, Kim Gin Jon, nos reunimos ayer. Sólo cambié el color de mi cabello esta mañana, tal vez por eso no me reconoces.—

Soo Kyung asiente con la cabeza y  con su labio inferior todavía escondido debajo de sus dientes. Él tiene un ligero rubor y mira a Gin Jon, —Oh, lo siento. Yo tenía mucho sueño anoche, Yo no- no lo tomes personal.—

Gin Jon le da una sonrisa tímida, —Está bien. ¿Quieres algo?— Señala a la comida que se encuentra en el stand detrás de Soo Kyung.

Soo Kyung niega con la cabeza: —Yo estaba a punto de comprar algo para mí. ¿Quieres algo?— Gin Jon lo mira y éste se sonroja, una vez más. —Ya sabes, como una disculpa por haberme olvidado de ti.—

Gin Jon sonríe, —Oh, hyung, ¿por qué eres tan lindo cuando te sonrojas?— Se mueve más cerca y los ojos de Soo Kyung se amplían. —Te voy a comprar algo, no tienes que comprar nada para mí.—

Soo Kyung niega con la cabeza de nuevo. —No, no, no, quiero disculparme-—

—Realmente está bien.— Gin Jon sonríe, —Pide lo que quieras. Yo pago, fin de la discusión.—

Soo Kyung resopla y se muerde el labio. Él escoge lo que quiere y la señora al instante las pone en unas bolsas. Gin Jon agradece a la mujer cuando recibe las bolsas. Él saca dinero y se lo da a la anciana. Ella sonríe y le da las gracias y diciéndoles que se cuiden.

Gin Jon pasa las bolsas plásticas a Soo Kyung y sonríe. —Ahí tienes.—

—Usted no tenía que comprar-—

—Está bien,— Gin Jon sonríe y luego su teléfono suena. Él lo saca y con un par de toques lo mete de nuevo en sus pantalones jean. —Tengo muchas ganas de quedarse y hablar con usted, pero me tengo que ir.—

Soo Kyung lo mira, —¿A dónde vas?— Él pregunta para luego colocar una mano en su boca y se sonroja, —Lo siento, no quería preguntar de esta manera-—

—Estoy yendo a una fiesta en casa de un amigo, puedes venir si quieres.—  Gin Jon le ofrece.

Soo Kyung niega con la cabeza: —No, yo no soy un tipo de fiesta, pero gracias.—

—Es bueno saber eso,— Gin Jon lo anota en su cabeza, porque tiene que aprender todo acerca de su próximo objetivo, ¿no? 

Soo Kyung lo mira y se encoge de hombros, —Supongo. Mis amigos siempre me invitan a salir, pero me gusta quedarme en casa y disfrutar de la calidez de mi hogar.—

Gin Jon abrió la boca para decir algo, pero el pitido en su teléfono comenzó a sonar de nuevo. Rodó los ojos y luego miró a Soo Kyung. —Lo siento, mi amigo está en un apuro. Prometo obtener  tu número la próxima vez que nos veamos, hyung.—

Él sonríe cuando Soo Kyung se fija en él y una vez más Soo Kyung no puede decir nada cuando ve a Gin Jon caminar hacia su motocicleta.

¿Por qué siempre Soo Kyung se pone así? Preguntándose quién es Gin Jon realmente.

~

Hun Se arregla su chaqueta de cuero n***o sobre su camisa de color rojo oscuro. Viste jeans azul oscuro y zapatos negros de Jordania. Su cabello rubio con un estilo moderno y para completar su atiendo luce una dura mirada en el rostro.

Han Lu llama una vez más haciendo sonar el claxon hacia la casa de Hun Se con insistencia. Una vez fuera Hun Se se encunetra con un cobre color n***o  pulido frente a su casa (mansión). Él deja salir un bufido y Han Lu le lanza una mirada.

—Acerca de una puta vez—, Han Lu gruñe y pone el coche andar.

Él está vestido con un polo con cuello v n***o, jeans blancos y tenis nike negras. Su cabello ahora cae sobre su frente. Y si Hun Se no se equivoca él trae puesto un poco de delineador.

El resto del viaje es silencioso y Hun Se mira las calles, Han Lu gira una esquina y entonces ya se encuentran frente a una casa de dos pisos. Él apenas vuelve su vista una vez, pero no hay gente alrededor, todos están dentro de la casa y hay gente bailando allí.

—¿Esta es la casa de Kim Jongmin?— Pregunta Hun Se.

Han Lu se burla: —Es Gin Jon y no, no lo es. No es un idiota, es la casa de uno de sus amigos. Gin Jon sólo trae aquí drogas y alcohol en caso de que se lo pidan. Y no se arriesgaría por los policías. Él no trata de ir a la cárcel. Vamos. —

Hun Se sigue a Han Lu a la casa, abriéndose paso entre los muchachos medio desnudos y chicas medio desnudas.

—¡Gin Jon!— Han Lu grita y pronto un chico bronceado está a la visión de Hun Se. —Gin Jon este es  Hun Se,— Él da una palmadita en el hombro de Hun Se.

—¿Un comprador?— Gin Jon pregunta y Han Lu se encoge de hombros. —Hey, soy Gin Jon—

—Oh Hun Se—

—Sí, yo sé quién eres.— Gin Jon sonríe, —Diviértete. Bebe, fuma, has lo que quieras no me importa, simplemente disfruta… Se trata de una zona libre de estrés.—

Hun Se asiente y sonríe, él no duda en coger la botella de cerveza que Gin Jon le entrega.

—Mira, me tengo que ir, pero diviértete y no llames demasiado la atención.— Han Lu grita en su oído debido a la música tan alta.

En algún lugar entre música y cerveza, Hun Se está solo. Él no puede encontrar a Gin Jon o a Han Lu y todo es tan borroso. Todo alrededor huele mucho a humo y camina tropezándose con la geste desde el patio trasero hasta la cocina.

Tan pronto como llega a la cocina se topa con alguien que tiene el cabello rubio. La persona se sostiene de su brazo y sonríe.

—Lo siento,— hay un rubor en la cara del chico y Hun Se levanta una ceja. El muchacho mira a los ojos de Hun Se y sonríe: —Soy Tao.—

Hun Se no sabe en lo que estaba pensando cuando apretó su cuerpo contra el de un Tao ruborizado. Sus manos se encuentran alrededor de la cintura de Tao y luego Tao lo está besando con fuerza y necesidad.

Hun Se y Tao tropiezan por las escaleras dando pasos desordenados y riendo. Unos besos después y Hun Se tiene a Tao atrapado contra la puerta cerrada de la habitación a la que han entrado. Tao envuelve sus largas piernas alrededor de la cintura de Hun Se cuando éste muerde el cuello de Tao con rudeza.

Está duro, Hun Se puede sentirlo en su hueso de la cadera y se la está poniendo dura sólo de pensar en la erección de Tao.

Levanta a Tao de la puerta y camina hacia la cama, donde lanza a Tao. Tao no duda en quitarse la camisa y Hun Se sigue su ejemplo. Tao besa a Hun Se en los labios una vez más y gime cuando Hun Se mete su lengua dentro de su boca lamiendo su interior.

Tao empieza a deshacer los botones en los pantalones de Hun Se y Hun Se se aleja para salir de ellos. Sus bóxer acompañan en el suelo a sus pantalones y Hun Se gime por el aire frío que lo golpea. Tao se saca sus pantalones y bóxer tirándolos al suelo.

Hun Se no vacila al sacar de su billetera el condón que sabía que necesitaría. Desgarra el estuche y ajusta el condón sobre su erección. Hun Se no pensó en que necesitaría lubricante porque él estaba seguro de no ser gay, pero a la mierda un Tao desnudo le hizo poner aún más duro como nunca en su vida.

—Ponte sobre tus manos y rodillas,— Hun Se le gruñó a Tao y el chico ligeramente bronceado lo hizo obligado.

Hun Se no dudó al entrar en Tao. Es crudo y áspero pero él al follar no toma mucho en consideración aquello. Tao se queja, pero el alcohol en su sistema disminuye el dolor. Hun Se folla duro y crudamente a Tao, hasta que éste no puede más y sus rodillas fallan cayendo sobre la cama.

Hun Se ama como Tao se queda sin aliento debajo de él. Cómo la espalda de Tao se dobla hacia atrás cuando Hun Se  lo penetra más rápido y profundo con cada chasquido de sus caderas. Cómo gime y gime como si fuera lo único que sabe hacer. La forma en como Tao lanza palabras como —j***r— y una áspero 'más duro' cuando Hun Se golpea en el ángulo correcto. Hun Se ama el grado de tensión que se siente a su alrededor.

Las mejillas de Tao se presionan sobre el colchón y gime cuando Hun Se toma mucha más velocidad. Él está arañando la cama y Hun Se lo sostiene de sus caderas con dureza mientras se empuja dentro y fuera. Hun Se se inclina hacia delante, mordiendo la piel de la espalda de Tao.

Hun Se está cerca de c******e, Tao puede sentirlo en la forma en cómo empuja dentro de él. Hun Se está cerca y toca a Tao, deja que sus dedos se deslicen sobre la polla de Tao. Uno, dos, tres tirones suaves a la polla de Tao y éste se libera en la mano de Hun Se  manchando a la vez las sábanas de la cama.

Hun Se toma velocidad y Tao aprieta deliberadamente alrededor de la polla de Hun Se, una estocada más y Hun Se se corre dentro del condón. Tao cae cansado sobre la cama y respira con pesadez.

Hun Se saca su polla cuando ha terminado. Él muerde y deja una marca roja de enojo en el cuello del Tao, y se acuesta al lado del agotado chico. Se asegura de sacarse el condón y tirarlo en la basura.

Tao le sonríe descaradamente y Hun Se ríe, él debe estar muy borracho porque deja que Tao lo abrace tapándose con las mantas de la cama.