Herederos

Capítulo 5

La primera vez que había pasado, fue un accidente. Pero debido a que su padre es un bastardo egoísta se quedó tranquilo, estaba jodido por algo que no hizo.  Estaba enfermo, pero es así cómo hicieron dinero y la sonrisa en el rostro de su padre era algo con lo que Han Lu soñaba por conseguir. Finalmente lo hizo, sólo que por razones equivocadas.

La segunda vez que sucedió, Han Lu lo originó. Su padre había contratado a un actor con el que llegó a pelear en público. Han Lu había lanzado el primer golpe en defensa propia, pero eso no importaba. No importaba que el tipo le estuviera provocando, su padre le pagaba, solo se trataba de la manera enferma en la que su padre ganaba más dinero. Nada de eso importaba porque Han Lu es un heredero y él debe saberlo. La gente creía que a él no le gustaba serlo y que simplemente hacia lo que quería. Si supieran, aunque el rumor solo caminaría una milla con sus zapatos caros (literal).

La tercera vez  que eso pasó, Han Lu estuvo preparado. No se inmutó cuando un hombre cualquiera se le acercó para una pelea. No se inmutó cuando la voz del hombre se hizo más fuerte, cuando la cabeza de la gente se flexionaba para verlos ya que estaban en público. No se inmutó cuando el hombre (actor) gritó en su cara diciendo que Han Lu había robado en su tienda. No se inmutó cuando agarró el cuello del hombre y apretó fuertemente hasta poner la cara del hombre totalmente roja. Él había removido su mano del hombre que ahora estaba sangrado de su nariz y con moretones, mientras él masajeaba su muñeca con un rostro sereno.

Recuerda gritar y no hacer nada acerca de las amenazas que la gente le tira. Él los mira con ojos sin vida  y les da una pequeña sonrisa arrogante. Han Lu se ha acostumbrado a las acusaciones cuando la prensa se entera de que ha estado metido en otra pelea. Es como una rutina enferma a la que está acostumbrado sólo porque su padre se lo pide. Es cierto, cuando dicen que el dinero hace que las personas cambien.

Han Lu puede obtener cualquier paliza (incluso si se trataba de un acto o no) su padre va a sonreírle, darle un par de sonrisas (A veces eso solo depende de la rapidez con que la noticia se propague) ya que luego puede limpiar fácilmente todo el lío. Su tío puede limpiar su nombre, si lo demandan puede ganar fácilmente el caso en la corte y puede conseguir el silencio de los que trabajan en el hospital porque bueno,  es de su familia. 

Así que él no entiende a Kim Seok Min, él no es nadie. Cómo es que Kim Seok Min no cederá a su imagen y apellido. Los rumores que rodean a  Han Lu son suficientes para sentirse amenazados.

—¿Vas a decirme algo sobre tu empresa?— Han Lu pregunta con una inclinación linda de labios, pero no sonríe, porque eso sólo enojará a Seok Min y Han Lu quiere que la conversación se prolongue un poco más.

Seok Min no le presta atención, sólo sigue caminando hacia su coche. —No. Ahora deja de venir, has estado viniendo aquí y pidiéndome información durante tres días seguidos hasta ahora y la respuesta sigue siendo no.—

Han Lu ríe y no se da cuenta que sus labios se extienden en una sonrisa hasta el momento en el que ve lo lindo que se ve Seok Min cuando  se pone todo entusiasmado y enojado al mismo tiempo. —¿Está bien, así que vuelvo mañana? A la misma hora-—

—¡No!— Ahora el enojo de Seok Min es más evidente, pero él es pequeño y Han Lu  ha derrotado a gente mucha más grande por lo que no está afectado. —No vengas mañana o el miércoles, o jueves, o cualquier otro día.—

—¿Por qué? Pensé que nos iban a dar el tiempo.— Han Lu dice en un tono inocente. —Quiero saber lo que pasa en este hospital. Mi papá lo quiere y tengo que ser un buen hijo—

Seok Min resopla, —¿Tú, un buen hijo? ¿Tu padre lee las noticias o ve la televisión?—

Los ojos de Han Lu se oscurecieron, pero Seok Min no cedió. —Mi padre lo sabe todo.— Han Lu lo miró con dureza y Seok Min se pregunta si él tocó un punto débil o algo así.

—No te creo.— Seok Min enfrentó directamente la mirada de Han Lu viendo cómo éste está enfurecido y mentiría si dijera que no encontró a Han Lu atractivo.

—No me importa si me crees o no, sólo en la mierda dime qué es lo que sucede con este hospital. Mi padre quiere arrastrar a tu padre hasta el suelo y yo lo haré, no importa lo que pase.— Han Lu  es puntual con Seok Min.

Seok Min mira a Han Lu y frunce el ceño. —Deja de actuar, eres de todo menos tenebroso en este momento.—

Han Lu resopla, —Voy a seguir viniendo hasta que me digan algo. Así que por favor haga las cosas más fáciles la próxima vez. Mi padre-—

Seok Min resopla y entonces él está invadiendo el espacio personal de Han Lu. —Quiero que dejes de fingir porque sé que esto obviamente no es de tu naturaleza.—

—¿Quién diablos eres?— Han Lu se burla de la pura ira, él sólo podría lastimar a Seok Min. —Soy Han Lu, mi padre tiene hospitales aquí y en China, mi madre es abogada y tiene su propia firma. Usted no sabe quién soy. ¡Sólo sabes lo que sale en las noticias! Usted tiene ni puta idea.—

—Usted no tiene el puto derecho de pedirme información a mí tampoco. Soy Kim Seok Min y nunca traicionaría a mi familia para darte información.— Entonces Seok Min chocó su hombro con el de Han Lu.

Han Lu observa como Seok Min llega a su coche y se sube en él. Él ríe y se riza el cabello cuando el coche de Seok Min está fuera de su vista. Él sin duda volverá mañana porque Seok Min ni siquiera se inmutó ni se inmutará al ver como Han Lu se vuelve áspero y violento. Es bueno saber que hay alguien por ahí que está dispuesto a discutir con  tanto fuego, pero es peligroso porque es Seok Min. El hijo de los enemigos.

~

—Déjame entenderlo.— Taekwoon tomó una respiración profunda y miró a Tao Zi. —Tú bebiste algo que alguien te entregó y luego despertaste solo en la cama, desnudo, y con dinero en la mesa de noche.— Dijo eso de un solo respiro.

Tao asintió, Taekwoon dio un pequeño grito y Tao de inmediato puso su mano tapándole la boca. —¿Puedes callarte? Estás hablando demasiado alto.— Tao silbó y miró a los alrededores del aula para ver que el profesor no estuviera escuchando su conversación.

Taekwoon gruñó, —¡No, además ni siquiera sabes quién era, Tao!—

—Yo no lo sé,— Tao estuvo de acuerdo. —Pero me dejó dinero,— Tao lo fulminó para luego meter su mano en su bolsillo como palmeando algo. —Y él olvidó su teléfono.— Tao sacó un iPhone.

—¿Qué vas a hacer ahora?—

Tao apretó el teléfono duramente. —¡Después de la escuela, voy a llamar al número de alguno de sus amigos y voy a ir hasta la persona,  me pondré frente a él y le echaré los ochocientos dólares a la cara!— Tao dio un puñetazo sobre la mesa.

El maestro les dio una mirada, —Tao Zi, ¿tienes algo que compartir con la clase?—

El rostro de Tao se puso pálido, se puso rígido en su asiento e hizo una reverencia antes de decir un tranquilo: —No.— El profesor asintió y volvió hacia la pizarra.

—No hagas nada estúpido.— Taekwoon advirtió ya que sabía que Tao no sería capaz de controlar su ira cuando él viera con quién se acostó.

~

Fan Yi atrajo la copa de vidrio transparente a sus labios, deja que el delicioso sabor del vino se pasee por su lengua y resbale de un trago por su garganta. Bajó la copa y la arrojó sobre una bandeja que una criada sostenía allí para él cuando lo tomó.

Fan Yi era el tipo de persona que  abusa de  su poder. Lo que él quería, él lo conseguía. Lo que necesitaba, lo tenía. Lo que buscaba, lo encontraba. Así, no es ninguna sorpresa cuando Fan Yi llama a Xing Yi a su habitación y el chico está corriendo hacia esa dirección. Xing Yi finge una sonrisa, se inclina y Fan Yi sabe que está asustado.

Fan Yi con un movimiento de manos le indica a la dama que salga de su habitación y es así como la criada lo hace. Fan Yi observa como ella envía una mirada de preocupación hacia Xing Yi, pero el muchacho sólo sonríe cuando ella camina.

Xing Yi vuelve a Fan Yi una vez que la puerta está cerrada y CARRASPEA duro antes de hablar. —¿Hay algo que usted necesite, señor?—

Fan Yi tararea y va a cerrar la puerta, Xing Yi endurece su mirada. —Yo realmente no necesito nada...— Sus palabras se arrastran al final, luego se da la vuelta para encontrarse con la cara de Xing Yi y esboza una sonrisa. —Sólo quiero hablar contigo, ¿Está bien?—

Xing Yi puede escuchar la arrogancia en su voz y está haciendo que Xing Yi, alguien tan dulce como Xing Yi, esté molesto. —Está bien, pero yo lo siento tengo que continuar con mi trabajo.—

—Yo no tenía la intención de mantenerlo tanto tiempo—, dijo Fan Yi y ahora está más cerca de él que antes. Él deja caer la mano en el antebrazo de Xing Yi y ve cómo sus dedos se deslizan hacia debajo de la suave piel. —¿Sólo quería ver cómo estabas hoy?— Él mira hacia arriba y sonríe.

Xing Yi tiembla y Fan Yi observa sus labios. Se parece más a un ceño que una sonrisa. —Estoy bien, gracias.— Xing Yi mira hacia abajo en dirección a sus pies, él no entiende nada de esto. ¿Desde cuándo a Fan Yi le importa él? La semana pasada trató de despedirlo dos veces.

—Eso es bueno—, Fan Yi respira y presiona su cuerpo contra el de Xing Yi. Xing Yi lo mira sorprendido y Fan Yi ríe, —Sabes, eres muy atractivo Zhang.—

Sí, Xing Yi se sorprendió, ahora está incluso más, al oírlo llamarlo por su apellido. —Señor Wu, ¿Qué está haciendo?— Por instinto da un paso hacia atrás, pero Fan Yi es rápido al envolver su brazo alrededor de su cintura.

—Yo te di un cumplido, Xing Yi.— Casi gruñe y Xing Yi respira profundo.

—G-Gracias— Él susurra y luego Fan Yi está mirando hacia sus labios. Fan Yi se inclina y luego Xing Yi está agradecido porque alguien está llamando a la puerta de Fan Yi.

Fan Yi hace un gruñido y luego se aleja de Xing Yi. Él sin perder su estilo camina hacia la puerta, se balancea hacia ella y lo abre para revelar a la madre de Fan Yi.

—¿Qué pasa ahora?— Fan Yi ladra hacia ella y Xing Yi nota que ella se ve muy tranquila a pesar de que su hijo acaba de utilizar un tono áspero con ella.

Ella mira a Fan Yi, no a Xing Yi, entonces señala cansadamente. —Su padre y yo sólo queríamos ver cómo estás, no te hemos visto en mucho tiempo.— Ella pone su mano en la mejilla de Fan Yi antes de que él lo agarre y lo lance fuera de su mejilla.

—Les he estado evitando, a ambos—, dice Fan Yi dureza.

Ella suspira y mira a Fan Yi con ojos cansados, —Fan Yi, por favor, deja de estar enojado con tu padre y conmigo— Ella trata de acariciarlo con su mano y él se aleja. Cuando Fan Yi se mueve, muestra como Xing Yi está de pie en silencio en medio de la habitación. Ella mira a Xing Yi y frunce el ceño. —Fan Yi sabes las reglas—

—Sé todo de este maldito imperio,— Él hierve. —¿Pero usted no siguió las reglas, así que qué le da el derecho de decirme que tengo que seguir sus reglas?— Fan Yi susurra con dureza.

Ella suspira, sin decir palabra se aleja y camina por el pasillo.

Xing Yi mira como Fan Yi cierra la puerta después de que ella se ha ido y se pasa la mano por el pelo irritado. —Señor-—

—¡Fuera ahora mismo!— Fan Yi le grita y Xing Yi asiente de forma rápida saliendo por la puerta.

Le tira a  Fan Yi un vistazo, pero Fan Yi lo mira y cierra la puerta en sus narices. Xing Yi muerde sus labios, suspira y camina por el pasillo hacia la cocina.

~

Yeol Chan tocó ansiosamente con sus dedos la mesa del almuerzo mientras sostiene el teléfono contra su oreja. Pasa los dedos por su cabello y tira el teléfono lejos al ver que la persona todavía no ha respondido. Él muerde de su labio y termina la llamada antes de irse a sus contactos y presionar para  llamar una vez más.

—¿Con quién estás tratando de conectarte?— Soo Kyung pregunta mientras come de su almuerzo.

Yeol Chan se aclaró la garganta, golpea y fija su costosa chaqueta de la escuela. —No puedo decirte,— Yeol Chan murmuró y miró hacia su propia comida.

Soo Kyung levantó algo en sus palillos y lo miró aburridamente. —¿Es Hyun Baek hyung?— Preguntó y casi se ríe cuando Yeol Chan pareció alarmado.

—¿Cómo lo sabes?— Yeol Chan preguntó en un susurro.

Soo Kyung deja caer sus palillos en el plato y se acercó más para sonreír. —No se preocupe, hyung, no voy a decirle a nadie.— Él le envió una sonrisa en forma de corazón, —Simplemente no lo hagas tan obvia la próxima vez y además, yo soy tu mejor amigo. Sé cuando estás enamorado de alguien.—

Yeol Chan le devolvió la sonrisa y él iba a hablar cuando un pequeño hola se escuchó a través de la otra línea. Yeol Chan miró a Soo Kyung y él asintió con la cabeza. Yeol Chan saltó sobre sus pies y salió corriendo de la cafetería hacia el baño.

Comprobó para ver si estaba vacío y luego suspiró en el teléfono, —Hyun Baek...— Respiró con los ojos cerrados.

—Yeol Chan...— Un suspiro se escuchó a través del otro lado del teléfono.

Yeol Chan abrió los ojos y se apoyó en el mostrador de la pileta. —Tú has estado haciendo caso omiso de mis llamadas el fin de semana.— Yeol Chan acusó en un tono suave. —Te extrañé, hyung.—

Hyun Baek suspiró una vez más en el teléfono. —Lo sé, sólo necesitaba tiempo para pensar Yeol—.

—¿Pensar en qué?— Yeol Chan no pudo evitar preguntar con un tono de preocupación.

Hyun Baek tarareó, —Pensaba en ti, en mí, nosotros, la vida. Estaba pensando en todo eso de verdad.—

Yeol Chan se mordió el labio, —¿Qué quieres decir con ‘nosotros’?— Se aflojó la corbata alrededor del cuello.

Hyun Baek se aclaró la garganta, —¿Estás en la escuela?— Yeol Chan tarareó y Hyun Baek suspiró una vez más. —No hablemos de eso ahora.—

—¿Estás rompiendo conmigo Hyun Baek?— Yeol Chan se estremeció. —No lo hagas, por favor. Te amo tanto, tienes que entender. Te prometo que voy a decirle a mi padre, pero no puedo en este momento. Sólo por favor no rompas conmigo, Baek.  Te necesito, por favor... —

Hyun Baek sonrió en el teléfono, no es como si Yeol Chan pudiera verlo. —No voy a romper contigo, tú gigante. Te amo demasiado y probablemente voy a hacerme daño pero entonces te haré daño. Te amo mucho.— Hyun Baek repite.

Yeol Chan negó con la cabeza, —No, te amo más. Me va a doler mucho si alguna vez me dejas, te juro que lo haría.—

Hyun Baek rió: —Bueno, si tú lo dices.— Se quedó en silencio por un momento antes de volver hablar. —Te eché de menos...—

Yeol Chan canturreaba: —Yo también te extrañé, pero prometo que después de la escuela pasaré por tu casa.—

—Deja de hacer promesas todo el tiempo, Yeol Chan.—

Yeol Chan dio un resoplido, —Estoy haciendo promesas que cumpliré, Hyun Baek. Yo siempre cumplo mis promesas no importa qué. Tú eres mi todo y yo sólo quiero que seas feliz.—

Hyun Baek se sonrojó y sostuvo el teléfono con más fuerza en su agarre. —¿Eres un experto al hacer que las personas se sonrojen, Park Yeol Chan.—

—Sólo si eres tú, Byun Hyun Baek, lo haré.— Yeol Chan bromeó en el teléfono.

Hyun Baek se rió entre dientes, —Deberías ir a clase, Yeol o te meterás en problemas, entonces me culparás.—

Yeol Chan hizo un ruido de molestia, —No te voy a culpar, confía en mí.— Él sonrió una vez más. —Está bien, estoy en el almuerzo, pero yo os dejaré ir ahora. Te amo Hyun Baek, por favor no lo olvides.—

—Yo también te amo Yeol Chan.— Y luego colgó, Yeol Chan sonrió porque estuvieron en un pequeña discusión entre ellos para ver quién cuelga primero.

Ellos están felices de nuevo, pero el agua puede mantenerse tranquilo por un tiempo antes que un huracán se desate.