No recuerdo otro momento en mi vida en el que estuve con alguien tanto tiempo, hablando y haciendo cosas como tomar sopa en la cama.
Jamás me di un baño con alguien con quien no estuve cojiendo como loco momentos antes.
Yo sé que Sam está convaleciente, débil y con estrés pos trauma, pero sin contar esos detalles horribles, estoy disfrutando de su compañía, de ser quien le da seguridad y de estar acá para que se apoye en mi.
Es un buen chico, simple, inteligente, libre. Los chicos lo van a adoptar ni bien lo vean. Espero que él confíe en ellos como en mí. Son un grupo especial para cuidar su espalda.
Terminamos de comer y coloco todo en la mesa que está frente a la ventana. Tengo las ventanas cerradas y solo la luz de noche encendida, estoy constantemente pendiente de sonidos o movimientos extraños. No puedo relajarme mucho tiempo porque los hombres de Marcus podrían aparecer en cualquier momento, parece exagerado, pero tengo el presentimiento de que hay algo complicado detrás de su interés por Sam.
Dejo a un lado mis pensamientos y después de pasar por el baño vuelvo a acostarme junto a un extraño Sam. Está mirando para todos lados menos a mi.
-que sucede Sam?
-nada
-Dime, por favor. ¿Tienes frío de nuevo?
-quiero darte un beso
-aaah es eso, bueno yo también quiero besarte.
Pero no sé si voy a poder parar en un beso. Quiero más y tú estás recuperándote
-¿entonces no vas a dormir conmigo? Quiero abrazarte para poder dormirme
-está bien. Nos abrazamos hasta que duermas. Tengo que hablar con los chicos y organizar algunas cosas. Si no te molesta lo puedo hacer después de que duermas
¿Podrías darme tus datos completos y dirección y algunos datos de Amelia? Le voy a pedir a Nick que investigue un poco tu situación financiera y remueva un poco todo a ver si salta algo sospechoso que tenga que ver con Marcus.
-ok, si, me parece bien. Creo que si vamos adelantando esa investigación podemos saber que clase de peligro corremos.
Me dice tranquilamente sus datos personales, bancos, direcciones, algunas cosas que recuerda de Amelia y algunos datos de la familia que lo abandonó hace 8 años. Mientras grabo todo en un clip de voz con mi teléfono para enviarle a Nick. Nuestros teléfonos están fuera de todo radar así que no corremos peligro de escuchas o hackeos.
Luego nos acomodo en la cama bajo las mantas y Sam se retuerce sobre mi hasta encontrar la posición que ya es costumbre. No sé en qué momento me enamoré de tenerlo así sobre mí, tan íntimo y cariñoso sin sexo de por medio.
Por más que los dos sabemos que nos queremos desesperadamente no es el momento para más. Me da un suave beso en el pecho sobre mi camiseta y su respiración se vuelve cada vez más tranquila, después de un rato lo acomodo en la almohada y lo dejo dormir bien tapado con las mantas. Me parte el corazón saber el frío que pasó en ese cuarto, debe haber sufrido muchísimo.
Me siento en la silla y con la mochila con mi laptop y otras cosas más sobre la mesa marco el numero de nick y atiende al primer tono
-¿Cómo están John?
-Bien bien. Sam está durmiendo ahora, está muy débil, pero recupera el color de a poco. Ya puede caminar sin ayuda.
-Me alegro. A ti te vamos a golpear el culo cuando vengas. Estupido. ¿Qué estabas pensando al meterte con Marcus?
-Sólo jugué a las cartas en un bar, estaba tomando un whisky y nunca imaginé que ese imbécil era Marcus.
-No puedes estar sin vigilancia ni un día, por dios John. Deberle a él, justo a él. Si te encuentra nos va a levantar el perfil y no queremos eso.
-no me va a encontrar. Fui a pagarle lo que supuestamente le debía y me metió a trabajar para él, no aceptó los jodidos 2 mil dólares. Los tengo en mi cartera. Me dijo que las deudas él las cobraba con soldados, y ya sabes como me veo, tengo el tridente tatuado en la frente.
-Joder! Eres un idiota
-puedes regañarme cuando llegue y decirme que encontraste sobre Sam?
-La fortuna de Amelia es legal, todo de ella, heredado de sus padres y pasado a Sam completamente en regla. El no ha usado ni un peso, ni vendido nada. Todo se conserva en aparente orden. Las cuentas de él están intactas desde la última vez que pagó un yogurt y unas tortitas en una gasolinera con su tarjeta.
Y su familia, su padre se suicidó hace 3 años y su madre está internada en un centro de rehabilitación para adultos mayores. Pero
Hace un silencio y no sé si va a seguir hablando
-pero qué? Ya dime.
-su hermano mayor. No me cierra su información. Según esto es 10 años más grande, y tengo que seguir investigando. Hablamos luego.
Me cortó sin más palabras y me dejó con una sensación extraña. No sé qué pensar. Miro hacia Sam, está hecho una bolita en el medio de la cama, tiembla, debe estar soñando. Decidiendo que me necesita más que la investigación. Coloco mi arma bajo la almohada, trabo las puertas del baño y de entrada y me acuesto con él. Automáticamente su cuerpo sube arriba del mío y de a poco deja de temblar.
Yo también me encuentro más relajado con su toque, con su calor envolviéndome. Ya lo siento familiar, una parte de mi.
No hace una semana que lo conozco y siento que no podría perderlo de vista por más de una hora.
Despierto con una sonrisa. Con besos y una lengua en mis muslos, guau me dormí profundamente, y que espectacular forma de despertar.
Unas manos calientes aprietan mis muslos mientras la cabeza de mi pene desaparece dentro de la boca caliente y húmeda de Sam.
No sé qué hacer. Si agarrarlo, tirarle el pelo, apretar los dientes. Estoy estrangulando las sábanas con un apretón que me deja los puños blancos. El placer de al fin sentir sus labios amándome es increíble, siento un alivio espectacular. Quito las mantas de nosotros porque el calor es abrasador.
Está acostado con los ojos cerrados disfrutando. Ver su rostro relajado y por dios, abre los ojos y me mira fijo con tanta hambre que no aguanto mas, me corro con un grito desesperado, los latidos de mi corazón me aturden por un momento no escucho nada más. Sam me devuelve de mi aturdimiento trepando sobre mi y dándome un beso que logra excitarme nuevamente.
Lo giro de un solo movimiento quedando sobre él y lo beso con fuerza, caliente y exigente. No aguanto más tengo que cogerlo
-John por favor
Dice lastimosamente entre gemidos mientras beso cuello
-desnudate ahora Sam.
Le ordeno tratando de mantener el control
-por favor apurate, necesito que me cojas ahora. Por favor
-te voy a hacer venir Sam, vas a rogar por más, y no te voy a dejar salir de mi cama durante días, pero hoy no. Hoy te voy a ayudar a que te corras solamente. Estás muy débil cariño. No se si podré controlarme una vez que esté dentro tuyo
-John has algo por favor
Sin mas palabras comienzo a lamerlo entero, uso mis manos para amasar y apretar cada parte de su hermoso cuerpo, con mi lengua recorro su pene largo y grueso de la base hasta la punta y luego con un grito suyo, lo meto entero en mi boca, me ahogo e intento de nuevo.
-Mmm que hermoso pene tienes cariño, me encantaría que me folles.
Le hablo mientras lo chupo y le beso las piernas, no puedo quedarme mucho tiempo en un solo lugar.
Lo masturbo con mi mano cada vez más rápido
-me vas a coger Sam? Vas a meter este grueso pene en mi? Te vas a correr dentro mío
-Ahhhh.
Se viene en mi boca e intento tragar hasta la última gota.
Le beso el interior del muslo y voy al baño a buscar una toalla mojada para limpiarlo. Luego me acuesto con él y me duermo.