Lia era una niña dulce, ella siempre esperaba a Daphne para poder dormir y este día no era la excepción, la había esperado hasta tarde y cuando estuvo a punto de quedarse dormida, escuchó unos pasos en el pasillo y supo que su hermana había regresado, desafortunadamente Daphne no había regresado sola y William se encontraba en su habitación, pero la pequeña Lia no sabía eso, ella aún estaba parada en la entrada de la recamara nombrando a su hermana. —¿Llegaste Daf?— cuestionó Lia con la voz un poco adormilada. Daphne no supo cómo lo hizo, Pero de inmediato recogió su vestido empapado y cubrió su cuerpo, William resopló y peino su cabello hacia atras con su mano, ninguno parecía saber que hacer. — Un momento Lía— pidió Daphne desde la ducha, salió con cuidado y tomó una bata, después le