A la mañana siguiente el clima se tornaba templado, desde muy temprano las calles de New York se encontraban saturadas de personas que salían muy temprano para comenzar su día, para todos el día había comenzado, menos para William y Daphne, quienes estaban agotados por las largas sesiones de sexo, que habían tenido la noche anterior.
Por otro lado en el departamento de William pasaba justo lo contrario, Susan despertó alrededor de las 7am, un tremendo dolor de cabeza no la dejó seguir durmiendo y berreaba y se quejaba de lo mal que se sentía, provocando el mismo dolor de cabeza a las empleadas de William.
Se tomó unas pastillas para aliviar un poco el dolor y tomo un baño de agua caliente.
Recordaba lo que había sucedido el día anterior, pero prefería fingir que no lo hacía, muy en sus
