Mientras tanto en el palacio de lord Hunt, el siervo beta que iba a informar todo lo que estaba sucediendo, entra a toda prisa buscando a su lord que se encontraba en su habitación privada escribiendo un documento con su pluma, se suponía que no debía interrumpirlo, pero no le quedó otra opción. —¡Milord! —exclama el siervo con un tono de voz agitado por haber venido corriendo. Lord Hunt regresa la pluma al tintero y con el ceño fruncido lleva su atención a su siervo. —Será mejor que justifiques la razón del por qué entras a mi aposento de esta forma. —¡El joven híbrido que trajo hace un mes! —¿Qué pasa con ese inútil? ¿se murió? —pregunta y asegura lord Hunt pensando que la golpiza que le dio no pudo haberle quitado la vida —Y si escapó no te preocupes, no se ira muy lejos…—agrega e