En ese momento él ardía en fiebre a causa de los golpes y heridas que tenía. Noah sabía que, para una recuperación más rápida, su gemelo tenía que caer en un sueño profundo, sin embargo, Karl ya estaba muy despierto viendo hacia todas las direcciones, juzgando por su rostro y esa mirada desorientada era claro que él no estaba despierto del todo… y cuando habló, Noah lo certificó. —¡Ya cierra la puta boca, malnacido de mierda! ¡No quiero escucharte! ¡Yo no traicioné a nadie! —exclama Karl desviando su atención a Noah y Beatriz —hermano… —Su majestad… —dice Misael acercándose a Karl, porque él también estaba ahí —¿ya se encuentra mejor? Cuando Karl miró a Misael, su mente febril se encargó de sustituir el rostro del guerrero con el de lord Hunt debido a que ambos tenían un leve parecido e