Narra Faith: La casa del señor Warren tiene un aroma delicioso a manzanas y canela, lo que genera un ambiente festivo y agradable. Siempre me ha gustado la Navidad y desde pequeña se me ha hecho mucha ilusión celebrarla junto a la gente que amo. Anteriormente sólo éramos mi padre y yo, salvo algunos años en los que Teresa se nos unía. Luego de la muerte de mi madre, nos quedamos solos él y yo por decisión propia, porque su familia, a pesar de estar bien posicionado, nunca vio bien que se casara con mi madre, lo que le obligó a vivir por su cuenta, cosa que se mantiene hasta el día de hoy. En la cocina, mi padre y mi suegro se encargan de preparar la ensalada. El pavo está ya en el horno y yo estoy terminando de decorar el árbol en lo que llegan los demás invitados. La residencia Warren