Narra Faith: La mañana siguiente me levanto más temprano que todos, para evitarme los comentarios incómodos de la noche anterior. Tras la charla en la playa con Edward, sigilosamente logré escabullirme por la puerta de atrás hasta mi habitación y muy sabiamente le he mandado un mensaje de texto a mi padre para que no se preocupara. Sé que ya se encargará de sacarme la información cuando regresemos a casa, pero mientras tanto, disfruto de la paz de estar sola. A provecho la mañana para hacer algo de yoga en la playa, por lo menos eso podré disfrutar de este viaje tan loco. Mi vida es puro estrés, así que me he visto en la necesidad de acudir a este tipo de ejercicios que me relajan la mente y el cuerpo. Tras un largo rato, cuando ya me he estirado por más de media hora sobre mi mat de yo