Pov Ana Los fuertes golpes que se escuchaban en la puerta me sobresaltaron, estaba quedándome dormida. Recordé el mensaje de Arturo, camine con cuidado hasta llegar a la sala del departamento, tocaba y tocaba el timbre, entonces recibí una llamada de él, pero no conteste. - ¡Anaaa! - gritó mi nombre, me acerqué a paso lento a la puerta, no sabía que esperar de él, su voz se escuchaba irritada. Abrí la puerta encontrándome con unos ojos oscuros y penetrantes, quise abalanzarme sobré él sintiendo el efecto de protección y seguridad que causan sus abrazos, pero me contuve. En cambio, fue él quien me tomo entre sus brazos. - No vuelvas a asustarme así - me reprendió mientras buscaba mis labios con su boca, me besó y yo me deje llevar, a la vez quería estar sola y alejarlo para poder