Capítulo 58
Se llama Samantha Gruber
Hizo un mohín con la boca, se encogió de hombros y finalmente habló
“Sinceramente hablando hermano, pensé que te quedarías más tiempo en Caracas, porque realmente te extrañe mucho y no hemos pasado ni un poco de tiempo juntos desde que llegaste… además de eso, me quería arriesgar a pedirte que entrenaras a Samantha, ella puede ser un poco tonta a veces, pero es muy capaz y aprende rápido, estoy seguro de que se llevaran bien, pero veo que tienes otros planes, pero…”
Antes de que comenzara a divagar como parte de su acto de lástima, lo detuve.
“Espera un momento Rodrigo Gruber ¿esperas que sea maestro de escuela de tu hermanita que se comporta como una adolescente?”
El frunció el ceño
“¿Qué demonios has escuchado por ahí Mariano? No hagas caso de
