En el trabajo, en la sección en la que yo estaba, todos parecían tener prisa, llevaban pilas de documentos de un lado a otro, Matías estaba en su escritorio y en cuanto entre preguntó. _ ¿Cuál sala de reuniones reservaste? _ ¿Qué? Mire confundida a todos a mi alrededor. _ ¿Qué está pasando? _ Eri. Te enviamos un mensaje pidiéndote que reservaras una sala. Frida se detuvo para explicarme. _ ¡Por favor dime que lo leíste! _ Eh… Dame un minuto, ahora lo hago. Camine hasta mi escritorio y tome el teléfono para contactarme con la persona encargada de las áreas de reuniones. _ Charly. ¿Qué tal? Me reservas la sala tres por favor. _ ¿Es para la reunión de las 8:30? Preguntó la otra persona, revisé rápidamente mi celular y leí el mensaje donde estaba todos los detalles.