**Narra Charlotte Wilkinson**
La única opción más sensata que se me ocurrió fue fingir que no recordaba nada lo en lo absoluto de lo que pasó el día anterior con Chad en el bar y luego en mi casa. Porque ni en mil sueños hubiese imaginado que el sería quien estaría al pendiente de mi, y después haberme enterado por boca del mismo Robert que el le había pedido que me diera el día libre, simplemente me dejó en blanco sin saber qué pensar.
Solo me preguntaba ¿por qué está siendo así conmigo? No me preguntó nada al respecto y tampoco mencionó siquiera el tema, pero seguía siendo amable, y eso me agradaba mucho. Ahora todo era diferente pues mi perspectiva hacia el había cambiado, el pesado e hipócrita que parecía ser de pronto se volvió amable y gentil.
Estaba haciendo el mayor esfuerzo d
