Alma.
— Ginecología.
Dice y al segundo comienzo a toser porque mi jugo de frutas se desvió del camino normal que lo lleva a mi estómago, intento parar, pero, como que mi cuerpo no me quiere ayudar.
¡Ja! ¿No te habrá caído mal, la noticia de que el vampirito sexy vaya a trabajar de doctor?
No, para nada.
Entonces, debo suponer que tampoco importa que vaya a ser un ginecólogo, ¿cierto?
Él puede hacer lo que quiera.
Siento la mano de mi hermano dando palmaditas en mi espalda para que deje de toser; afortunadamente, eso me ayuda porque para de a poco y agarro la servilleta pasándolo por mis labios, doblo un poco para pasarlo también debajo de mis ojos que se me irritaron un poco.
— Vaya, al parecer te sorprendió el nuevo trabajo de Alex, hermanita.
— No… no es eso, solo… bebí demas
