-Alex- Me aparté de Nicolás porque era lo más conveniente, aún así mi atención estaba sobre él. Y la docena de perras en celo a su alrededor. -¿Quieres dejar de mirar con odio? Das miedo- le di un vistazo a Soph quien vestía una braga de jean con una camiseta morada ajustada y de manga larga debajo. Ella me veía raro y puse los ojos en blanco acabandome mi trago. -¿Es que no ves cómo se le ofrecen?- me quejé- Malditas putas baratas- murmuré con odio. Michael cubrió mis hombros usando su brazo con brusquedad. -¡Ay ya!- dijo harto y me arrastró a otro punto del patio- Deja de pensar en ese hombre por cinco minutos, ¿Bien?- pidió y negué con la cabeza-¡Alex! Quiero pasar una buena noche con mis amigas. ¿De verdad vas a arruinar esto?- y sin poder refutar, o más bien sin querer hacerlo pu