-Alex- -¿Qué?- un sudor frío se instaló en mi cuerpo, la sola idea de que mi pequeño hermano haya atentado contra su vida me parecía tan quimérico. Esto no podía estar pasando-¿Dónde está?¿Qué pasó?- pregunté mientras mis ojos se llenaban de lágrimas. Adrián se veía calmado y señaló hacia la silla frente al escritorio que estaba usurpando. -¿Por qué mejor no te sientas y te calmas?- lo miré de soslayo mientras obedientemente me sentaba, no porque él lo dijera, sino porque mis piernas amenazaban con abandonar mi peso en cualquier instante- Al parecer tu hermano esta pasando por una…Crisis de personalidad, frecuente en niños de su edad. -Niños que han perdido a su madre y que han sido separados de su familia- completé de forma venenosa mirando a mi padre con el odio de siempre cayendo en