Durante el resto de la noche todo estuvo relativamente calmado, Kane y yo hicimos nuestro esfuerzo y no intentamos sacarnos los ojos luego de ese extraño momento que surgió en la terraza. Conversamos con varios grupos, conocí a Herman Ford uno de mis actores favoritos que resultó ser un misógino de primera... vaya decepción, incluso llegamos a bailar un poco, pero eso había sido demasiado incluso para él... lo dejamos pronto.
Pero Stefani seguía merodeando a nuestro alrededor, no supe si Kane lo ignoraba a propósito o si de verdad el asunto le estaba pasando por encima, pero a mí me tenía al borde. Varias veces pasó a mi lado, mirándome otra vez de pies a cabeza con burla, en ocasiones incluso llegó a señalarme sin disimulo mientras reía con su grupo, parecía la típica capitana de porrist
