Kenner. — Vine por ti. Me atreví a mentir descaradamente, ¿cómo que vine por ella? claro que no, pero, ella se queda totalmente sorprendida por lo que, debo continuar con esto. — Estás mintiendo. Dice con seriedad, jala su brazo, soltándose de mi agarre. No puedes engañarla. Claro que puedo. La historia de cómo terminé aquí es la siguiente; estaba cargando unas bolsas de compras cuando… Debes narrar desde más atrás. Mi madre me pidió traerla al centro comercial porque quería comprar unas cremas, no le hacen falta, pero, ella las quiere de todos modos, con todo eso, estábamos saliendo cuando la irritante de Carla, nos descubre y se une al viaje, entonces, ambas mujeres, casi me obligan a seguirlas en cada tienda. Oh, y eso que nos dijeron que solo viniéramos a dejar las bolsas y