Adoraba que el agua caliente la cubriera por completo, mientras caía desde arriba, la sensación de sentir la caída del agua como cientos de caricias en la cabeza, hacía que sus músculos allí la relajaran por completo, lo mismo ocurría cuando esas caricias caían en su espalda. Miró sus piernas, al parecer, pronto iba a necesitar otra depilación porque el efecto de la depilación láser pasaría pronto. Le gustaba pensar en cosas cotidianas, puesto que ampliaba su mente y la sacaba de ese mundillo lleno de cosas malas que la rodeaba. También sería bueno leer un libro, quería mantener su cabeza activa para no tener que sucumbir al estrés de estar bajo el brazo de Franco todo el tiempo. Temprano en la tarde de ese día, cuando despertó, estaba sola en su cama con otra ropa: era un pijama. Ape