Se aproximan los cumpleaños de Marian y Emiliano le prepara una sorpresa, el día transcurre con total normalidad, él le lleva el desayuno a la cama y se bañan juntos luego de hacer el amor como tantas veces, han desarrollado tal complicidad que con una mirada ya saben que quiere cada uno, Emiliano lleva a su mujer a pasar lo que resta del día con Dante a la playa, son dulces 20 años. Pasan meses y Dante es un niño amado, vivaz despierto y está por cumplir su primer año, Marian insiste en hacer algo sencillo pero Adela quiere algo en grande pues también cumpleaños Emiliano. Marian accede y lo celebran por todo lo alto, hay mucho amor. Emiliano es feliz con su familia, lleva unas semanas insistiéndole a su mujer para tener otro bebé. Ella solo dice que se dará en el momento menos pensado