CONFUSIÓN
VALERIA
Estoy embarazada, la idea me aterra, pero ya está confirmado, la doctora me dió unas vitaminas y si todo sale bien en, aproximadamente, siete meses nacerá mi bebé, ahora me angustia saber si mi hijo es de Alan o si mis conductas promiscuas durante las lagunas mentales son las que me tienen en esta situación, trato de recordar, pero no hay nada en mi memoria, ni siquiera sobre la noche con Alan, pero coincide con el tiempo de embarazo, así que lo atribuiré a ello.
Al salir del consultorio, Fabi me espera ansiosa, pero yo me niego a decirle el diagnóstico.
— ¿Entonces, no me vas a decir qué es lo que tienes?
— Sólo necesito vitaminas y ya las traigo en mi bolso
— ¿Sólo eso? No te lo creo
— Ya vámonos que quiero ver a Alan
— Pero…
— ¿O tú no quieres ver a Manuel? — la persuado
— Sí, ya vámonos, pues.
ALAN
Sandy y Renata han estado muy bien, tranquilas y felices, se quedarán aquí y mi hermana continuará sus estudios, eran muy joven cuando se casó a causa de su embarazo, ya sabes, para evitar habladurías, ahora mismo la llevaré a la universidad para pedir información, está muy emocionada y yo me encargaré de mi sobrina mientras ella se estudia, así que tendré que reducir las desveladas lo más que se pueda, también buscaremos escuela para mí pequeña, es una buena temporada para ésto, ella está muy emocionada por ir a la primaria.
Mi hermana dijo que Renata no sabía que Esteban la había golpeado, pero algo me dice que la niña es más inteligente de lo que pensamos.
— Renata, ¿Tú crees que tú mamá hizo lo correcto al dejar a tu papá?
— Sí — responde ella
— ¿No lo extrañas?
— No, tío, tú y yo sabemos que mi papá es una mala persona
— ¿Tú lo sabes?
— Sí, yo estaba allí cuando le pegó a mi mamá y tuve mucho miedo
— ¿Y ahora ya no lo tienes?
— No, porque aquí estamos bien, mi mamá sonríe
— Lamento mucho que hayas visto eso, y sí, aquí estarán muy bien, lo prometo
— Sólo hay una cosa que me molesta
— ¿Qué es?
— Que ahora seré la única niña que no tendrá un papá
— Bueno, me tienes a mí
— Pero tú eres mi tío
— Pero no cualquier tío, soy el favorito, ¿O no?
— Sí, claro que sí, entonces eso tendrá privilegios especiales
— ¿Ah, sí? ¿Cómo cuáles?
— Cómo que te puedo llamar papá de vez en cuando
— Eso es fascinante, soy muy afortunado de ser tu favorito
— Entonces ya está, ahora tú eres mi papá Alan
— Suena perfecto, pero vamos al auto antes que se haga más tarde.
— Sí, papá — en eso Sandy se aproxima al auto también
— Mamá, ¿Verdad que mi papá es el mejor?
— Mi princesa, claro que sí, Alan es el mejor.
Las abrazo y cuando estamos por subir al auto, Fabi y Valeria llegan de repente.
VALERIA
¿Qué es ésto que estoy viendo? ¿La niña le dijo papá? ¡No puede ser! Alan sí tiene una esposa y una hija y yo tan emocionada que venía a darle la noticia.
— ¡Valeria! — él alcanza a verme y me habla, pero yo me niego a escucharlo, está vez no, sí es un mentiroso, me retiro de inmediato, corriendo hasta la casa y Fabi tras de mí.
— Yo tampoco entiendo lo que está pasando, Vale
— Era verdad, ¡Todo lo que dijo su ex, era verdad! Sólo que con otra mujer, ¡No quiero volver a verlo!
— Ahora sí te doy la razón
El timbre suena y sé que es Alan.
— No quiero verlo, Fabi, por favor, no dejes que entre.
— Lo que tú digas, Vale
FABI
Yo también estoy muy enmuinada por culpa de Alan, mira que ocultar que en verdad tiene una familia y todavía atreverse a negarla, ¡Pero qué patán!
— Fabi, por favor, déjame ver Valeria
— No, Alan, ya vimos y escuchamos suficiente y ahora sí le doy la razón
— Es que…
Le cierro la puerta en la naríz sin darle oportunidad de hablar, no voy a permitir que nos siga llenando de mentiras la cabeza y Manuel me va a oír por andar encubriendo a su amiguito.
ALAN
¡No puede ser! Otra vez con éstos problemas, ¡qué mal!
— Siento mucho haberte metido en este problema — se disculpa Sandy
— No es culpa de nadie, no te preocupes, vamos
— No creo que sea lo más prudente, deberías hablar con ella
— Es mejor esperar a que se calmen, anda, vamos a buscar escuelas
— Gracias Alan y si quieres cuando regresemos, yo puedo hablar con ella
— Ya veremos, no te preocupes por eso…
Luego de visitar algunas escuelas, encontramos la adecuada para Renata, Sandy sólo consiguió algunos folletos para ver las carreras que tiene cada universidad, aún no se decide, pero sé que lo hará pronto.
Nos disponemos a comer, ya es tarde y hace hambre, mucha hambre, aunque yo sólo puedo picar la comida y tragar apenas, pues pienso en Valeria.
— Bro, ya Fabi me reclamó, pero no entendí el porqué, sólo sé que tú tienes la culpa — dice Manuel
— Ya ni me digas, Valeria cree que Renata y Sandy son mi hija y esposa, no dijo nada, pero por la forma en que reaccionó me lo dio a entender.
— Tu novia es muy insegura
— Lo sé, aunque debería confiar en mí por el simple hecho de que nos amamos
— Bueno, quizá, yo en su lugar hubiera pensado lo mismo y luego de todas las cosas que le dijo Brianda
— ¡La loca de Brianda! — exclama Sandy, nunca le agradó — con razón Valeria se puso así
— Pues sí, pero también quisiera su voto de confianza, así como yo confío en ella plenamente
— Entonces, ¿eso significa que te rendirás? — cuestiona Manuel...