Antes muerta que rendida

Oriana se entera que Leonardo está comprometido y dentro de poco tendrá un bebe.

Ella baja automáticamente la actitud, y le dice: —Tranquilo, comprendo la situación, imagino que usted es el Ingeniero Villareal—. Responde sorprendida mente: —Mi apellido es Villarroel—. Contesta Oriana: —Disculpa cariño entendí mal—. A Lucia le parece bastante extraña el cambio de actitud de la señora esa, pera sabe muy bien que son las cosas que le suceden a su jefe por ser un hombre tan apuesto, y cosas de las que aún no es consciente Adriana.

Leonardo no toma a mal la actitud de ella, para ella es simplemente una cliente más, y de verdad desea cerrar el contrato, pues, le traería gran beneficio para toda la constructora. Lucia pide permiso para terminar de ajustar la presentación, mientras ellos siguen hablando ahí, Oriana indaga sobre la vida de él, justo en ese momento comenta Lucia.

— ¡Qué pena interrumpirlos! Pero me está llamando Adriana jefe, su prometida, quizás sea importante, ¿Qué le digo? —.  Leonardo responde: —Sí, respóndele a Adri, dile que estoy entrando a una junta, y a penas salga de aquí voy para la casa de su mamá, dile que la amo—.