Esa noche, Jules estaba leyendo Los Tres Mosqueteros de Alexandre Dumas y Dorian leía un grueso ejemplar de Biología Celular y Molecular.
- ¿Sabías que la estructura de una macromolécula orgánica en su cadena cuenta y representa un monómero de aminoácido o nucleótido que se une a otro mediante un enlace químico covalente?
Además, las macromoléculas naturales tienen funciones vitales, como ser insumo metabólico o moléculas estructurales.
También participan en procesos complejos como la replicación celular...
Le dijo Dorian asombrado.
Jules sonrió y observó la ilustración que Dorian le señalaba en el libro.
- Me interesa saber más sobre el metabolismo molecular...
Añadió el muchacho.
- ¿Tu que estás leyendo?.
Preguntó Dorian alzando la vista y luego sonrió al ver el libro.
- Prefiero más, El Conde de Montecristo, aunque los mosqueteros también son muy buenos.
Alexandre Dumas es uno de mis escritores favoritos. ¿Has leído La Catedral del Mar de Idelfonso Falcones?.
Preguntó.
Jules asintió.
- Siempre tuve pena por la manera en que murió Bernat... ¿Has leído el segundo?.
Jules entonces le respondió en señas.
"Sentí rabia por Arnau, de hecho ambas novelas me hacen enojar bastante".
Dorian sonrió.
- Si... Ese Idelfonso es especialista en hacer sentir impotencia a las personas. Arrojé los libros contra el muro al menos tres o cuatro veces. Dios... Jamás me había sentido tan furioso.
Reconoció este.
"Yo estuve tentado a prenderle fuego en una ocasión, pero al final creo yo que son mis novelas favoritas".
Le dijo Jules.
- Si... También las mías, oye... ¿Que te parece si vamos al pueblo y vamos a beber cervezas a un bar?.
Le preguntó Dorian.
Jules asintió.
Así pues, los dos optaron por vestirse con unos sencillos pantalones de mezclilla, playeras negras lisas y cada uno con chamarras de piel en color camello.
- Ja... Nos hemos vestido igual.
Le dijo Dorian riendo.
Jules se miró a si mismo y vio que era verdad, incluso los dos habían decidió ponerse botas de trabajo Timberland.
Se subieron a la camioneta y Dorian condujo hasta el pueblo, se metieron a un bar y pidieron unas cervezas.
- ¿Sabes jugar billar?.
Le preguntó Dorian al otro.
Jules miró la mesa y luego los tacos de billar acomodados en uno de los muros, luego se puso de pie y sacó un billete de $50 dólares a modo de apuesta
Dorian sonrió y le imitó.
Varias personas se giraron para verles, en verdad los dos eran estúpidamente guapos.
Así pues los dos se pusieron a jugar y para sorpresa de Dorian, Jules era increíblemente bueno jugando.
- ¿Ya habías jugado antes? ¿Cómo es que eres tan bueno y preciso? Pareces profesional.
Expresó Dorian anonadado.
Jules entonces le miró divertido y le respondió con señas.
"Matemáticas mi amigo, ángulos y trayectorias... Los números nunca fallan".
Le dijo el joven riendo en silencio.
- Que tramposo eres... Usando tu brillante cerebro matemático para ganar una apuesta.
Ni yo pude haber caído tan bajo como tú, vulgar físico cuántico matemático espacial, galáctico, paralelogramo...
Jules empezó a desternillarse de risa al escuchar la sarta de estupideces sin sentido que le decía el otro.
Ya muy entrada la noche, los dos salieron del bar muy animados, mientras se dirigían a la camioneta, Brad apareció junto con sus amigos y al ver a los dos jóvenes se detuvieron.
Jules y Dorian inmediatamente supieron que aquel grupo de abusivos querían bronca, pero ellos eran seis, y ellos solo dos.
Ambos jóvenes se miraron mutuamente y luego a los abusivos, de nuevo se miraron y echaron a correr a toda prisa mientras los demás les seguían.
Llegaron hasta un estacionamiento bastante solitario y oscuro.
- Ni modo... Nos va a tocar pelear Jules.
Le dijo Dorian quitándose la chaqueta y arrojandola al piso.
Jules inmediatamente le imitó y vio cómo el gordo junto con sus amigos se les acercaban.
- ¿Ya se hartaron de huir?.
Le preguntó Brad a Dorian.
- De hecho, hemos venido acá para poder pelear más cómodos. Anda ven, gordo de mierda.
Le instó Dorian.
Jules jamás se había peleado, siempre le habían hecho bullying, pero, en ese momento Dorian dependía de él y no iba a dejar que Dorian. sufriese daños solamente por su cobardía.
Ese fue su detonante, Jules sabía defensa personal en teoría, entonces recordó que en realidad para poder pelear se debía pensar antes de solamente tirar puños a diestra y siniestra.
Brad y otro tipo se le dejaron ir a Dorian a los golpes, y otros dos contra Jules, mientras los últimos dos se quedaron observando para vigilar si pasaba la policía o alguien más.
Dorian esperó a que se le acercarsen los muchachos y fuesen ellos quienes se animarán a golpear primero, Brad estiró el brazo en dirección al rostro del joven, pero este fue más rápido y logro esquivar el golpe, le puso el pie y el gordo muchacho se fue de bruces contra el suelo.
El otro, al ver que su amigo estaba tirado aprovechó que Dorian apenas se estaba dando la vuelta y le propinó un golpe en el abdomen, pero Dorian se giró y le regresó el golpe en el mentón.
Mientras tanto Jules, estuvo a punto de ser golpeado en la nariz por uno de los dos que se le habían dejado ir, pero de puro milagro logró hacerse para atrás y calculó la distancia entre el rostro del muchacho y su puño, instintivamente estiró el brazo con todas sus fuerzas y le dió en el ojo, el joven se hizo hacia adelante y se cubrió el rostro, Jules aprovechó la oportunidad y le propinó un fortísimo golpe con el codo en la nuca, haciendo que el otro cayera desmayado.
- Mierda... El mudo si sabe pelear.
Dijo en voz alta uno de los muchachos que se habían quedado vigilando.
Dorian quien había logrado ver la acción sonrió de satisfacción y con bastante orgullo.
Jules no era cobarde.
Entonces aprovechó que Brad estaba el piso y le pateo el rostro, haciendo que el otro también se desmayara, luego se giró para con el otro que todavía yacia en el suelo inconsciente y también le pateó la cara.
En lo que eso sucedía, el único que quedaba todavía sano, se fue hacia Jules y le golpeó con el puño cerrado en la boca, el joven retrocedió unos pasos atrás algo atontado y se llevó la mano derecha a los labios, vio sangre y se enfureció al sentir el ardor.
Apenas iba a regresarle el golpe cuando de repente Dorian apareció corriendo en su campo de visión y tlaqueó al joven con violencia tirándole al suelo sofocado.
- ¡A mi novio no maldito pendejo!.
Bramó el joven totalmente fuera de si y empezó a golpearlo salvajemente, luego le sujetó del cabello y empezó a azotarle la cabeza violentamente contra el asfalto.
Todos miraron horrizados la acción, incluso Jules, quien luego de unos segundos logró reaccionar y fue a quitarle a Dorian al muchacho que ya estaba desmayado.
Dorian al sentir que alguien le sujetaba con fuerza por los brazos instintivamente estiró el brazo con intención de golpearle, pero al ver que era Jules quien intentaba detenerlo se quedó con el puño al aire.
Al ver los ojos del otro pareció volver en si, así que se detuvo y se puso de pie con la ayuda del otro.
Inmediatamente Dorian se dejó ir contra los otros dos quienes miraban aterrados como el muchacho se acercaba rápidamente para golpearles también a ellos.
Entonces Jules vió que Brad ya se había puesto de pie y este, apuntaba a Dorian con una pistola 9 mm, su cerebro hizo clic sacándolo del shock que lo tenía traumatizado hacia tanto tiempo.
Horrorizado hizo algo que jamás pensó llegar a hacer...
- ¡DORIAN CUIDADO!...
Gritó con voz potente y clara.