[Andrés] - Andrea, por favor contéstame. Necesito hablar contigo – dejo por milésima vez un mensaje en su correo de voz. - ¿Cómo es posible que todo se haya ido al diablo en dos días? ¡Maldición! – grito con fuerza y le doy un sorbo a mi vaso de whisky - ¿será posible que esté así por Leila? -. Me siento desesperado y necesito verla, pero se está escondiendo de mí. [Andrea] Estoy exhausta, estos últimos dos días han sido demasiado fuertes… ahora estoy mirando a donde irme a vivir, no quiero pensar en que estoy huyendo, pero realmente eso es lo que voy a hacer… lo hago por el bien de mi hijo, porque no pienso permitir que viva rodeado de gente que lo maltrate emocionalmente y mucho menos de un papá que lo quiere como moneda de cambio para saciar su ambición.