-No sé qué ha sido todo esto, pero me ha encantado. Me dice mientras se va quedando dormido.
Debería echarlo de esta habitación y decirle que no puede pasar la noche aquí, pero no tengo fuerzas para hacerlo. También estoy agotada; los tragos y la intensidad de él hacen que mis ojos se vayan cerrando.
[...]
Escucho el ruido de la puerta de entrada y abro mis ojos completamente asustada. Veo a mi lado y el sigue dormido y completamente desnudo. ¡Mierda! Debe de ser Tania. Miro el reloj y ya son las once de la mañana. Me pongo de pie rápidamente y me coloco mi albornoz. Salgo de la habitación y me la encuentro a ella sonriente.
-¡Lo has conseguido! Me grita. -¡Te has tirado al mismísimo Pablo Alborán! Dice entre risas.
-Shhhh... que está ahí. Le digo abriendo mis ojos como dos platos.
-¡No lo puedo creer! ¡Pablo Alborán desnudo en nuestra casa! ¡Eres una puta genio! ¡Y nosotras unas excelentes amigas por retarte a que te lo tiraras! Dice ignorando mi previa petición. -¡Cuéntame ya como es en la cama ya!
Estoy a punto de responderle cuando la puerta de la habitación se abre. No lo puedo creer, es el... -¿Así que lo de anoche ha sido un juego entre tú y tus amigas? Pregunta totalmente indignado.
Perfecto... Pienso sarcásticamente.
-Pablo, yo te puedo explicar. Intento decir, pero claramente no hay nada que explicar.
-No te preocupes Alexia... Solo espero que tú y tus amigas se diviertan mucho cuando le cuentes como follamos anoche; seguramente yo lo hare con mis amigos también. Tú no eres la única a la que sus amigas la han retado a tirarse a alguien del bar. Me dice de manera borde y camina hacia la puerta de entrada.
-¡Imbécil! Le grito mientras un portazo sentencia su salida.
-¿Tú le crees? Me pregunta Tania. -Creo que lo dijo solo para que te sintieras mal. Me comenta.
-No lo sé, pero tu deberías dejar de ser tan imprudente. Le digo enfadada y me voy hacia el baño para ducharme.
[...]
El día de ayer fue un completo desastre. Tania, Vicky, y Cintia decidieron invadirme a preguntas acerca de cómo es Pablo en la cama. Me han pedido lujo de detalles, pero solo les conté lo bueno que es en la cama y también lo imbécil que es por creer que todas estamos enamoradas de él. Pensó que nadie podía un día querer solo llevárselo a la cama y ya, pero bueno creo que le he enseñado una lección.
-¿¡No pensaras llegar tarde a tu primer día de trabajo!? Me grita Tania desde la cocina.
Ignoro su grito y me miro una última vez al espejo. Falda hasta la rodilla color blanca, camisa negra con los primeros botones abiertos, zapatos de tacón del mismo color y maquillaje sutil. Salgo de la habitación y me despido de mi compañera de piso.
Llego a la oficina de Warner y realmente me sorprendo, me habían dicho que esta oficina era pequeña, pero nunca imagine que tanto. Por lo que me han contado solo cumple un propósito, ya que todo se maneja desde las oficinas de Madrid donde tuve mi entrevista de trabajo. Al entrar me anuncio con la secretaria y le explico que estoy aquí para mi primer día de trabajo y ella solo me pide que aguarde, que Ainara estará conmigo en un momento. Tomo asiento y a los pocos minutos una mujer de unos treinta y pico de años, de cabello corto y color rojizo se presenta conmigo bajo ese nombre y me pide que la siga a la sala de juntas para presentarme a alguien.
Al entrar a la sala de juntas no puedo creer quien está allí sentando.
-¡¿Tu?! Me grita él.
-¿Pablo Alborán? Le pregunto a Ainara, totalmente confundida.
-¿Se conocen? Nos pregunta ella.
-Algo así. Digo y ella nos queda mirando.
-Bueno, eso es mejor porque les ayudara a trabajar mucho mejor. Nos dice y yo estoy totalmente confundida.
-Perdon, pero no entiendo. Digo finalmente.
-¿Diego no te ha explicado cuál es tu rol? Me pregunta preocupada.
-No quiso. Dijo que era mejor que me enterara hoy. Le explico bajo la atenta mirada de ambos.
-Siéntate y te explico. Me pide y hago lo que ella me dice. -Bueno, Pablo está por lanzar su nuevos singles en un par de semanas y su nuevo disco en un par de meses. La carrera de el está ascendiendo rápidamente y Warner decidió que él tuviera una persona tiempo completo haciéndose cargo de todas sus relaciones públicas. Serás el nexo entre Warner España y Warner en todo Latinoamérica y Estados Unidos. En pocas palabras, te convertirás en su mano derecha, viajaras con el y te encargaras de toda su carrera junto a Esperanza.
Esto es una completa locura...
-¿Tiene que ser ella? Pregunta Pablo.
Ainara lo mira confundida. -¿Qué hay de malo con ella? Te aseguro que hará cosas increíbles. Ha estudiado en las mejores universidades e hizo una pasantía de dos años en Estados Unidos, conoce el mercado a la perfección. Le explica.
-Es que no sé qué decir... Comento sin palabras.
-Los dejare que hablen un momento para que se conozcan. Dice ella y se retira.
Cuando Ainara cierra la puerta el se pone de pie. -Renuncia ya. Me pide.
-¡¿Qué?! ¡No! ¡Yo no voy a renunciar, es una oportunidad única para mí! Digo poniéndome de pie también.
-¿Esto es lo que celebrabas la otra noche? ¿Por eso tus amiguitas te retaron a que follaras conmigo? Me pregunta dando dos pasos hacia mí.
-Era el trabajo y mi graduación, no que eras tu con quien trabajaría... Yo no lo sabía, no lo hubiese hecho de ser así. Le explico.
-Que sepas que está bien, que puedes seguir con tu trabajo; no voy a mezclar las cosas, pero que te quede muy claro que lo que paso la otra noche jamás se repetirá. No me gustan las tías como tú que van tirándose a tíos desconocidos solo porque sus amigas se lo piden. Me dice haciendo que realmente lo comience a odiar.
-No te preocupes que yo tampoco pienso hacerlo. No me gustan los tíos que se creen que son lo mejor de este mundo.
-¿No iras a arruinar mi carrera verdad? Me pregunta de manera muy seria.
-No te preocupes, no soy imbécil... Si arruino tu carrera, arruino mi reputación. Esto es solo negocios. Le digo de manera borde.
-Solo negocios. Repite.
-Ahora ve y dile a Ainara que está todo bien. Le exijo cruzándome de brazos.
-Te lo advierto Alexia, si jodes mi carrera, me encargare que no vuelvas a trabajar en ninguna otra disquera me advierte.
-Ya te lo dije, ahora deja de amenazarme y ve a hablar con ella. Sentencio y tomo asiento nuevamente.
No lo puedo creer, mi primer trabajo serio y tiene que ser con un tío que prácticamente me odia.