PENÉLOPE — Bruja —murmuró Ulises en medio de un beso.— Eres una bruja, y quiero que me hagas arder en tu maldita hoguera... —bajó a mi cuello depositando besos hasta llegar a un tirante de mi vestido para bajarlo con sus dientes. Oh dios, si era esa maldita bruja que él decía, entonces nos había hechizado. Era una bruja mala, porque el hechizo que le había puesto a él, estaba funcionando también conmigo, y no tenía una manera de controlarlo. Me llevo a pasos torpes hacia la mesa de noche donde me sentó cargándome por mis caderas, mientras sumergía su rostro en mis pechos. — Oh, por el diablo que me está llevando —murmuró Ulises sobre mis pechos.— Eres heroína pura, mientras más te pruebo, más quiero de ti. Subió hacia mi rostro para volverme comer la boca, antes de dedicarme una sonr