POV DARKO ROMANOV —¿Ha tenido ganas de torturar a alguien en esta semana? —Asentí—. ¿A quiénes y por qué? Odiaba tener que hablar más de la cuenta, pero debía hacerlo. Se supone que tenía que contar toda mi mierda en estas sesiones. —A Vova. —¿Por qué querría torturar a uno de sus mejores hombres? Por lo que me ha comentado, Vladimir es muy bueno en la administración de los negocios. —Lo es. No tengo ninguna queja, pero está en las malditas nubes. —Gruñí, empezando a disgustarme—. Ha descuidado el trabajo por una mujer. Al parecer se enamoró. —¿Y usted cree que es malo el que se enamore? —Negué—. ¿Qué opina al respecto? —Es su vida, puede hacerlo, pero lo que no puede hacer es descuidar su trabajo. —Entiendo. ¿Quiénes son los otros? —Vladislav, pregunta mucho por la insolen