Amor y Mafia

Buena Impresión

~ Los planes de Salomón en causar problemas y daño al CEO amante de Rubí, no dejaban de quedar muy claro, sin embargo, aún se limitaba por las ordenes de David Selvanegra, por lo que reaccionó y respondió a la pregunta de su trabajador. ~

—No realicen un solo movimiento, son ordenes de David y de momento hay que obedecer, solo vigilen que no existan movimientos innecesarios y sospechosos.

—Como usted lo ordene señor. —Aseveró el trabajador.

~ Rubí Echeverri ~

El rostro de Ariel al momento de realizar la pregunta por lo que se encontraba realizando, me causó una enorme sonrisa, lo que me delató de inmediato en cuanto a hacerle saber que solo me encontraba jugando en cuanto a preguntar al respecto, pero como siempre su profesionalidad no lo abandonó y de inmediato me dio la respuesta al asunto.

—¡Lo qué sucede Rubí! principalmente es que, si se va a hacer un trabajo de modificación no importando el final del mismo o para que sea utilizado este tipo de situaciones, escucha bien ¡No hay que dejar huella alguna que en algún momento esta belleza de automóvil fue modificada después de haber salido de la fábrica!

¡Definitivamente esa era la respuesta que estaba esperando escuchar de parte del CEO Ariel Montes! Su conocimiento era basto y hasta sobrenatural, me apasionaba lo que hacía y en la manera que lo realizaba, ¡Solo porque necesitaba entregar los autos en pocos días, de lo contrario en ese momento una pausa no haría estorbo en lo absoluto!

Aunque estaba prestando atención y realmente no era necesaria la explicación, Ariel continúo explicándome el motivo.

—Por lo que es coherente y necesario en este punto preciso, aplicar esta técnica para que se vea perfecta y lo más natural y cercano a la perfección posible, ¡Incluso si en este caso no lo has notado por no tener el privilegio de observar mis trabajos anteriores! —Exclamó con orgullo al respecto.

—Déjame contarte que de no ser porque mis clientes saben que aquí se les realizan modificaciones a los autos antes de salir, de lo contrario ellos ni se enterarían que han sido tocados por mis manos esas bellezas de cuatro ruedas, de igual manera por ese tipo de situaciones es que he alcanzado el éxito en este negocio, porque siempre he considerado la idea qué debería de estar siempre cerca al buen trabajo y desempeño del mismo, ¿Tienes otra pregunta al respecto?

—¡No mi amor, todo está muy bien y me impresiona qué sin que te lo haya mencionado anteriormente, trabajaras de esa manera en concreto! —Le aseguré en ese preciso instante.

—Con toda certeza y seguridad, David no volverá a tener entre sus manos este tipo de trabajo tan perfecto que estas realizando, así como también puedo decirte que al momento que compruebe la calidad de tu trabajo es muy probable que no solamente debas realizar este tipo de trabajos a los autos, sino también a otro tipo de vehículos que existen en la finca y en otros lugares de su propiedad.

Entonces su expresión cambio en cuanto me escucho mencionar lo anterior y me recalco lo que sabía con anterioridad y estaba completamente de acuerdo que era de esa manera su postura.

—¡Perdóname mi amor! Pero sabes mi posición y considero que también deberías de comenzar a saber que después de entregar estos trabajos y posiblemente unos cuantos más, nuestro objetivo debería ser buscar la manera de escaparnos juntos a cualquier parte del mundo, conmigo eso será más que posible ¡Te lo puedo jurar Rubí!

—Entiendo tu posición, pero lo más importante en este momento es terminar con estos autos para entregarlos de ser posible antes de los veintiún días establecidos, así quedaremos más que bien con la entrega de los autos y a su vez podría llegar a tener más tiempo a tu lado.

Definitivamente Ariel era todo lo que soñaba en mi vida y aún más que eso, era un hombre muy inteligente y entregado al trabajo, amoroso y muy atento, porque siempre andaba al pendiente de mi vida y de mis caminos, tratando la manera que no me pegara el sol para que no me quemara la piel, porque en definitiva el único sol que deseaba que me quemara era su deseo y su amor, ¡Esos sí eran dos soles completamente intensos que irradiaban la totalidad y plenitud cada uno en su sentido común!

Partiendo desde ese punto, Ariel tardo aproximadamente tres días y medio con algo de mí ayuda en terminar y dejar sellado y preparado lo que venía siendo el fondo del automóvil, así como también el sistema automático que permitiría que cada asiento fuera retráctil dejando a la vista con el código establecido la parte que daría acceso al fondo del automóvil, era un sistema completamente nuevo, totalmente desconocido y que ingeniosamente Ariel lo había inventado en ese momento.

En su totalidad llevando así en el fondo del automóvil los kilos que en total serían de ciento cincuenta kilos, pero como algo adicional, se atrevió a añadirle un espacio más en la parte del tablero del automóvil, donde habría espacio para almacenar veinte paquetes más de mercancía, el control remoto era la misma llave del aire acondicionado del auto, así que todo estaba automatizado lo que garantizaba de alguna manera que no podría existir error alguno al momento que intentarán revisar el auto de una manera violenta.

Era demasiada ingeniosa su manera de trabajar, ya que a su vez le había fabricado una alarma especial para evitar que el auto llegara a ser desarmado desde el tablero, bloqueando cualquier tipo de sensor si no se aplicaba directamente la contraseña correcta que permitiera el acceso a los doble fondos ¡Todo un ingeniero astronómico era mi hombre el CEO Ariel!

Después de todo lo anterior, decidió cambiar el color del automóvil para no dejar huella alguna sobre su manipulación, aunque realmente no lo necesitaba, pero por el tipo de ansiedad que padecía mi hermoso hombre, estaba muy pendiente que cada detalle se presentara lo más perfecto posible.

Debido a todo ese tipo de razón, es que volvió a cambiar el color del auto y con eso parecía literalmente que ese automóvil venía directamente de la fábrica de la marca, no había más que hacer y los autos prácticamente después de dieciocho días exactos estaban completos.

Sólo faltaba entregarlos y era precisamente lo que se iba a provocar el día veinte de estar y permanecer al lado del hombre qué más he amado en toda mi vida, así que lo primordial en este caso era conducirlos hacia el lugar donde se encontraba David, ese día veinte cambiaría nuestras vidas para siempre.

David desde la primera llamada que me realizo días antes, no volvía a llamar, consideraba de alguna manera que en verdad no existía porque preocuparse, así que espero pacientemente hasta que me tomara el tiempo necesario para llamar y hacerle de su conocimiento el resultado final de los trabajos, no sin antes consultarlo.

—Te sientes preparado y listo para este paso final mi amor. —Le pregunté a mi amor sin soltar sus labios y recostados en su oficina que fue nuestro hogar por las últimas tres semanas.

—No te preocupes mi amor, realiza esa llamada que me siento más que preparado. —Me aseguró con su voz varonil y excitante.

Así que sin más espera y con los autos preparados para salir del concesionario de la empresa del CEO, tomé el teléfono y marqué el número secreto de David, mismo número que Ariel no conoció jamás, ¡Al menos no de mi parte!

—¡David ya hemos terminado los trabajos qué has solicitado! ¿Dónde deseas que sean entregados los automóviles?

Su sorpresa sin duda fue mayor al escuchar mi voz, esa era la respuesta que estaba esperando y no siendo de esa manera más que explicita, me respondió de inmediato.

—¡Tan pronto! —Respondió con un sobresalto en su voz.

—Bueno entonces considero que es momento de poner a prueba el trabajo de tu amigo, tráeme los autos a la bodega del sur, ahí estará salomón esperándolos con los automóviles así también después de revisarlos adecuadamente y si fabricaron algún tipo de mecanismo, que lo enseñen a la perfección para que no existan malos entendidos al momento de cargar la mercancía y de entregarla, después de todo ese procedimiento.

—¿Usted no estará presente en la entrega? Me imaginé que ese era el trato entre nosotros. —Le pregunté al momento de escuchar que Salomón seria quien recibiera los autos.

—Salomón está autorizado a recibir y entregar el dinero por el trabajo, dependiendo de lo que suceda y de cómo funcionen estos primeros dos trabajos, entonces estaríamos hablando de negocios ¡No me vayas a fallar princesa!

—¡Se lo juro que no David! Aunque sinceramente me encantaría entregárselos personalmente, creo que después de todo me lo debe, no fue una tarea fácil y prefiero que Salomón no continúe interviniendo en mi vida, es en verdad muy fastidioso depender de ese desquiciado.

Existió un breve silencio en ese momento, seguramente David confiaba plenamente en Salomón, pero mi insistencia y de seguro me arrepentí de haber insistido, es que David respondió a mis palabras.

—¡Entonces cambiemos el lugar de entrega! Sin más excusas de tu parte, me llevaras los autos a la finca de Salomón, aunque mencioné que es de Salomón, sabes a la perfección que es mi finca de seguridad, tratare en la medida posible de estar presente, pero no te lo garantizo princesa.

—¡Espero que si pueda estar presente David! Me parece aún más peligroso para Ariel, pero solo quiero que le quede claro que ¡Nadie puede tocarlo! ¿Estamos de acuerdo con eso verdad David? —Le pregunté con la pena colgando de mi alma.

—¡Daré ordenes exactas que se realice de esa manera Rubí! No te preocupes que no existirá peligro alguno.

Tras haber acordado el nuevo punto de entrega, aun no me sentía en lo absoluto segura de la situación, ciertamente la bodega era algo peligroso, pero la finca donde residía Salomón era aún peor, era prácticamente ingresar a la boca de un lobo maldito, no le temía, pero si estaba más que comprometida a guardar la vida de mi amante.

Me encontraba conversando con David, pero al teléfono no dejaba de ingresar la llamada de mi hermana, después de todo ella se comunicó conmigo y me pareció muy extraño que lo provocara de esa manera.

—Es mi hermana, ¿Por qué me estará llamando? Tú ¿qué crees amor? —Le pregunté a Ariel con la incertidumbre en mi rostro.

—Responde a la llamada, es mejor asegurarse de la situación. —Se apresuró a responderme Ariel.

—¿Qué sucede Alejandra? ¿porque la insistencia?

—Aparte que no te dignas a buscarme o llamar de vez en cuando, me recibes la llamada a la defensiva, ¿Dónde te encuentras ahora mismo? —Me preguntó Alejandra con una extraña insistencia y preocupación.

Me pareció aún más raro que Alejandra preguntara al respecto, pero mi hermana siempre debía conocer mis pasos, porque era la única que después de todo podría salvarme de cualquier peligro que corriera.

—¡Me encuentro con Ariel en su empresa! ¿Qué sucede, porque el misterio?

—Me preocupa de alguna manera lo que estás haciendo Rubí, no llegué a considerar que involucrarías a ese hombre en los negocios con David, me suena muy mala idea de tu parte ¿No crees?

—¿Cómo te has enterado de esa situación? No me digas que me has estado espiando.

Parecía realmente extraño que en ocasiones Alejandra se enterara de acciones o situaciones en las que solo dependía o no tendría que salir entre David y mi persona, por lo que entonces respondió de inmediato.

—¡No precisamente! Pero sabes perfectamente que en este mundo de la mafia se mueve mucha información, más bien uno de los informantes que se encuentran infiltrados en el cártel de David, me lo ha hecho del conocimiento, ¡Incluso me indico que en estos días entregaras dos autos en la finca de Salomón! ¿No crees que es demasiado riesgo para Ariel?

No solo se enteró que involucre a Ariel en estos negocios, sino que aparte se enteró de inmediato que llevaría los autos a la finca de Salomón, era muy extraño, pero no sospeche en lo absoluto de todo, más bien comenzaba a asegurar que los infiltrados del Duque, eran los que informaban todo y de muy mala manera para David.

—¡Sé que si lo es! Pero descuida, me he encargado que no sea de esa manera y no creo que David me falte a su promesa, a pesar de eso, siempre cuento con un segundo plan y me encontraba pensando en eso específicamente, lo importante es dejar una buena impresión en David en cuanto me presente con Ariel y los autos.