~CEO Ariel Montes~
De pronto me encontraba en una situación en la cual me sentía un tanto indeciso si llegar directamente a culminar de esta manera, debido a que mi madre me había programado una cita con la hija de una de sus amistades.
Nuria no era precisamente la mujer inocente que mi madre en su momento imagino que seria, esta mujer resultó ser un tanto más atrevida y pícara que cualquier otra, ¡Porque ni siquiera Rubí se atrevió a tanto de inmediato! con Rubí primero existió una química increíble de la cual estaba prácticamente renuente a querer olvidar, pero estaba a punto de resignarme de alguna manera que no podría volver a encontrar a Rubí en la vida.
Tras entrar en razón de alguna manera de los errores que estaba cometiendo en volver a caer en ese tipo de adicción en cuanto a sentirme obsesionado por la ansiedad que me provocaba el no conseguir estar con la persona que en ese momento deseaba entrañablemente, me tomé la libertad de llegar a aceptar esa cita con esta mujer que resultó ser más atrevida.
Al principio no tenía para nada la intención de caer en esa situación con ella, tampoco es que en algún momento me comportara como ese tipo de hombres que cediera tan fácil, pero ante la situación que se me estaba presentando y no quedar mal ante ella derivado de sus intenciones, no lo pensé más y decidí entrar en acción en ese momento.
Podría llegar a mencionar que la situación fue un tanto fugaz en cuanto al tipo de acercamiento que se estableció entre ambos, era una chica muy hermosa eso nadie se lo quitaba de encima, también era una chica muy fogosa y ardiente ¡Pero para nada se comparaba con Rubí!
Era inevitable de alguna manera comparar la forma y la manera en la cual comenzó este intento de olvidarme de Rubí con esta mujer que simplemente estaba en una situación de desesperación por sentirme dentro de su sexo, eso de alguna manera me estaba incitando a provocar con ella lo que en ese momento se me antojara, prácticamente me estaba permitiendo que me adueñara de su deseo y lujuria que se notaba a simple vista ¡Contaba con vía libre a su deseo y a su cuerpo!
Núria no se estaba limitando en lo absoluto en enseñar lo bendecida que era con su cuerpo, más bien parecía que ella trabajaba en un centro nocturno, lejos de ser una estudiante apasionada como lo aseguraba mi madre, a lo que me atreví a dudar ¿Sera posible que ella a escondidas de su madre hace esto muy a menudo? De igual manera podría ser muy hermosa Nuria, pero no era para nada comparable a lo que sentía por Rubí, ¡Jamás en la vida me imaginaria llegar a encontrar algún tipo de reemplazo para Rubí!
Lo que sucedió con Rubí fue simplemente maravilloso y hermoso en su momento, estaba ligado a su deseo, así como también a su recuerdo, me quedaría directamente con eso y en algún momento determinado tendría que llegar a enamorarme de una persona ¡Necesitado definitivamente no me encontraba! Por lo que debía tomar el tiempo necesario en la vida para llegar directamente a encontrar esa persona correcta o específica, pero definitivamente Nuria no era la persona indicada en mi vida, no porque no contara con las aptitudes o las cualidades de las cuales un hombre desearía de ella, incluso estaba brindando una buena experiencia íntima, pero para lo que mi cuerpo necesitaba y para lo que mi vida exigía, definitivamente Nuria no era la indicada.
Ciertamente Nuria provocó de alguna manera que mi excitación se trasladara a un punto agradable, eso no se lo puedo quitar y merece de alguna manera que se lo aplaudiera de esa manera, pero fue eso literalmente e incluso lo que Chelsea me provoco en su momento, aunque, ¡Aún mucho mejor que Nuria y sin afán de continuar comparando las circunstancias, definitivamente Rubí era la diosa de todo ello!
El asunto en concreto era que literalmente Nuria jamás podría enamorarme como tal, eso podría ser considerado por alguna circunstancia que este corazón ya estaba ocupado por Rubí específicamente ¡Así que sería muy difícil que alguien directamente logrará cumplir con mis expectativas en cuanto al deseo y al amor se refería! porque sólo Rubí fue capaz de despertar ese sentimiento de adrenalina que en mi vida necesitaba.
El sentimiento de adrenalina que necesitaba para sentirme con vida, por ello es que con todo el dolor del corazón de mi madre no podría aceptar a Nuria en mi vida, a pesar que no dejó de ser una buena experiencia en cuanto a la intimidad.
Nuria sintiéndose muy cómoda, recostada a mi lado como si existiera algún tipo de relación formal desde hace algún tiempo, no dejaba de acariciar y besar mi pecho y sus manos se extendían más allá del mismo, sinceramente no me sentía completamente cómodo al instante, pero podría decir que tampoco era indiferente a esa situación, ¡Si Nuria se sentía bien haciendo eso no se lo iba a impedir hasta el momento en el cual ella decidiera marcharse del departamento!
Esta ya era la segunda sesión de placer entre ambos, debido a que la primera fue como para acostumbrarme a tomar un cuerpo extraño e intentar moldear a mi manera. Deseaba que ese cuerpo desnudo en mi cama se tratara específicamente de Rubí, por lo que los gemidos que Nuria expulsaba de su interior eran más que complacientes.
Seguramente en su vida se llegó a sentir tan complacida de parte de un hombre, porque aunque no lo deseara de esa manera, pero no estaba solo teniendo sexo, me imagine a Rubí haciéndole el amor.
Nuria no permitió que me terminara de acomodar en su piel, dejando salir esa parte salvaje dentro de ella, liberó mi cabeza de su entrepierna, para dirigirse ella a mi abdomen bajo.
Esta segunda ocasión fue un tanto diferente, no veía a Rubí en ella, más bien comenzaba a observar a una mujer desesperada por ser amada y codiciada, creo que después de todo aprendí a ver esos detalles que muy pocos observan, porque seguramente Nuria nunca antes encontró placer y deseo de un hombre de la manera en la que me entregue, pensando en todo momento que se trataba de Rubí.
El departamento se inundó de gemidos y gritos desmedidos de Nuria, mientras que en lo personal mi comportamiento fue frio y sin mostrar ese sentimiento de satisfacción plena, lo que me imagine que eso provocaría cierto descontento en ella, pero se encontraba envuelta en esa desesperación por llegar cuantas veces fueran necesarias a su clímax, que no presto atención a lo que mi persona estaba o no sintiendo al entrar y salir de su cuerpo, más bien parecía errante en tierra de nadie.
—¡Estoy exhausta Ariel! ¿Tú, aun no terminas? —Preguntó la insensata de Nuria.
Aunque en verdad no fue de esa manera, pero no siendo un experto en saber exactamente cuando una mujer puede llegar al clímax máximo de su deseo, la verdad es que me abstuve en derramar mi deseo en su interior, no sentí la necesidad de dejar una gota de ese deseo en ella.
Todo eso provoco que Nuria comenzara a realizar preguntas que fueron más que innecesarias por el momento vivido por ella en específico.
—¡Por lo regular no pregunto este tipo de situaciones, porque considero que cada quien se expresa de diferente manera! —Mencionó al momento de no escuchar mí respuesta.
—El asunto Ariel, me encantaría saber de tus labios ¿Si he llegado a complacer tus expectativas? ¿Has quedado completamente satisfecho con lo que ha pasado entre nosotros? porque de no ser de esa manera puedo intentarlo hasta que te sientas satisfecho ¿Qué me dices al respecto? —Me preguntaba sin dejar de acariciar mi entrepierna e intentar una tercera ronda entre nuestros cuerpos.
La verdad no sabía que responder en ese preciso instante, porque no estaba para nada acostumbrado a dar una respuesta, de igual manera si ella deseaba conocer mi punto de vista, como un buen caballero me sentí en la obligación de responder honestamente, ¡Claro no iba a mentir en absoluto y todo lo que le hice saber fue completamente cierto!
—¡La verdad es que hasta el momento nadie me había realizado ese tipo de preguntas! —Le hice saber en ese momento a lo que continúe mencionando.
—Considero que en muchas ocasiones el simple hecho de sentir placer y dejarlo fluir en la intimidad, debería ser más que suficiente para darse cuenta, ¡Por ejemplo! no es porque quiera de alguna manera sentirme más complaciente que cualquier otra persona, pero al menos me considero que alcance tus expectativas, tú entrepierna y tus gritos me lo confirmaron de esa manera, por lo que de alguna manera de mi parte no podría quedar algún tipo de duda que has quedado satisfecha, ¿Oh me equivoco al respecto?
Nuria en ese instante sonrío de tal manera que no me quedó más que confirmar que realmente ella quedo completamente satisfecha, así qué, ¿Que más pruebas podría tener al respecto? tras ser directo esperé que me respondiera de una manera en la cual ella me confirmará la situación y de paso que dejara de hacer preguntas de mi punto de vista, ¡Estúpidas!
—¡Hasta el momento no había experimentado una situación como ésta, sin duda eres un hombre muy honesto y sincero con lo que mencionas y no te limitas en lo absoluto en decir lo que piensas! —Respondió antes de intentar llevarse nuevamente mi herramienta a sus labios.
—Eso es muy bueno de tu parte, me hace sentir segura ante las decisiones que pueda tomar de aquí en adelante, ¡Esta demás preguntar si me has provocado satisfacción o no! ahora sólo me quedaría preguntar algo que considero que es fundamental y que de alguna manera podría permitirnos abrir el camino para lo que pueda venir entre nosotros. ¿Puedo?
¿Qué era lo que pretendía en ese momento?, ¿que de pronto ella literalmente estaba determinando o asegurando que entre nosotros existiría algo íntimo o personal? definitivamente eso sólo podría caber en su cabeza, lamentablemente me vi en la obligación de interrumpir para aclarar.
—¿Cómo así que abrir el camino de lo que pueda venir entre nosotros? —Le pregunté sin dejar espacio a su respuesta.
—Disculpa lo que te voy a mencionar, pero considero que no te dado el punto de vista del cual puedas tomar como base para creer que entre nosotros pueda llegar a existir algún tipo de relación personal.
Nuria al parecer era de ese tipo de mujeres que, por estar una sola vez con ella en la cama, era señal clara y directa que el próximo paso era un noviazgo seguro, a lo que ella procedió supuestamente a explicar.
—Considerando el hecho que hemos pasado esta primera noche juntos y que literalmente nos hemos amado como si nos conociéramos de toda la vida, sinceramente me he sentido completamente satisfecha al estar contigo y considero que eres una persona muy especial, de alguna manera podría decir que no imagino mi vida sin ti. —Aseguro con una total confianza y certeza en sus palabras.
—Me has dejado completamente alucinada, situación que no creí que fuese posible en mi vida, pero me has enamorado de una forma tan exquisita y única que realmente deseo una relación contigo ¿Qué dices si nos seguimos encontrando y establecemos una relación personal entre nosotros? —Preguntó sin que mi intención fuera esa.
—¡Definitivamente no! —Exclamé mientras retiraba su mano de mi entrepierna.
—Discúlpame, pero sinceramente no tengo ningún tipo de intención en formalizar ninguna relación con alguien, sinceramente esta no es la excepción, no podría de alguna manera ocuparte en mi vida, porque siempre voy a considerar que cada encuentro es único y exclusivo de cada persona.
El rostro de Nuria cambiaba de colores y me imagine en ese momento que era por la vergüenza sufrida por mis palabras y rechazo, pero no deje que me respondiera sin hacerle saber lo que debía mencionar.
—Pero sinceramente no creo cumplir con ese deseo de tu corazón, de momento siento que mi vida está tomando un rumbo diferente, no estoy dispuesto a entablar ningún tipo de relación sentimental con nadie, si esto te molesta lamento decirte que no fue mi intención en ningún momento hacerte creer o intentar siquiera convencerte que entre nosotros pueda existir una relación, ¡Recuerda que provocaste que esto sucediera entre nosotros!
—Pero ¡¿cómo puedes decir todo eso Ariel?! Has sido tú el que me condujo hasta aquí cuando en verdad se trataba solo de una cena. —Reclamó con indignación en sus palabras.
Palabras que para ese momento no contaban con validez alguna de su parte, a lo que le respondí.
—¡Te invité a que entráramos a mi departamento, más que todo era para que conversáramos y cenáramos, pero en ningún momento mi intención se trató o se basó en qué llegáramos a quedar en algo íntimo entre los dos!
De manera brusca, Nuria se levantó inmediatamente de la cama, era evidente la molestia que ella sufrió en ese instante, se dirigió directamente a la ducha, salió dejando su ropa interior tirada en la cama ¿No entiendo por qué lo provoco? pero inmediatamente después se marchó sin decir una sola palabra, ¡Tampoco me iba a levantar para detenerla! Ella sabía lo que provocó.
Definitivamente después de ser una buena experiencia, ahora se había convertido en un final inesperado, me imaginé en ese momento que ella iba a inventar cualquier tipo de situación para contárselo a mi madre, pero al momento que mi madre me preguntó sobre Nuria a los días de aparecer en casa, simplemente no sucedió más nada, definitivamente a Nuria no le convenía en lo absoluto que su madre se enterará en la manera y en la forma en la que ella se entregaba a los hombres en la primera cita, así que después de todo no resultó ser más que una experiencia más en mi vida que resulto siendo un fiasco.
~El joven CEO sufrió de un fiasco en esa relación, pero desde ese momento el destino contaba con algo diferente para el CEO~
—¿Qué te parece Brenda si visitamos la capital? Deseo ir de compras. —Le preguntó Rubí a su hermana.
—¿De compras? Pero aquí puedes hacer las compras que desees.
—¡Pero deseo salir de este ambiente y distraernos! ¿Me acompañas o tendré que marcharme sola?
—¡Esta bien Rubí, solo porque eres mi hermana y también quiero que me compres unos caprichos!